DETENCION [ En edición ]

Extraño

Jungkook sospecho que algo iba mal en el preciso momento en el que recibio una llamada inesperada de su mejor amigo.

Le contó lo que sucedió, desde los apuntes de Yoongi hasta el problema que tuvo en dirección por la supuesta "agresión" a su compañero.
Intento repelar pero fue inútil puesto Taeyong era excelente para convencer. Aunque puede que el profesor también fuera algo ignorante.

Jimin no se salvó de la detención, el director lo recibió sorprendido en su oficina, conocía a Jimin y nunca imaginó que el se involucraria en algún problema, nunca fue de recibir quejas sobre el, y era algo que le agradaba, puesto al saber que era mejor amigo de su hijo, sabía que era una buena influencia para él. Por lo mismo no pudo terminar de creer que ahora ese Omega calmado y pacífico estuviese siendo acusado por haber intentando agredir a uno de sus compañeros.

Tuvo que ponerle alguna clase de castigo no totalmente convencido de la acusación. Y ahora Jimin tendría que quedarse más tiempo en la escuela a cumplir un castigo.

"Ese maldito me hizo quedar mal frente a tu padre" "Cuida a Yoongi, Taeyong tiene algo en mente y no es bueno".

Fue lo último que se escuchó de el otro lado de la línea de su celular, antes de que la llamada se cortará.
Jungkook tenía un presentimiento, uno malo a decir verdad, y eso lo mantenía inquieto.

Vio a su novio aproximarse a el, tragó saliva y intento actuar normal y esconder su preocupación.

— Jungkookie — Yoongi saludo a el alfa extendiendo los brazos, acto seguido el pelinegro copió su acción y apenas el más bajo estuvo cerca de él lo abrazó fuerte.

Olió su cuello, su aroma dulce lo hacia delirar, era lo que necesitaba, lo necesitaba el.

— Me encontré con Jimin cuando salí de el salón, no hablamos mucho, ya queria irme — Yoongi sonrió cuando el y el más alto rompieron el abrazo completo y ahora se encontraban solo tomados de las manos.

Jungkook solo asintió, sin romper el contacto de sus manos caminaron directo a sus casas, Yoongi hablaba mientras el alfa solo escuchaba o bueno intentaba escuchar, no puedo evitar pensar en algunas ocasiones sobre Taeyong y su novio lo notó. Su aroma de preocupación era notorio.

— ¿Todo esta bien? — El Omega preguntó.

— Claro, ¿Tú estas bien? — Yoongi río sin entender que queria decir.

— Claro que estoy bien ¿Porqué no lo estaría? —.

Jungkook negó sacudiendo su cabeza, pensando que también sus ideas se irían. Yoongi y Jungkook llegaron a casa del mayor.

— Nos vemos mañana, ¿Verdad? — El pálido preguntó, este estaba subido en un escalón que daba directo a la puerta de su casa, estaba casi a la altura de Jungkook y esto le agitó el corazón, pues su Omega se veía muy tierno.

— Siempre es un si para ti — Ambos se rieron y antes de que Yoongi entrara a su casa Jungkook tomó su mentón y lo besó.

Fue tierno, sus labios se movieron de forma delicada, Yoongi podía jurar que el pelinegro tenía los labios más suaves del mundo, tal como si fuera algodón de azúcar.

Pasó sus dos brazos por los anchos hombros de el alfa mientras este tomaba su cintura con delicadeza, siguieron el vaivén, lento y armonioso, disfrutando el tacto de sus labios.

Unos segundos más bastaron para que el aire fuera haciéndose nulo, entonces se separaron, Jungkook terminó por besar una de las mejillas de Yoongi.

— Tus mejillas son como un pan —

— ¿Un pan? — Preguntó Yoongi riendo.

— Un pan dulce y esponjoso — Jungkook apretó una de sus mejillas y sonrió para el pálido.

Yoongi unos segundos después se separó de Jungkook para dirigirse a la puerta de su casa.

— Yoongi —

El mencionado volteó en su dirección.

— Te quiero... —

— Te quiero más Jungkookie —

Entonces Yoongi entró a su casa, y Jungkook se dispuso a irse a la suya, claro, con una sonrisa en el rostro.

Yoongi recibió un mensaje esa misma noche, antes de acostarse para ir a dormir.

Taeyong:
¿Recuerdas lo que hablamos?

Taeyong:
Se que quieres ser un buen Omega para Jungkook, eres buena persona Yoongi.

Y puedo ayudarte con eso.

Taeyong:
Piénsalo, Jungkook merece tener a alguien de su nivel, y creo que tu puedes lograr serlo. solo hay que esforzarse un poco más.

Taeyong:
Te veo mañana, buenas noches :)

El Omega vio los mensajes desde su bandeja de notificaciones. No hizo nada más.

Dejó su celular en uno de los muebles cerca suyo y tomo una de sus sábanas para arroparse.

Esa noche no durmió bien.