Capítulo 09: "Feeling b"

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Tenían cierto aire de punks.

Diría que se encontraban en los últimos suspiros de sus lejanos 20. Aunque el de pelo rapado parecía mucho más joven. Luego estaba ese tipo que había sido el único que lo había saludado,con aquél cabello hecho un desastre,pero, le sentaba bien.

Después estaba el sujeto alto de nariz respingada, que miraba en todas direcciones como si estuviera buscando escapar del cubículo.

Cuando hicieron contacto visual este lo saludó con la cabeza,sin decir nada.
parecía incómodo,era obvio que todos venían juntos y resultaba un poco estúpido hablarles a los demás con un extraño en medio.

Fue el mayor y el más fornido de ellos quién rompió el silencio con la clase de comentario que no se esperaría el joven Landers - ¿Qué tanto miras?- Heiko dio un respingo. El tono grave y tajante que Till había usado lo había sacado de sus pensamientos.

El joven se aclaró la garganta y habló aparentemente calmado- Lo lamento,no era mi intención incomodar.

-Descuida-intervino Zven- Till es un tipo bastante introvertido y no le viene bien recibir tanta atención de otros. Ni siquiera que lo observen. Se siente juzgado.

- yo no los estaba juzgando- acotó con sinceridad el joven- es sólo que son algo excéntricos para la clase de personas aburridas que suelo ver todos los días.-esperaba que se tomaran el "excentricos" como un cumplido y no lo molieran a golpes entre los cuatro en ese mismo momento.

-¿Vives aquí?- habló el tipo de nariz respingada.

- Hmm...si,bueno de hecho voy a mudarme en unos cuantos días. Sólo vine a ver a mi hermana y mi madre que viven en el edificio.
¿Van a quedarse aquí mucho tiempo?

- ¿para que quieres saber eso?- otra vez el tal Till intervenía.

- por si puedo ayudarlos en algo.

-¿algo como qué? Apenas te conocemos -Oliver le dió un codazo a su compañero. Acaso olvidaba que no conocían a nadie y que un guía inesperado les venía bien el tiempo que se quedaran en Berlín.-No seas imprudente-murmuró para su compañero.

- Olvídenlo entónces.-Landers no se sentía realmente ofendido, sólo quería ver como reaccionaban el resto de los presentes.

-No le hagas caso- otra vez el rubio intercedía por él- ¿Como te llamas,guitarrista?

-¡Oh! soy Heiko,un gusto.-ambos se tendieron la mano con un apretón.

vaya! Yo también tengo un nombre horrible- todos rieron,incluso el propio Heiko- he estado pensando en cambiarmelo a uno más común como ¡Richard! - se le acababa de ocurrir,aunque de echo el nombre no le venía nada mal. Si empezaban a ser conocidos,más le valía tener un buen nombre artístico. Y Richard le gustaba.

- El tuyo debe ser peor que el mío para querer cambiartelo- aquél tipo comenzaba a caerle bien.

-Mucho peor, Zven es un nombre de anciano decrépito,nada digno de mi.

-Vale vale,si es horrible.

Mantuvieron una breve conversación en la que Zven ( ahora Richard ) presentó a sus compañeros. Christoph Schnieder, Oliver Riedel...y desde luego el sujeto que ya sabía,se llamaba Till.

-También somos músicos. Bueno o eso es lo que pretendemos ser.

Heiko les contó que formaba parte de un grupo de punk alternativo que llevaba unos cuantos años en la industria. Se habían hecho de cierta fama y se podía decír que les iba bien,aunque definitivamente esperaban crecer mucho más y hacerse conocidos en otras partes del mundo. Su mayor sueño era conocer América.

-Ganamos una competencia hace poco y grabaremos en un estudio profesional. Es por eso que estamos aquí.

- ¿¡En su primera competencia?!- Heiko apenas podía creerlo- Wow, entonces, deben ser muy buenos o tienen a la suerte de su lado. Nosotros tuvimos que batallar algunos años, a pesar de que nuestra vocalista tenía el privilegio de contar con alguien que podia fácilmente introducirnos en el medio.

- ¡oh! Eso es interesante,no hay muchas mujeres que se atrevan a incursionar en ese género.

-Si, definitivamente rompe todos los esquemas. Tengo fe en que con ella llegaremos muy lejos, su voz es como la cereza del pastel.

- ¿ y como se llama? La afortunada -intervino Till que para ese punto,parecía más relajado.

- ¡Carlota! -Heiko se mostraba orgulloso,se notaba un brillo especial cuándo hablaba de ella.- Carlota Von Meyer. Ojalá pudieran escucharla,es encantadora.

-No lo dudo- el pobre tipo tenía una cara de enamorado que no era fácil de ocultar.- Tal vez si podamos hacerlo. Pasaremos aquí una semana entera.

- ¿De veras? Entonces llegan en el momento preciso-Heiko metió la mano en el bolsillo de su pantalón y sacó un par de pases que tendió a los jóvenes. Till lo tomó primero y Oliver se acercó para poder verlo mejor- Lamento que sólo sean dos pero,esta vez tuvimos suerte de agotar todas las entradas. Los estaba reservando para unos amigos,aunque ustedes parecen más interesados. Considerenlo un regalo,ya saben,de músico a músico.

"Feeling b"
12 / 07/ 89
22 hrs.
Arena Berlín

El papel de color olivo era sencillo y se encontraba gastado por las esquinas.

La caligrafía era lo único presentable en él. - pueden decír que van de mi parte y conseguir que los dejen entrar en caso de que pierdan los pases.- las puertas del elevador se abrían- Bueno,tengo que bajar-dijo Heiko.

-Gracias por las entradas- dijeron los chicos.-Heiko sonrió.

- ¡qué tengan suerte! Nos vemos pronto- las puertas se cerraron.Aquella despedida había sido sincera.

-Bien,ahora ustedes tres pueden dejar a la suerte decidir quién me acompañara al concierto del hombrecito- Till se guardó el pase en el bolsillo sin consultar a sus compañeros que lo miraban con los brazos cruzados.

- ¿y quién ha decidido eso? Te recuerdo que lo trataste como una mierda al pobre- Richard jugaba con el otro pase-Admite que antes de que mencionara a la chica te importaba un carajo su banda. Tú sólo quieres aprovecharte para ligar con su vocalista.

-Tú también.

- ¡porqué no van los dos y dejan de pelear como siempre!-exclamó Schnieder harto.

- ¡Pues entonces,cuál es el problema!- espetó Zven contra el pelinegro que lo miraba fijamente.

Se hizo un silencio incómodo que fue interrumpido por el sonido del elevador abriendose- Vamos a disfrutar ahora que podemos,mañana tenemos que estar a primera hora en el estudio- Schnieder fue el primero en salir del elevador con Oliver,Zven y Till a sus espaldas.

Lo que Till y Zven no imaginaban es que estaban más cerca de Charlotte de lo que creían.

 𝐏𝐔𝐏𝐏𝐄   𝑻𝒊𝒍𝒍 𝑳𝒊𝒏𝒅𝒆𝒎𝒂𝒏𝒏 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora