La complejidad de estar a tu lado || THIAM ||

Mañana juntos

Al día siguiente, Theo se levantó una hora antes de que Liam tuviera que ir a la escuela. Preparó el desayuno con delicadeza y amor, odiaba cocinar pero por su novio podría ser el mejor Chef del universo entero. Preparó unas tostadas junto con un café con leche para ponerlo en una bandeja e ir al cuarto donde estaba el pequeño aún dormido. Entró con cuidado dejando la bandeja en la mesa de noche con una sonrisa y comenzando a mover sutilmente al más joven.

-Amor... Levántate por favor... -Hablaba la quimera con voz suave y dulce. Cuando el beta por fin abrió los ojos le regaló una amplia sonrisa a su novio.- Buenos días, dormilón... Vamos que no puedo permitir que llegues tarde o ya no vas a poder quedarte aquí... -Agregaba con una sonrisa dulce el castaño.

-¿Es tarde?... -Preguntó un ojiceleste muy adormilado y alegre.

-No, tienes cuarenta minutos aún, te traje el desayuno. Lo preparé yo solito y sin receta!.

Dice emocionado el chico ayudando a su novio a sentarse en la cama. Una vez sentado, Theo le pone el desayuno sobre su regazo mientras agarraba su propia taza de café y mirando a su pareja con una amplia sonrisa.

-¿Qué tanto miras?. -Interroga el beta aún algo dormido.

-La perfección... -Susurra sonriente.- Admiro al chico más hermoso del universo en mi cama y desayunando junto a mí...

-Theo Raeken, no creí que eras tan cursi... -Bromeó Liam alegre acomodando su cabeza en el hombro de su novio.- Gracias... Está delicioso... -Prosiguió el joven beta con una sonrisa dulce en sus labios.

-Me alegra que te guste... Ahora vamos, ya preparé tu ropa y la deje en el baño así cuando sales de la ducha no tienes frío. -Suspira bajo con una sonrisa.- Lo lamento, soy demasiado molesto, ¿Cierto?

-No! Eres realmente adorable... No creí que fueras así... Me encanta! -Dice alegre besando dulcemente a su novio en la mejilla.

Al terminar el desayuno, Theo juntó las cosas para llevarlas a la cocina mientras que Liam fue a ducharse. El pequeño, al terminar, se vistió y salió con una sonrisa tarareando una canción. Al ver a su novio su sonrisa se ensanchó, la quimera estaba limpiando mientras cantaba una suave y dulce canción romántica.

-Guau, Theodore Raeken, ¿Cantando?. -Preguntó bromista el beta con una amplia sonrisa.

-Liam, ¿Ya estás listo?. -Devolvió la pregunta alegre y volteándose para mirar a su chico a los ojos.- Bien, vámonos que se hace tarde.

El pequeño quiso quejarse pero su pareja no le dió tiempo, el de ojos grises tomo al rubio por la cintura junto con su mochila para luego salir de la casa y subirlo a la camioneta. Lo dejó en el asiento del copiloto cerrando rápidamente la puerta para luego subirse al asiento del conductor con una sonrisa.

-Oye! Ésto es secuestro... -Bufó bajo el rubio haciendo un puchero mientras se cruzaba de brazos.

-No es secuestro, es llevarte a la escuela para poder vernos más seguido, bebé. -Contesta con una sonrisa comenzando a conducir.- Por cierto, ¿Tienes entrenamiento hoy?

-Sí, termino a las cuatro, ¿Por qué lo preguntas?. -Interroga el pequeño alegre.

-Porque le prometí a Stiles que te vendría a buscar y te llevaría al Loft. Si tú quieres, claro... -Comenta sonriente el castaño.

-Me encantaría, pero no bajes de la camioneta. -Advierte con leve molestia el más joven.

-¿Por qué no bajaría de la camioneta? -Consultó curioso el joven adulto. No entendía porque su novio no quería que baje del auto para verlo, ¿Tendría vergüenza de ser homosexual? ¿O de que lo vieran con él?.

-Es que eres muy guapo y no quiero que nadie intente alejarte de mí.

Se sinceró el más joven girando su vista hacia la ventana ya se sentía apenado por lo que acababa de decir. El mayor soltó una leve y dulce carcajada para, por fin, aparcar la camioneta en el estacionamiento de la preparatoria de Beacon Hills. Volteó a verlo sonriente y le tomó la mano con ternura haciendo que el menor volteara a verlo confundido. El mayor puso su mano libre en la mejilla del chico para acariciarla con ternura y darle un sutil pero dulce beso en los labios, al separarse lo miró a los ojos con una amplia sonrisa.

-Nadie puede alejarme de ti, Liam... Te amo y eso es lo único que me importa...

Susurró alegre contra los labios del chico haciéndolo sonreír sin saber que había varios espectadores viendo aquella linda escena. Entre ellos estaban Scott, Nolan, Corey y Mason.

-Hacen linda pareja... -Susurró Mason con una sonrisa tomando la mano de su novio.

-Aunque odie aceptarlo, sí, se ven bien juntos y Theo cumplió su palabra... -Agregó el Alfa Verdadero sonriente.

-Vamos, Scott... Ellos se aman y se nota que esa tonta quimera lo cuida como si él fuera oro. Y eso es algo que nadie más puede hacer... Liam ya no tiene tantos ataques de ira como antes... Theo ya no es un completo idiota es más... Hasta diría que realmente le importamos y podría dar la vida por nosotros... Deberías agradecer que él haya entrado de de esa manera alocada a la vida de nuestro niño... -Comentó Mason alegre viendo como la pareja bajaba de la camioneta y comenzaba a acercarse a ellos con una sonrisa. -Y ahí viene la pareja del año...