Capítulo 11

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Feelings of friends

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Esta autora a pensando varias veces que el corazón es un órgano muy curioso no lo gobierna ni la razón ni la posición. ¿Que otra razón hay para que la señorita Bridgerton considere la proposición de un simple barón cuando pareciera que ya conquistó al Duque? ¿Podría ser que la cabeza de la debutante no es lo único que está mal?

Revista de sociedad de Lady Whistledown



El segundo picnic de la temporada se estaba llevando acabo exactamente en el mismo lugar de costumbre.
En el mismo lugar donde lady Amelia había sido casi aplastada por el corcel del Duque de Hastings. Solo que ahora la familia Relish se había sersiorado bastante bien de hacer que la rubia se apresurara para que toda la familia fuera en el mismo carruaje al paseo y no tener que soportar otro escándalo similar

Y apesar de eso, Amelia aún mantenía su amargura acostumbrada mientras estaba sentada en el suelo, arriba de una hermosa alfombra color celeste con toques dorados y almohadones blancos rellenos de plumas de pato. Mientras su familia política era igual de aburrida que siempre, Julien leía su periódico en una silla costosa color marrón, Eldys hipócritamente leía la revista de sociedad de Lady Whistledown y Andrew no se había despegado de la mesa de postres desde que habían arribado al lugar metiendo a su boca incontables bizcochos

Amelia se había decepcionado tanto de su encuentro con Julien, lo normal. Y eso solo provocaba que pensara más en el Duque, aunque bien, ella misma había dicho esa mañana antes de partir en el carruaje, que jamás se le volvería acercar aquel petulante hombre, se alejaría lo más que pudiera, incluso si ella había sido la responsable de la farsa que se estaba llevando acabo entre él y su amiga de confianza, quienes habían engañado a todo Londres

—estoy aburrida, deberíamos ir a dar un paseo— sonrió la dulce rubia levantándose de su lugar con esmero y acercándose a su marido lentamente con una mirada suplicante

—sabes que no me gustan ese tipo de cosas— gruñó sin despegar su nariz del papel

Amelia puso los ojos en blanco molesta hasta que noto el pabellón de los Bridgerton a unos cuatro o cinco pabellones del suyo. No quería seguir al lado de Julien pues sentía cierta culpa en su ser

—miren, Violet Bridgerton me está llamando, veré que desea— mintió la chica y salió rápidamente del lugar antes de que algún familiar de su familia política se diera cuenta que nadie la estaba llamando y la sentarán de regreso a sus pensamientos sobre la costosa alfombra

Camino unos cuantos metros de distancia asegurándose de que el Duque y Daphne quizá ya habían partido a pasear y no verlos para descansar un poco en compañía de los adorables Bridgerton que siempre la divertían. Y apesar de que Anthony ciertamente aveces la ponía nerviosa, ahora podría soportar ese desaire gracias al Duque, quien la ponía en un estado muchísimo peor

Prohibided {Bridgerton - Simón Basset} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora