Todos los involucrados terminaron reprendidos por sus sectas. En el salón de Yunmeng Jiang, frente a Jiang Cheng y Lan Xichen, se encontraban Lan Sizhui y Jin Ling. Habían intercambiado prendas y habían hecho una promesa de matrimonio frente a todos.
—¡No van a separarnos! —dijo Jin Ling sin soltar la mano de Lan Sizhui.
—Lo lamento, líder Jiang... Ze Wu-Jun, perdónennos por favor —se disculpó Lan Sizhui e hizo una reverencia hasta el piso mostrando lo apenado que estaba.
Jin Ling no se movió aunque Lan Sizhui jaló su manga, al final cedió y se agachó.
Jiang Cheng estaba enojado pero trataba de contenerse debido a Lan Xichen. Aunque si fuera por él ya habría disciplinado a Jin Ling incluso si era el líder de una secta. Tendría que meditar más tarde para tratar de liberar la molestia que no podía sacar con gritos en ese momento.
—Debieron esperar a una petición formal —sentenció Jiang Cheng preocupado porque los Lan se negaran.
—¡Pero no quiero esperar!
—Deja de gritar, ya te disculpaste, al menos muéstrate arrepentido —respondió Jiang Cheng y Jin Ling guardó silencio.
—Lan Yuan —dijo Lan Xichen llamando con cariño a su sobrino —¿tu respuesta fue sincera? Lo pregunto como parte de tu familia.
Lan Sizhui asintió y ambos explicaron los motivos de su propuesta apresurada: los ancianos del clan Jin llevaron algunos jóvenes de la misma secta para entrevistarlos y presentar a los más "adecuados" como candidatos a pretendientes de Jin Ling. Sin duda, los consejeros estaban preocupados por el linaje y deseaban apresurar una boda ahora que su líder había alcanzado los veinte años.
Sus acciones provocaron que Jin Ling entrara en pánico por un posible matrimonio forzado, así que ideó la forma más escandalosa de proponerse para que cualquier familia noble de la secta Jin se negara a arriesgar su orgullo presentando un pretendiente sabiendo que Jin Ling había elegido a alguien. Ser la segunda opción era un estigma que nadie deseaba soportar.
—Nadie va a casarte si no lo deseas, eres líder de tu secta —Jiang Cheng se masajeaba las sienes intentando comprender el funcionamiento de su mente joven.
Lan Sizhui estaba rojo y sumamente apenado, pero no se atrevía a relajar la postura, sencillamente miraba al piso. Ambos creyeron que era el fin del mundo y la sensatez de Lan Sizhui lo hizo responder que podía renunciar a él si era necesario.
—Líder Jiang, creo que es momento de hablar. Si los jóvenes ya declararon sus sentimientos debemos encontrar una solución.
Jiang Cheng miró a su sobrino reprobando su presencia, luego hizo un ademán para que los dejaran a solas.
En cuanto se fueron, Jiang Cheng le invitó una taza de té para calmar las emociones.
—Ze Wu-Jun ¿cómo se encuentra el Gran maestro? —dijo extendiendo la mano para animar a Lan Xichen a sentarse en la mesa con el emblema del loto en el centro y el té listo para ambos.
—Se encuentra bien. Suele tener estos episodios a menudo —dijo Lan Xichen sonriendo. Sin mencionar el nombre de Wei Wuxian ya se sabía quién era la razón de los corajes del gran maestro.
Jiang Cheng negó con la cabeza. A donde sea que estuvieran, su familia daba una mala impresión.
—Más tarde iré a disculparme. La intención era hablar con ustedes para valorar un posible compromiso, no deseábamos saltarnos las normas.
—Le agradezco la consideración. Sinceramente no veo obstáculos para el compromiso, pero no soy el padre de Lan Sizhui. Como líder puedo dar mi bendición pero tendrá que hablar con mi hermano y mi cuñado.
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Los lotos de Gusu
RomanceFIC XICHENG: Jiang Cheng siempre estuvo enamorado de Lan Xichen, pero las cosas eran demasiado complicadas... "La serpiente violeta dio a luz, dicen que el bebé tiene los ojos dorados y es blanco como el jade"