02. La Ilegítima

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~Cdmx, México~

Desde el área de "Aislamiento" del Complejo de los Caro,  Vanessa observó cada detalle de su habitación o más bien de su celda personalizada. Llevaba meses en dicha celda pintada de color blanco que asemejaba más una habitación de un hospital psiquiátrico. La celda tenía una puerta plateada con una pequeña ventanita, una pequeña cama de fierro, una almohada y una colcha, además de un inodoro y una pequeña regadera, porque eso sí, los Caro consideraban que Vanessa debía estar siempre limpia, porque a pesar de hallarse en aislamiento, no iban a desaprovechar a la que tenía unos de los mejores dones y debían seguir entrenándola, obviamente, dejándole claro que ella era una simple arma que ellos usarían a su antojo para cumplir sus viles propósitos.

Desde Diciembre trataban a Vanessa más como una prisionera y ella se sentía atrapada y también algo contrariada, pues ya no le hallaba sentido a seguir con vida y sin embargo le temía a lo que había más allá de la muerte; de alguna manera, halló la voluntad para resistir todos esos meses y enfocarse en entrenar, aunque odiaba a su mentora y a todos dentro del Complejo de los Caro, debía aguantar y por lo menos ver su estancia ahí como un medio, ya que si Ava la seguía entrenando, sería más fuerte y algún día, podría escapar. Por ahora, tenía que sacar el máximo de sus capacidades e impresionar a sus tíos, después de todo... ¿Qué tan difícil debía ser recibir más entrenamientos?

Vanessa había sido criada en el Complejo de los Caro desde que nació y desde niña recibió una especie de iniciación de entrenamiento, similar al que eran sometidas varias niñas de diferentes organizaciones: clases de ballet, las cuales requerían de mucha disciplina, lo que los Caro querían para sus niñas. Por supuesto que los Caro eran una familia algo tradicionalista y machista, y mientras que a las niñas les daban clases de ballet, a los niños de la familia los entrenaban con clases de taekwondo y karate. Y es que las divisiones debían ser claras, sus niños no podían tener la disciplina del ballet que era cosa de niñas, así que la mejor alternativa de enseñarles disciplina, era a través de dichas artes marciales.

Lo único que Vanessa les agradecía a los Caro, eran las clases de ballet, porque a partir de ellas, descubrió que la danza le apasionaba y que era lo que querría hacer si no estuviese atrapada en los muros de los Caro. A partir de las clases de ballet, Vanessa hizo investigaciones y fue autodidacta en el arte de la danza, viendo vídeos y programas de televisión relacionados a ello y poco a poco comenzó a ser su propia maestra. La danza era todo para ella, su escape, su medicina, su alegría, no había nada que disfrutase más que bailar y en las clases de ballet, destacó entre sus primas, algo que a sus tíos no les agradó mucho. El ballet para las Caro terminaba a los 15 años; mientras que en algunas partes de latinoamérica era tradición una fiesta de Quinceañeras para demostrar ante la sociedad que las niñas ya eran señoritas, para los Caro, el festejo de las Quinceañeras era iniciarlas en entrenamientos de combate. Vanessa sabía eso y se rehusaba a cumplir 15 años, pues no deseaba que le quitaran las clases de ballet, y se le rompió el corazón el día que cumplió esa edad y tuvo su Quinceañera. El combate era algo que le costaba muchísimo y por ello siempre fue considerada la más débil e insignificante de los jóvenes Caro. Poco a poco fue avanzando, pero siempre fue la que era peor para los entrenamientos, a diferencia de con el ballet, que ella fue la que destacó.

Y bueno, no solo era considerada insignificante por su debilidad en los entrenamientos, sino por el seno del que venía.

Olivia Caro no era hermana de sangre de Astor Caro, sino que era la hija de la segunda esposa de su padre Emmanuel y bien o mal, el hombre acogió a Olivia y la entrenó como a Astor y su hermana Emma, quienes nunca consideraron a Olivia parte de la familia y siempre la despreciaron, sobre todo al ver que parecía que su padre se preocupaba más por ella, cuando no era para nada cierto, pues Emmanuel Caro, abusaba de ella en ocasiones. Olivia también era muy diferente a Astor, Emma y Emmanuel, pues solo trataba de sobrevivir ante esa horrible vida pero manteniendo las caretas de sumisión ante Emmanuel y un fuerte carácter para entrenar y ganarse el respeto de la gente de Caro. Una esperanza para Olivia vino cuando el padre de Vanessa apareció en su vida, él era un hombre que venía de una familia muy importante mundialmente, por lo que a Olivia le sorprendió que hubiese parado en México por negocios, y más importante, negocios con los Caro. Claro que el hombre desconocía quienes eran realmente los Caro y sus verdaderas intenciones, pero puso poca atención a ello, más al haber quedado fascinado con Olivia; ella creía que ese hombre podía ser tal vez su salida ante una vida tan difícil y todo pareció ir de maravilla entre ella y él, pues sí se habían enamorado y tenían una muy fuerte atracción física. Olivia fue realmente la razón por la que el hombre siguió negociando con los Caro y es que no quería dejar dicha aventura, pero Astor los descubrió y no bajó a Olivia de prostituta, esto provocó un enfrentamiento entre el padre de Vanessa y Astor y eso estuvo por arruinarle el negocio a Emmanuel, pero lo que realmente lo arruinó, fue cuando el hombre descubrió quiénes eran los Caro y lo que querían. Se sintió utilizado no solo por ellos, sino también por Olivia que fue lo que más le decepcionó y sin importarle nada más que su corazón roto y jurando no volver a caer así por ninguna mujer, se marchó, sin saber que Olivia estaba esperando un bebé suyo.

Nessa [•Pietro Maximoff•] (Anya universo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora