Stronger| [tw] s.s (2)

diez

—Así que tu abuela quiere quitarte los poderes— dijo Scott, el cual estaba acostado en la cama de Nora y esta sentada en un pequeño sillón frente a él — Pensé que solo tenías una abuela.

—Yo también, pero al parecer tengo dos y una de ellas es una bruja malvada, ¡genial!— dijo con ironía — pero, ¿sabes que es lo peor? Que mi papá la contactó, pensó que era buena idea traer a la mujer que le dió la espalda cuando quiso formar una familia.

— Nora, él está preocupado por ti, sabes que todo lo que hizo de su vida fue protegerte, bueno, no siempre porque recuerdo que estaba todo el día en el trabajo pero te protegió de lo sobrenatural por un largo tiempo — le explicó su amigo, mirándola a los ojos— Y estos últimos meses él estuvo para ti, él habló con Derek para que te mordiera, te salvó la vida.

—Sí, todo lo que dices es cierto pero tenías que escuchar lo que dijo, no quiere que sea ambas cosas, cuando él tuvo la idea de la mordida, quería que volviera a hacer la de antes y no quiero volver a ser esa Nora.

—Para mi sigues siendo la misma Nora, pero ahora eres más fuerte — la reconfortó el lobo — Para mi sigues siendo esa niña que me ayudó en mi tarea de matemáticas a los ocho años, la que estuvo conmigo cuando mis padres se separaron, sigues siendo Nora, mi mejor amiga.

—Que cursi te has puesto, McCall — se burló la pelirroja para no llorar.

—Stiles tenía razón, eres malvada, mucho tiempo con Jackson y se te ha pegado su maldad — Nora soltó una carcajada.

— No lo niego — levantó ambas manos en forma de rendimiento, luego las bajó y soltó un suspiro — Extrañaba esto, gracias Scott.

—No me lo agradezcas, como ya te he dicho antes, no importa que no pasemos tiempo juntos o que no hablemos, siempre serás mi mejor amiga y siempre voy a estar para ti — Nora le sonrió y este también para luego arrugar su nariz — Muy cursi, ¿verdad?

—Sí, pero esta vez te lo dejo pasar.

Años después, Scott y Nora volvieron a pasar tiempo juntos y volvieron a compartir sus secretos, tal y como lo hacían de niños. A Nora se le había pasado la tristeza o, por lo menos, ya no pensaba en lo ocurrido y era todo gracias a Scott, que vino a distraerla. Sólo faltaba Stiles y todo sería como antes.

*

Al día siguiente, Nora se encontraba en la escuela, exactamente se dirigía a los cambiadores de los hombres ya que Dany le había pedido un favor y tenía que llevarle un par de fotocopias ante de su próxima clase. Cuando entró a los cambiadores, el aroma varonil atacó sus fosas nasales, no le agradaba mucho esta nueva habilidad de lobo. Al caminar todos los chicos la observaban, algunos estaban sorprendidos de ver una mujer allí y otros estaban más que acostumbrados a ver a la pelirroja. Una vez que encontró el casillero de su amigo, esta le hizo una seña para que no hable ya que escuchaba como Stiles y Scott estaban hablando del otro lado de la puerta del casillero de Danny.

—¿ Y sabes quien más es virgen?— escuchó a Stiles decir, está compartió una mirada divertida con Danny, el cual también estaba escuchando — Yo. Yo soy virgen.
¿ Sabes que significa eso? Que mi falta de experiencia sexual amenaza mi vida.— Nora podía notar la desesperación en la voz del chico y no podía más seguir conteniendo la carcajada. Danny le tapó la boca ya que se estaba divirtiendo con lo que el chico Stilinski estaba diciendo.
—Necesito tener sexo ahora mismo. Alguien tiene que tener sexo conmigo hoy.
¡ Debo tener sexo ahora mismo!

Danny la miro divertido, la pelirroja conocía esa mirada, algo malvado estaba por hacer. Este paso su hombro por el brazo de la chica y con el otro cerro la puerta de su casillero, llamando la atención de Scott y Stiles. Estos dos los observaron sorprendidos, Nora podía escuchar los latidos de Stiles que estaban muy acelerados.
—Está bien, nosotros lo haremos — habló Danny. Nora se dió cuenta lo que trataba así que siguió el juego