| Capítulo 30 |

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No era una salvación, era el fin.

Nuestras vidas estaban terminando con nuestros planes a un increíble futuro en cualquier lugar del mundo.
El universo conservo nuestro amor fluyente en la luna y el sol brillante.

Después de lo sucedido; encontrar a Conway sin signos vitales, ver a Jack destrozado, amigos y familiares bajando la cabeza en nombre de Conway, nuestra habitación había tornado en un pequeño hospital.

El hilo rojo que nos conectaba mutuamente fue reemplazado por cables y maquinas para mantener el corazón de Conway a flote, esos cables; estaban a minutos de cortarse sin remedio a ser unidos de nuevo.

-No puede continuar así, tiene que irse y dejar de sufrir- Volkov lo miraba de reojo.
-No sobrevivirá esta noche Volkov, el doctor a firmado su setencia de muerte- Respondía Gustabo bebiendo de su cafe.
-Me duele demasiado verlo así- Horacio bajaba la mirada a su cafe.

-Mamá- Habló Jack separándose de Conway.

Gire mirando a Jack quien miraba detenidamente a Conway tosiendo fuertemente, el color de su piel se había vuelto pálida teniendo en sus ojos un miedo impredecible de ver a su padre morir frente a el.

Me acercaba a ellos tomando la mano de Conway, Volkov se acerco tomando un vaso de agua encontrado en su mesa de noche.
-Toma- Habló Volkov ayudando a Conway que sorbiera de el.
-Gracias Volkov- Su voz se perdía entre el silencio.
-¿Pueden dejarme un minuto a solas con ____?- Preguntó cerrando los ojos reposando su cabeza en la suave almohada.
-Vamos Jack, Sara esta afuera con los demás- Volkov se encargo de Jack.

Gustabo y Horacio salian mirando a Volkov totalmente preocupados.

-¿Como estas?- Pregunté separando el poco cabello que salia, estorbando su vista.
-Increiblemente bien, nunca había descansado de esta manera- Bromeó señalando su cuerpo reposando en la cama.
-¿Como estas tu?- Me miró sonriendo de lado tocando suavemente nuestras manos entrelazadas.
-Estoy bien- Lo miré absorbiendo las lágrimas a punto de salir.
-Recuerdo la primera vez que te vi, en el estacionamiento- Sonreía.
-Al momento de verte...me quebrabte en el abismo de la soledad, no se que fue lo que hiciste pero estoy eternamente agradecido por lo hecho- Beso mi mano.
-Despues de años entre guerras y peleas sigo mirando los mismos ojos del angel que capturó a este Dios-
-Y me duele el dormir y no poder despertar y mirarte- Ladeaba la cabeza lentamente.
-¿Podrias hacerme un favor?- Preguntó.
-Dime- Me coloqué de pie.
-Podrias ir a mi despacho y sacar de la caja fuerte unos papeles?- Preguntó.
-No tardo- Abría la puerta.
-¿Pueden entrar? Ire por unas cosas- Señale atrás mía.
-Si- Respondian a la vez.

Bajaba las escaleras rapidamente corriendo al despacho.

Entre en el inhalando el unico aroma de Conway.
Miraba la caja fuerte hundiendo mi mente en que serán los supuestos papeles.

Coloque el codigo escuchando al instante un sonido responiendo a la contraseña correcta; mire unos sobres entre los grandes billetes de Conway.

Miraba los nombres en cada uno.

_____
Jack
Gustabo
Horacio
Volkov
Michelle
Brian

-¿Brian?- Pregunté.

Escuché ruidos provenientes de nuestra habitación, salía inmediatamente subiendo los pedales de las escaleras de dos en dos.
Entre a la habitación mirando que todo seguia normal y nada malo había pasado.
-Aqui tienes- Entregue los sobres.
-¿Puedes repartirlos por mi?- Preguntó mirando a los demás.

Asentia dejando los sobres en las manos de los indicados en leerlo.
-No lo habran hasta que me muera, odiare verlos llorar como putos maricones- Ordeno forzando su voz más grave de lo normal.

ʜᴀsᴛᴀ ϙᴜᴇ ʟᴀ ᴍᴜᴇʀᴛᴇ ɴᴏs sᴇᴘᴀʀᴇ  | ᴊᴀᴄᴋ ᴄᴏɴᴡᴀʏ |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora