El humano y el alfa [yaoi/gay](omegaverse)

Capitulo 18: EL FRÍO EN MI ESPALDA.

Narra phibie.

Me encontraba en esta casa de nuevo, en la habitación en la que alguna vez Elian y yo jugábamos a ser libres sin serlo.

Miraba sin esperanza la ventana, estaban cayendo pequeñas gotas, no quería levantarme porque ya sabía lo que mis ojos verían.

El dolor de mi cabeza me quitaban la ilusión de que sólo fuera un sueño, al sentir la respiración de Elian en mi hombro, hizo que girará mi cabeza encontrandolo a mi lado, tenía un vendaje en la cabeza, una sombra a su lado hizo que levantará la vista.

Eleazar estaba recargado en la puerta cruzado de brazos, el traje que tenía puesto estaba roro, y tenía un leve rasguño en la mejilla.

Cerré los ojos de nuevo, odiaba tanto esta situación.

- ¿estas bien? - preguntó Eleazar.

-¿cómo debería estar? - pregunté de vuelta, tal vez si quería olvidar todo de una vez.

- Lamento que hayan visto eso, será mejor que se queden un tiempo hasta que sepamos que están a salvo - lo mire de vuelta a los ojos, el aun no sabia que yo recordaba todo, y eso era lo mejor si quería mi libertad, debía olvidar este sentimiento unilateral.

- Ver algo como eso no es de todos los días, tampoco es como que la gente crea eso si lo que temen es que digamos algo - dije algo irritada sentadome.

- Eso lo sabemos, pero como viste anoche, hay una guerra en nuestro mundo, y lamentablemente ustedes están en medio.

- Si sabían que estaban en guerra no debieron traernos en primer lugar - respondí un poco molesta, mire mis manos y tenían leves cortadas, probablemente por el accidente.

- Lo lamento - Se disculpo - El día de hoy descansen, les trairan comida más tarde.

- gracias, respondi sin ganas volviendo a revisarme y cerré los ojos.

Narra Peter.

Tenerlo aquí de nuevo, estaba a dos pisos lejos de él y su aroma se me impegmaba en la nariz, Me sentía feliz y también culpable.

Muchísimas veces había dicho que los humanos eran egoístas, y justo ahora yo era el más egoísta de todos, mire alrededor, el salón y cristales rotos en el suelo, pétalos, me sentía idiota por pensar que algo como esto en medio de lo que había sucedido era buena idea.

Quería subir a verlo, ver como seguía del golpe, la verdad, el verlo inconsciente lleno de sangre me asustó mucho, de no ser porque huyeron la bruja y sus vampiros  probablemente lo habrían devorado por su aroma.

Aún me causaba intriga el Vampiro híbrido, lo teníamos encerrado en el sótano, y aún así estaba muy tranquilo, lo único que pedía era ver a Elian.

Acomode mi corbata y decidido comencé a caminar en busca de James, necesitaba respuestas y como es que tenía relación con Elian.

Narra Elian.

Abrí los ojos lentamente, encontrándome con una ventana frente a mi, en la cual pequeñas gotas de agua se resbalaban.

Phibie no estaba ahí, me levante de la cama recordando lo que había sucedido, y salí de la habitación en busca de ella, camine por los pasillos susurrando su nombre, al final del pasillo había unas escaleras, las baje llegando al salón de anoche.

Todo estaba echo un desastre y había gotas raras e incluso el cuerpo de una criatura, mi aceleración se aceleró y seguí con la búsqueda de phibie, al ver a dos hombres acercarce al cuerpo me escondí bajo las escaleras, gracias al cielo no me habían visto, así que lentamente camine hacia el pasillo a un lado de las escaleras.

Comencé a correr mirando a todos lados, sin darme cuenta, choque con algo lastimando mi herida.

- Elian - el señor Peter me llamó por mi nombre, al verlo frente a mi me asuste e intente retroceder, pero la cabeza me dolía.

El señor Elian me cargo en sus brazos y camino hacia un sofá que había en el pasillo.

me recostó en el y se puso de cuclillas a mi lado, su rostro estaba tan cerca que sentía su respiración.

- lamento haberte asustado anoche - se disculpo dándome la más sincera cara de arrepentimiento que había visto jamás.

Lo mire a los ojos, parecía que era sincero.

¿Realmente lo era?

- ¿puede decirme que pasó? - pregunté casi en un susurro, aun me daba miedo, y me daba miedo romper un límite con el y hacerlo enojar.

- Si, claro que si, solo no ahora - Contestó acomodando un poco mi vendaje. - debes primero recuperarte.

- ¿donde esta phibie? - pregunté preocupado.

- Me dijeron que tomaría una ducha en su habitación ¿revisaste el baño? - preguntó, me senté en el sillón intentando ir a buscarla sin embargo el se adelantó y me cargo en sus brazos.

- yo te llevo - mi corazón se aceleró de forma inconsciente, era extraño ya que nunca me había pasado eso.

- puedo caminar - balbuce viendo el pasillo por donde el caminaba, regresado por donde yo había huido de los otros Hombres.

- descuida, tu pequeño cuerpo no pesa - Dijo, para luego dedicarme una mirada fugaz y desviando la al frente, comenzó a subir las escaleras llegando al pasillo de arriba.- además, anoche me pegaron, y sentír tu piel hace que desaparezca el dolor. - por alguna extraña razón parecía avergonzado.

- ¿es como comer carne humana? ¿Algo así como la escendia del humano? ¿Como cuando hueles el queso? - pregunté a lo que él solo sonrió, haciendo que me diera aún más miedo, el quería comerme.

Al llegar a la habitación, phibie abrió la puerta sintiendo alivio al verme.

- Elian, ¿donde estabas? - Peter me bajó y me lance a sus brazos.

- estaba buscándote - Confesé sin soltarla, ella culminó a Peter, y sin soltarme entró en la habitación y asoto la puerta dejándolo afuera.

- Elian, no vuelvas a salir, es peligroso - me reprendió, Mire su herida la cual solo era un chichón y un pequeño rasguño.

- ¿estas bien? - pregunté preocupado - ¿qué crees que nos hagan? - pregunté a lo que ella se senro en la cama pensativa.

- Me dijeron que no nos dejaran irnos Hasta que estemos a salvo - dijo sin ganas - esperemos que sea pronto.

Las palabras de phibie me daban esperanzas, de que fueramos libre pronto, y de pronto.

James venía a mi mente, ¿Donde estaba?