DETENCION [ En edición ]

Jungkook

Era lunes por la madrugada, jungkook, estaba durmiendo como de costumbre, hasta que su alarma empezo a sonar, con pereza se levantó y la apago, aún eran las 6AM, los rayos del sol aún no eran visibles, bufó y se tumbó de nuevo en su cama cerrando los ojos.

recordaba cuanto odiaba los lunes, cuanto odiaba despertarse temprano, y cuanto odiaba tener que ir a la preparatoria, típico de cualquier adolescente.

—¿Porque mierda tengo que ir a ese maldito colegio?— Si algo le molestaba a el eran los lunes por la mañana, aunque vamos ¿A qué ser de este mundo no le molesta? no sentía ánimos. cerro los ojos un momento que terminó siendo media hora, se removió y como si su cama quemará se levantó rápidamente al notar que se había quedado dormido.

Maldita sea! salió disparado de su habitación tirando la sábana que lo cubría por las noches, aunque al ser muy alto apenas lograba cubrirle los tobillos.

Se dirigió al baño de manera rápida y hizo lo que pudo para arreglarse.

Tuvo que recortar su ducha, que al parecer, en un día tan estresante como estos, era lo único que le relajaba al menos por la mañana, los trabajos era muchos y las tareas parecía que no tenían fin, los maestros no ayudaban en nada, siempre con una cara de "saquenme de aqui" la cual le regalaban a sus alumnos.

Salió corriendo de su casa, sin comer ni peinarse, casi se arranca una oreja al momento de poner su camiseta blanca, su piercing, recién hecho ese fin de semana, aún le dolía, y ahora el dolor había aumentado, juraría que casi se le cae la oreja.

Llegó por fin a el instituto, y casi cae desmayado por la cantidad de olores que había por los pasillos.

Nada como mil aromas diferentes atontando tu nariz.

Había muchos alfas y omegas de nuevo ingreso, podia ver diferentes grupos de amigos saludandose entre si, al parecer ya se conociam entre ellos, ya tenía suficiente con el perfume de los profesores, su nariz no era sensible, pero tampoco es como que le agrade olfatear cada pizca de olor

Camino por aquellos pasillos, en el que en uno pudo ver a lo lejos a su mejor amigo jimin, un omega, que por cierto, gracias a la diosa Luna que el si era inteligente y tomó susprensores, para que su olor disminuyera.

— Kook! Alli estas! ¿De que sirve que seas tan alto si no puedo encontrarte fácilmente? — jimin se acercó próximo a jungkook y apretó su hombro en forma de saludo.

— De tantos olores que ahí aquí creo que me voy a terminar desmayando — Jungkook agitó su cabeza, levemente arrugó su nariz tal cual un conejo, ¿Un chico muy rudo no?

Jimin lo miro sonriente ante tal gesto — ¿Seguro que eres un Alfa? — El Omega soltó una carcajada al ver a el pelinegro voltear los ojos ante su sarcasmo.

Caminaron juntos hasta el salón de jimin, para su mala suerte no habian quedado juntos, jimin miro atento a jungkook, pudo ver en su mejilla una cicatriz, algo borrosa pero visible, trago saliva y se atrevió a hablar — Porfavor Jungkook, que este año sea diferente, tu sabes a que me refiero — Jimin toco su propia mejilla, dando a entender a jungkook lo que queria decir.

Ahora fue el turno de el alfa de tragar saliva.

— Mientras que ese idiota no me mire todo estará bien — El rubio negó, y desvío la mirada hacia el suelo, quería decir muchas cosas pero era mejor guardarlas para después.

— ¡El tuvo la culpa y lo sabes! solo me estaba defendiendo, no se que tiene en la cabeza, no se en que momento todo se torno tan, tan.. tan extraño — El Omega lo miró, no tenia idea de que contestarle porque en el fondo el tampoco lo sabía, así que solo se limitó a animar a jungkook.

— Te veré en el receso, estaré en la cafetería, ya sabes — Jungkook asintió y se despidió de jimin antes de verlo entrar a su salón.

El Alfa camino hacia los baños, todo este momento habia tenido el cabello alborotado y no se tomo la molestia de recordarlo hasta ahora.

Entró y se colocó frente a un espejo, mojó sus manos con el agua que salía del lavabo, y trato de peinar su cabello, pero se perdió al verse en el espejo de forma atenta, y al notar su cicatriz, se frustró — Chanyeol eres una mierda —

— ¿Que te pasó? Ahora solo haces que quiera romperte la cara cada vez que te veo — El pelinegro no pudo no bufar al recordarlo y al pensar que sabía que no debía de atentar contra el, ya que el año pasado esto era lo que ahora lo había puesto en la mira de el director y los maestros.

Debia controlarse y mantener la compostura, lo intentaría, tal como jimin dijo, Que este año sea diferente.

Jungkook era orgulloso, no se contenía tampoco, cosa que en el pasado le dio problemas, muchos problemas, no era un loco desquiciado, pero tampoco era una persona paciente y que se creyera eso de " la violencia no resuelve" el pensaba que siempre que se necesitará estaba permitida.

Y más si era contra un idiota tocándole los huevos.

Terminó de peinar su cabello y la alarma en su celular lo regresó de sus pensamientos, debía llegar rápido a su salón antes de que fuera la hora, dió media vuelta y se fue.

— Bien vamos a empezar este caos—