Capitulo 57

3 3 0
                                    

Decidí entrar a un callejón cargué mi arma y esperé a que me alcanzarán, eran tres hombres mas altos que yo pero no me importó en ese momento.

— Hola bonita, no deberías estar sola a esta hora — mencionó uno con una sonrisa de evidente maldad

— Te podemos llevar a tu casa si tu quieres — mencionó otro

— ¿De verdad les gustaría visitar mi casa? — pregunté perversamente

— Claro que sí ¿Donde vives angelito? — contestó el tercero

— En el infierno — conteste sacando mi arma y disparándole a uno directo a la cabeza, los otros dos comenzaron a correr pero no llegaron lejos

Salí de ahí debía alejarme, pues ya había hecho dos cosas mal, asalte una farmacia y mate a tres tipos, llegue a otro antro y entre era de madrugada así que no había mucha seguridad, había mesas vacías y solo me senté, no me apetecía seguir bebiendo pero se me acercó otro grupo de chicos,  seguí bebiendo pero no hasta perder el control, termine bailando y cantando ahí

— Te pareces mucho a la cantante, una que se llama Kat eres idéntica — menciono una chica

— Ella es mas linda — asegure

Trate de evadir esos comentarios pues no quería delatarme y ya estaba amaneciendo.

— Saco unas nuevas canciones le diré al Dj que las ponga — comentó otra

Comencé a escuchar mis propias canciones y a bailarlas, me deje llevar tanto que estaba cantándolas y todos me veían impresionados, lo note cuando deje de cantar pues casi me caia

— ¡Lo sabia eres tu! — grito

Se empezó a correr la voz rápidamente y me preocupe pues no quería eso, me metí a uno de los baños y trate de buscar una salida, pero estaba demasiado ebria para saltar de esa altura.

Terminé saliendo por la puerta principal con un gorro puesto, en mi cabeza tenía sentido pero solo llamé más la atención, me siguieron tomandome fotos y sabía que estaba todo mal, como pude salí de ahí aborde un taxi y le pedí que solo me dejara cuadras adelante.

Eran al menos cinco cuadras, le pedí que parará pues había perdido mi cartera

— Señorita esa historia ya me la se — mencionó fastidiado el taxista

— Escucha te pagaré mañana es que no tengo mi dinero conmigo, no voy a robarte son solo dos euros

— Para mi es mucho — contestó irónico

— Mañana te doy cien, te lo prometo y si no me crees buscame en el banco, además  ¿No sabes quien soy? — jamas creí usar esa frase pero eran medidas desesperadas

— No — dijo seguro

— Mirame bien, soy Kat, la cantate — dije como si fuera obvio, se giro a verme detenidamente

— Si te pareces pero no te creó — sonrió —  pero esta bien solo porque me hiciste reír, te veo mañana en el banco a las diez a.m. y que sean 200 — bromeó

Me baje del auto un poco más tranquila, sabía que le pagaría y solo debía pasar esa noche en la calle.

Pase una hora sentada en una banca esperando el amanecer, me sentía cansada pero luchaba por no dormirme "¿porque no le robe el dinero a esos tipos que mate?" me preguntaba a cada momento.

En cuanto amaneció, me sentí aliviada, tenia mucha hambre llevaba un día entero sin comer nada solido y con una deshidratación severa por todo el alcohol que bebí.

CatarsisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora