-¡Ya voy! -grité desde mi habitación aún con la toalla puesta.
Había quedado de verme con Sofía esa misma mañana. Me había llamado nerviosa y realmente parecía necesitar hablar con alguien o quizás con alguien no, sino conmigo y ciertamente aunque no era la persona más seria de este mundo también necesitaba hablar con ella.
-¿Acaso quieres fundir el timbre? -le encaré al abrir la puerta, pero entró sin siquiera dar los buenos días- No he podido cambiarme siquiera, ¿Qué te pasa?
-¿Por qué no me dijiste que aceptar esto -señaló su anillo de compromiso- traía tantas cosas en fila? -solté una risa confundida.
-¿Qué dices? ¿Ahora resulta que has amanecido y te diste cuenta que estás casada desde hace más de seis meses?
-No lo digas así que suena peor. -se tapó los oídos y se tiró en el sofá.
-Sofía, no estoy entendiendo. ¿Pasó algo con Blad? -me senté a su lado.
-No, todo está... excelente, es sólo que.. -suspiró- tuvimos una plática anoche, es todo.
-¿Plática de qué? -me miró con aflicción.
-Familia. Blad quiere una familia, tener hijos.
-Sofía, están casados.
-¿Y eso qué?
-¡Es tu esposo! Ya no son novios, por supuesto que quiere una familia contigo. ¿Acaso nunca lo has pensado?
-Lev, soy feliz con él y lo amo ¿Sí?, pero creo que no estoy lista. -habló con timidez sobando uno de sus brazos. Se sentía entre la espada y la pared por algo que realmente no era tan grave.
-¿Se lo dijiste? -asintió.
-Sabes que es comprensivo, pero tampoco le ha hecho feliz lo que le dije. -se calló- ¿Crees que me deje por esto?
-Claro que no. -aseguré- Son novios desde la secundaria, no va a dejarte por algo que tiene solución.
-No lo sé, amaneció triste y realmente quiere una familia, Lev.
-¿Y tú no? -movió los hombros.
-Ser madre nunca ha sido una meta para mí a como lo es para ti. Si pasara probablemente no sería planeado, ¿Sabes?
-Oye, -tomé sus manos- que no lo desees ahora no significa que ames menos a Bladie. Él lo entiende, estoy segura.
-Lo sé.
-Pueden hablarlo con calma de nuevo, aunque sabemos que tu decisión no va a hacer que las cosas cambien. Está loco por ti. -sonrió poco animada.
-Ya no hablemos de mí. El que está loco por la otra es alguien más. Dime, ¿Harán algo hoy?
Me levanté para caminar directo a mi habitación y ponerme una muda con Sofía pisando mis talones.
-¿Algo como qué?
-Salir, no sé. ¿No te ayudaría a pintar tu habitación?
-Ese era el trato, pero creo que lo ha olvidado. -dije- Tampoco se lo pienso recordar, quizás sea bueno no pasar tanto tiempo juntos.
-¿Por qué lo dices?
-No lo sé. Creo que nos estamos involucrando muy rápido en la vida del otro, ¿No crees?
-¿Sabes qué creo? Que tratas de evitar lo inevitable, nena. Admítelo, te gusta.
-Apenas lo conozco.
-Eso no responde lo que quiero saber. Soy tu mejor amiga, no puedes engañarme.
-No me gusta. Somos amigos, él lo dijo.
ESTÁS LEYENDO
Para llegar a ti
Romance[Sin editar] Levina, una escritora en pleno éxito, conoce a Harris, un chico que ha decidido vacacionar en el pequeño y acogedor pueblo de Santa Helena, donde nació y creció. Ambos se verán envueltos en algunas casualidades que le harán acercarse mu...