~Manzana~

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Narrador omnisciente:
La primavera y el verano habían terminado. Se acercaba el otoño a grandes pasos dejando ver un paisaje que parecía de lo más prometedor. La época favorita de aquel pelirrojo que había tomado cierto hábito de salir todas las mañanas con aquella anciana a barrer la pocas hojas que caían de los árboles. Sin duda el clima, la vista y su salida de la rutina le hizo entender varias cosas y entre ellas era que no podía seguir dependiendo de las personas como lo hacía. Armado de valor levantó el teléfono para agendar una cita con Avdol pidiéndole que no le dijera nada aún a su madre a lo cual accedió después de algunos berrinches. También llamó a Rohan, para saber cuando sería la primera sesión para la temporada otoño-invierno, era su preferida y la que más dinero le dejaba.

Polnareff se sentía orgulloso de ver como volvía a levantarse apasionado por las cosas que le gustaban pues encontró aquellos cuardenos viejos llenos de dibujos de Iggy, algunos de la anciana y otros de paisajes en general. Había llegado el día de la consulta, gracias a que Pol lo llevó en su motocicleta no tuvo inconvenientes para llegar pero fue bastante precavido por si Avdol le había mentido y su madre le esperaba oculta en algún lugar.

-¡Noriaki! —El mayor se lanzó a abrazarlo en cuanto lo vio cruzar la puerta— No sabes lo preocupado que estaba —casi dejandolo sin aire.

-Lamento causar tantas molestias... Supongo que sabes lo que pasó.

-Quiero saber tú versión... Y sé que me la contarás ¿Por eso estás aquí, no? —soltandolo e invitándolo a sentarse.

-No sé ni siquiera por dónde comenzar... Pero ahora estoy bien —una sudadera y pantalón dos Tallas más grandes cubrían perfectamente sus vendajes a excepción de los del cuello— Estoy con Pol —Avdol hizo una mueca pues al parecer ya había pensado en esa posibilidad— corté lo malo de mi cabello y he terminado todo lo que hay en mi plato...

-No preguntaré si lo mantienes dentro de tu estómago —pues era claro que no, tenía una piel amarillenta y sus dientes lo delataban pues aún que tratara de cubrir el mal aliento y lo oscuro aún era notable— Pero gracias por fingir frente a Pol, debe estar bien con eso. Supongo.

El chico solo hizo un gesto desviando la mirada y alzando los hombros. Terminó contando todo tal y como sucedió, al llegar a la parte de Jotaro ni siquiera pudo llorar, en toda la sesión no soltó ni una sola lágrima, al parecer había llorado tanto que no tenía de dónde sacar más, ni siquiera le veía el sentido a hacerlo. Solo se sentía vacío y perdido, era algo que preocupó bastante a Avdol, incluso tener ataques de ira o ser terriblemente sensible era mejor a no sentir nada.

-Bien, asegúrate de pasar con Erina para que revise tu medicamento una vez más.

-Lo haré —despidiéndose— ¿podrías darme una ventaja de cinco días?

-¿A qué te refieres?

-Sé que tienes que decirle a mi madre dónde estoy... Pero no quiero meter a Pol en problemas, no en más. Hoy mismo tengo trabajo así que me pagarán en dos días, conseguiré un apartamento y...

-Eres menor de edad y en tu condición no puedo escribir que puedas vivir solo.

-Pronto seré mayor de edad.

Avdol recordó que era cierto, por eso el plazo de cinco días y no 3. Soltó una pequeña risa para tomarlo del hombro y dar pequeñas palmadas.

-Cuenta conmigo... Y ven a verme el jueves, te compraré un pastel. Invita a Pol.

Kakyoin sonrió y aceptó. Al salir se despidió de Pol, le dijo que no tendría problemas en regresar pero este insistió, al final Nori terminó ganando diciendo que llevaría la cena.

Un bocado más [Jotakak]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora