Prodigium ~kookmin~

Capítulo 20: Revelaciones

Esa mañana había transcurrido normal, sin ningún susto y ambos salieron de su habitación como si nada hubiera pasado ayer, cada quien se dirigió a su casillero. Tae llegó por detrás y lo asustó, Jimin al voltear a verlo no pudo evitarlo y lo abrazó, sorprendido le regresó el abrazo y le preguntó -¿Todo bien Jiminssi?

-No o si, la verdad es que no lo sé

-Anoche me dejaste preocupado con tu mensaje

-Es que no sé qué hacer y necesito hablarlo con ustedes, podrías ir de nuevo al árbol, necesito de su consejo.

-Sabes que si- mientras le acariciaba la cabeza- pero por ahora vamos a clases ¿ya sabes cuándo te quitarán tu yeso?

Jimin negó con la cabeza -la otra semana tengo cita fuera para ver cuándo me lo quitan.

Así se fueron platicando rumbo al salón entre riendo y jugando, Jimin se sentía feliz porque en la secundaría jamás había podido hacer lo que estaba viviendo.

Al terminar las clases Jimin fue directo a la biblioteca para buscar algún libro que leer en lo que esperaba a sus amigos, al entrar vio a una chica en el mostrador, le llamó mucho la atención, tenía un cabello largo y ondulado de color cobrizo, le pareció muy bonito, su piel estaba bronceada y tenía unos ojos grandes también muy bonitos, se acercó a ella y le preguntó -Hola, de casualidad ¿trabajas aquí?

Ella respondió con una enorme sonrisa -no, hago un servicio becario para mi colegiatura, vengo aquí después de mis clases especiales, pero como hoy no tuve vine antes ¿necesitas ayuda?

-La verdad es que sí ¿me podrías recomendar algún libro?

-Claro ¿sobre qué tema te gustaría?

-Una amiga me recomendó buscar sobre comedias románticas- dijo un poco apenado- pero no se me ocurre ninguna.

Ella salió del mostrador y le pidió que lo acompañara -aquí en esta sección tenemos lo que son las lecturas de romance, como verás también están más géneros relacionados a este. Mira, este es uno de mis favoritos- le extendió un libro con una portada que realmente dejaba ver que sería una historia donde lo haría llorar.

Jimin le agradeció mucho y le pareció muy amable la chica, así que se animó y se presentó -por cierto soy Jimin, espero toparte más seguido.

-Yo soy Alaissa, cuando necesites ayuda con libros o platicar me puedes encontrar aquí, a veces me aburro un poco porque vienen pocos, pero disfruto mucho el estar rodeada de libros.

-Claro, vendré y te diré sobre lo que me pareció el libro, nos veremos después.

Se despidieron y Jimin iba contento con el libro en la mano, realmente se había sorprendido de haber tenido el valor de hablar con la gente, no sabía qué pasaba con él, pero eso le gustaba, sentía que podía al fin coincidir con gente que no lo juzgara ni lo viera feo. Llegó al árbol y comenzó a leer, todo iba bien hasta que llegó a una parte algo triste en el libro que lo hizo llorar, estaba tan metido en la historia que no se percató que alguien se había sentado a su lado

-¿Por qué lloras pollito?- esta frase lo hizo mirar sorprendido y a la vez molesto, sabía de quién venían esas palabras

-¿Ahora soy un pollito?- mientras fruncía el entrecejo e hinchaba los cachetes.

Sin poder evitarlo, Jungkook pellizco la mejillas de este y riendo le contestó -no pude evitar toparme con tus pantuflas de pollito esta mañana y he notado que tu pijama tiene uno, me parece que va ad hoc contigo, al menos ya no te diré ratón.

-entonces yo te diré conejo- dijo firmemente Jimin esperando ver la reacción de su compañero.

-¿Te parezco un conejo?- mientras se tocaba la cara.

Jimin soltó una carcajada y le había parecido muy tierna la reacción, así que le respondió -es que cuando te ríes dejas ver una sonrisa con unos dientes de conejo.

Jungkook se trató de tapar la cara avergonzado -está bien, tú ganas, te diré pollito en privado si no me dices conejo frente a los demás, tengo una reputación que mantener- mientras cruzaba los brazos y levantaba la barbilla- por cierto, venía a preguntarte ¿enserio no te molestó que te ayudara con aquello?

-Nop- respondió Jimin de manera burlona -creo que hasta sentí más cómoda la venda ¿sería mucho pedir si me pudieras ayudar con ellas en la noche? Creo que al fin pude dormir sin sentir que mis brazos se sintieran como si alguien los tuviera prisioneros.

-Claro, con gusto- en eso se detuvo mirando que venían los amigos de Jimin y con un semblante serio y algo tajante le dijo -me retiro, creo que no soy bienvenido aquí, te veo en la noche pollito.

Jimin no comprendía esa reacción, pero al mirar el semblante de su amigo Tae pudo comprender que entre los dos no se llevaban bien.

-¿Qué hacia ese aquí? Espero no te haya molestado.

-Al contrario, vino a preguntarme unas cosas sobre la habitación, al final de cuentas compartimos cuarto.

-Debo confesar que no me agrada que se acerque mucho a ti, no es muy buena influencia Jimin, suele jugar y aprovecharse de la gente, es alguien sin escrúpulos que le gusta tomar ventaja de quien puede.

-¿Lo conoces?- preguntó HaNeul

-Para mí desgracia sí, es el ex de una amiga mía y vi cómo le rompió el corazón mientras le ponía el cuerno con otra chica y a esa chica con otra, así que sí, para mi desgracia tuve que toparlo en este lugar, pensé que podría librarme de él, por mi amiga no le partí la cara en su momento, pero si te hace algo no dudaré en hacerlo.

-Pero él ha sido amable conmigo.

-Así juega él, no te confíes, pero bueno ¿Qué nos querías contar?

Después de haber escuchado cómo se había expresado Tae de Jungkook, se guardó la idea de poderles decir que empezaba a sentir algo por su compañero, así que tenía que pensar en algo más y rápido antes de que sospecharan.

-Verán- decía con miedo mientras jugaba con sus manitas -creo que me ha empezado a llamar la atención, no sé cómo se llama, pero creo que será mi compañero de baile- mintió en parte, porque si le había llamado la atención un chico que había visto cuando Hobi le había dado el recorrido de la academia y pudo apreciarlo mientras bailaba cuando llegaron al estudio de danza.

HaNeul abrazó a Jimin -Jiminie corazón, me da gusto que empieces a abrirte así con nosotros, espero que puedas conocerlo pronto, y si pasa cualquier cosa, nosotros estaremos aquí contigo.

Tae lo agarró de los hombros y le hizo una señal de aprobación, realmente eso lo había animado, jamás pensó que la gente pudiera aceptar el hecho de que era gay, palabra que aún le costaba decir, pero que poco a poco iba comprendiendo y abrazando, no era malo, solo era una forma diferente de amar.

Así pasaron una muy buena tarde entre risas, y confesiones, el ambiente era demasiado agradable, hacía muy feliz a Jimin, incluso le dolía la panza de tanto reír, no recordaba esa sensación en años.

Los 3 se despidieron, Tae y Jimin se dirigían a su edificio cuando Tae tomó la mano de Jimin y este se sorprendió.

-Enserio Jiminie, ten mucho cuidado con él, no te dejes engatusar, mucho se rumora que le encanta jugar con las personas y odiaría verte lastimado por su culpa, prométeme que no te vas a dejar llevar por sus encantos.

-L-lo prometo- esto lo dijo con intención de hacerlo, pero una parte no quería creerle, había sido demasiado amable con él y no podía aceptar lo que Tae decía de Jungkook, pero tampoco tenía la intención de desconfiar de su amigo.

Cada quien entró en su habitación y ahí fue cuando lo vio, con una sonrisa y de la manera más amable le dijo -hola pollito, ya se te fue la tristeza por el libro, deberías leer cosas que te animen ¿no lo crees?

Jimin asintió e hizo seña de que debía cumplir con su rutina, Jungkook aceptó y tomó las vendas de este, esa noche todo pasó muy rápido y no podía negar que le gustaba la atención que este le daba. Terminando los dos se desearon buenas noches, le costó conciliar el sueño, entre lo que sabía de Jungkook y lo que le dijo Tae, no sabía qué hacer.