THE SHIFTER ✧ ShinKami

6 » Dilema del villano

Ni siquiera el mismo Denki entendía cómo había sido posible que pasara en cuestión de segundos de estar aterrado ante la idea de enfrentarse a esos tipos a sacar valor de donde no sabía que tenía para salir de encima de Shinsou y ponerse de pie dispuesto a pelear.

—Ah, ¿Estabas trabajando? Siento la interrupción.— le dijo, con una sonrisa en el rostro en alto viendo a los contrincantes. Repentinamente se sentía confiado, sabía que ganaría, y le gustaba pensar que con eso impresionaría al peli-morado. —¿Debería darte un refuerzo?

—No, gracias.— se negó Shinsou también parándose para ponerse en guardia. Sabía que por más pro-héroe que fuera y más entrenamiento que tuviera le costaría demasiado trabajo el usar su poder en tantos sujetos a la vez, pero se vio rechazando la propuesta por puro orgullo. —No necesito la ayuda de un traidor.

"Nunca me iría con un traidor" "No necesito la ayuda de un traidor" vaya déja vú.

—Olvida eso. Yo me encargo, guapo.

El rubio no se sentía como si fuera él mismo del todo. No era como si alguien más lo poseyera, pero sí como si su personalidad se adaptara a la situación y sus acciones no fueran su decisión cuando activó su quirk: las corrientes acumulándose entre sus dedos ni siquiera le sorprendían, y supo manejarlas de forma completamente profesional como si usar aquel don fuera algo de su día a día y nunca lo hubiese perdido. Lanzó sus rayos contra los villanos con la suficiente fuerza para dejarlos atontados. Shinsou sólo pudo dejar que en sus propias pupilas se reflejara una enorme cantidad de centellas doradas mientras observaba como el otro hacía en su lugar el trabajo que se suponía era suyo.

Kaminari literalmente había debilitado tanto a los malos hasta el punto de dejarlos sentaditos en el pavimento uno con uno, espalda con espalda, balbuceando y con los cabellos locos por la estática; Listos y prácticamente en bandeja para que Shinsou hiciera el resto y pudiera usar la especie de bufanda que siempre llevaba como parte de su uniforme de héroe en el cuello, con la que usualmente capturaba armas, para capturarlos a ellos e inmovilizarlos, y así llevarlos con las autoridades.

—… ¿Están muertos?

—Nah.— restó importancia. —Puedo controlar la cantidad de voltios en cada ataque, y fui preciso en usar los suficientes como para no freírles el cerebro.— explicó. Hizo una pistola con los dedos, sobre los que apoyó el mentón, y sonrió coqueto hacia el contrario. —Hay que ser inteligente para portar un quirk como este. No soy sólo una cara bonita.

Shinsou se le quedó viendo un momento. Sí estaba impresionado de lo mucho que Kaminari había mejorado en el control de su don desde la época de la UA, más bien, de lo mucho que había cambiado en general en sólo cuatro años... pero de todos modos fingió indiferencia, rozándole el hombro cuando le pasó por al lado.

—Oye, ¿A dónde vas?— Denki preguntó siguiéndole el paso detrás. —¿No me dirás ni un gracias?

—Como si le fuese a dar las gracias a un villano.

Ante aquello, los ojos dorados viraron hasta ponerse en blanco, agotados porque ahí iba de nuevo con eso.

—¿Puedes dejar de llamarme así? Estás siendo desagradecido y grosero.— reprochó mientras llegaba trotando a su lado. —Hace poco curé a tu gata, ¡y ahora acabo de salvar tu trasero de una grande con nueve tipos contra los que no hubieses podido solo! 

—¿Qué me dice que no estás haciendo todo para conseguir acercarte a mí como parte de un plan de la Liga? No me sorprendería, si ya lo hiciste una vez.

—¡Oh, vamos!— exclamó el más bajo, indignado con la insistencia ajena en hablarle mal, y especialmente con el hecho de que los ojos violáceos se mantenían al frente y no volteaban a verlo. —A ver, si según tú soy un villano, ¿Por qué ayudaría a un héroe a atrapar a otros villanos?