La complejidad de estar a tu lado || THIAM ||

Prólogo

Theo y Liam llevaban varios meses viéndose y hablando a escondidas, a ambos les gustaba pasar tiempo tiempo juntos aunque la mayoría de éste terminaban peleándose a golpes. La quimera, luego de mucho tiempo pensándolo, decidió hablar con el Alfa para poder salir oficialmente con el pequeño, aunque la conversación no terminó del todo bien, o al menos no como al chico le hubiera gustado...

- Scott... ¿Podemos hablar con momento? -preguntó algo nervioso el joven de ojos grises.

- Sí, claro. No hay problema -contestó el moreno con una sonrisa. Ambos salieron de la casa del Alfa para poder hablar a solas.- Dime, ¿Qué pasa? -Interrogó el joven al chico junto a él.

- Oye... Quería saber tu opinión sobre algo... -comenzó a hablar el castaño con nerviosismo. Sentía que el corazón se le iba a salir del pecho, pero realmente quería estar con el ojiceleste y haría cualquier cosa por él.- Liam y yo... Bueno... Hace un tiempo que estamos hablando más... Saliendo a comer... Y esas cosas... Yo... Quería saber si... ¿Puedo salir con Liam? -dejó salir el de ojos grises sin más.

Scott no hablaba, sólo se dedicaba a examinar al chico junto a él. Su cara no demostraba ninguna emoción, su reacción química no demostraba nada más que confusión y sus latidos eran normales, Theo estaba asustado, jamás había estado tan asustado en su vida, tenía miedo de que Scott lo golpeara o volvieran a mandarlo al infierno. Minutos después, el moreno rompió el silencio tan incómodo que se había formado.

- Lo siento, pero no. No quiero que estés con Liam. -sentenció el pelinegro con molestia cruzándose de brazos.

- ¿Qué? ¿Por qué? -interrogó el joven alterado, sin darse cuenta sus ojos comenzaron a llenarse de agua lentamente- ¿Por qué no me dejas estar con él? Scott... Yo... Yo realmente lo quiero...

- Me da igual lo que sientas, Theo, pero aunque seas parte de la manada y él confíe en ti, yo no lo hago. -contestó con severidad- ¿Cómo sé que no estás mintiendo de nuevo? ¿Cómo sé que no lo estás manipulando? -preguntó el moreno con enojo.

- No quiero que confíes en mí, sácame de la manada si eso quieres pero... Pero yo quiero a Liam... Y él me quiere a mí... Él sabe que cambié, vió el cambio por él mismo... Sólo quise hacer las cosas bien pero Liam tenía razón... No debí hablar contigo... -bufó con enojo intentando entrar nuevamente a la casa del mayor pero éste fue tomado del brazo con fuerza, al voltearse miró a Scott confundido- ¿Qué haces?...

- Tú no entrarás. No sabes lo que es el amor, y nunca lo sabrás... Alguien que asesina a su propia hermana teniendo sólo diez años no merece conocer el amor... -gruñó el alfa con enojo- Ahora vete, no quiero verte cerca de Liam por ahora. Déjame pensarlo un tiempo, hablar con él y demás. Cuándo yo decida, tú podrás verlo.

Theo quería despedirse de Liam pero Scott no se lo permitió, el alfa mostró sus ojos brillantes de color rojo como la sangre a modo de amenaza logrando que la quimera se alejara susurrando un suave "Lo siento, Li" para que éste lo oyera.

Ya habían pasado tres meses del hecho, Liam y Theo no podían verse ya que el pequeño era escoltado por Stiles y Scott a donde sea que vaya. El pequeño beta vivía con Derek y Stiles en el loft del ex alfa, así no podía escaparse sin que los mayores lo supieran. Ahora el moreno era el entrenador de Lacrosse así que éste iba a buscar a Liam todas las mañanas y luego lo llevaba nuevamente al Loft, cuidando de que Theo no apareciera en la escuela, en el campo o aún peor, en las duchas, porque sí, el rubio también era escoltado hasta la puerta del baño y de los vestidores.
Todo estaba siento insoportable para los enamorados, pero Mason, como buen amigo, decidió ser el intermediario, le pidió a Theo su número de teléfono y luego se lo pasó a Liam para que éstos pudieran hablar por mensaje. Quizás no era la mejor manera, pero era lo único que les quedaba para poder mantenerse en contacto.