RIVINCITA | YOONMIN/AGUSTMIN |

¿Rottura?

X.

La puerta abriéndose de golpe lo asusta. Deja el libro que estaba leyendo sobre la mesita de centro. Mira hacia el reloj digital sobre uno de los muebles, este marca las cuatro am. Todo en la casa está a oscuras a excepción del pequeño espacio donde él estaba sentado; siendo iluminado por una pequeña lámpara.

-¡Mierda!

Agust se tambalea al cerrar la puerta. Lo mira golpear su costado contra el sofá principal . Se apoya en el respaldo agarrándose la cabeza, Yoongi se pone de pie mirándolo curioso. ¿Borracho de nuevo? Suelta una risa sin gracia y el enojo vibra en su pecho ¿Qué demonios le pasa? Yoongi no encuentra motivos para que se comporte de esa manera. La mañana había empezado bien, hablaron con Jimin y estaban ansiosos por ir juntos a visitarlo. Para el atardecer, se había ido sin avisar, mientras Yoongi compraba la cena.

Entonces ¿Qué le pasaba?

-Agust, ¿Estás bien?

-Oh, Yoonie-arrastra las palabras.

Mierda. Está muy borracho.

-¿Dónde has estado?

Agust pone los dedos sobre sus labios y sonríe torcido. Yoongi lo mira de brazos cruzados, enfadándose aún más.

-¡Shh!- se vuelve a tambalear y Yoongi lo sostiene antes de que se vaya de bruces contra el suelo.

El mayor frunce el ceño cuando el olor a cigarrillo y alcohol llega a su nariz. Mirándolo más de cerca nota la ropa desaliñada y húmeda, recorriendo su rostro para verificar que no tuviera ningún golpe, lo hace soltar un jadeo y apretar sus labios temblorosos. Mira el montón de chupetones en el cuello de su hermano y el olor de perfume de mujer que no había sentido antes.

Por eso había estado tan raro, le gusta una chica.

El pensamiento lo aturde, dándole náuseas. Vamos, Agust nunca había tenido ningún interés en mujeres, y estaba enamorado de Jimin tanto como él. Pero ahora...Se acostaba con ellas y actuaba raro.

¿Lo había hecho sentir incómodo? Quizá Yoongi había malinterpretado las cosas, quizá Agust no sentía lo mismo.

Quizás...

Quizás...

-Camina, debes ir a la cama-gruñe, apoyando su brazo sobre su hombro.

-Mmm, hueles delicioso- murmura inclinado sobre el cuello del mayor.

-Y tu como la mierda. Camina y cállate-él se ríe por lo bajo y Yoongi bufa.

Se tropiezan por el pasillo y, finalmente, Yoongi lo arroja sobre la cama de golpe.

-Ouch..- se remueve boca abajo, con Yoongi jaloneándolo para quitarle los zapatos -Oh, Yoonie...Todo da vueltas.

-¡Mierda, Agust! -Yoongi lo mira en pánico, jalándole el brazo hasta sentarlo-¡Siéntate!

-Te engañe- carcajea, meneando su dedo índice frente al mayor.

-Muy gracioso, hijo de puta-gruñe, con la paciencia esfumada.

Agust sonríe de nuevo, luchando hasta sostenerse en sus codos. Yoongi le quita el abrigo y los calcetines, todo el tiempo con el ceño fruncido y los ojos repletos de lágrimas. Le quita el pantalón y suelta otro sollozo al mirar la ropa interior húmeda y el lápiz labial rojo adornar su vientre.

Suelta un sollozo, mirando el cuerpo inconsciente de su hermano en la cama. Sus labios están separados, soltando pequeños ronquidos y tiene un brazo sobre su cabeza. Yoongi no aparta la mirada de las marcas adornando la pálida piel.