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Los rayos del sol suavemente pasaron por las oscuras cortinas, la alarma del teléfono móvil empezó a sonar, ese peculiar sonido a la castaña parecía ya hartarle

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Los rayos del sol suavemente pasaron por las oscuras cortinas, la alarma del teléfono móvil empezó a sonar, ese peculiar sonido a la castaña parecía ya hartarle. Bostezó mientras estiraba su cuerpo soltando un pequeño gritito y volvió a recostarse en cama, esta vez con su teléfono en mano, apagando la alarma.

Miró la pantalla donde se encontraba la hora, cinco y media de la mañana; parpadeó un par de veces y se quedó un par de minutos hasta poder levantarse. Una ducha fría para despertar, los rizos de su cabello se apegaban a su espalda debido a que lo había mojado, estaba mirando a la nada, pensando en aquella tarjeta que Chronos le había entregado, de verdad que ella lo estaba considerando.

Tomó su uniforme de la facultad de psicología, varias libretas y fotocopias desordenadas entre las hojas de las mismas, otra vez se había quedado estudiando hasta muy noche; peinó sus rizos llevándolos hacia atrás, desenredando y definiendo con sus dedos hasta dar con esa característica melena de león que parecía estar desordenado y bajó a la cocina. Lavó sus manos y abrió el refrigerador, no había mucho, una jarra con agua, un yogurt y lasaña instantánea.

—Ah, bueno, si muero, que sea por haber desayunado cosas que no se deben comer en el desayuno. —Dijo para sí misma, tomando la lasaña, colocándolo en el microondas mientras tomaba el yogurt.

Keiko mientras desayunaba, en su teléfono veía luego de mucho tiempo las noticias, además del clima y otras cuestiones, por ejemplo, All Might se ha retirado luego de pelea contra All for One, algo sobre la Liga de Villanos cual no prestó atención, Endeavor como el nuevo número uno y de cómo Hawks había tenido tanta popularidad. Suspiró, escuchar todo el tiempo sobre héroes y lo fácil que tienen la vida las personas con un don le ponía a pensar; lavó los platos, sus manos y cepilló sus dientes, dejando todo limpio decidió tomar su rumbo a clases.

Caminando con sus audífonos puestos en un volumen prudente para sus oídos, notó que las pantallas hablaban de Endeavor, un héroe algo mal humorado y arrogante según ella, pero no prestó atención, sólo continuó su camino pero algo le estaba molestando, la misma camioneta que vio al salir de su hogar, la estaba viendo rondar cerca de ella. Paranoia, pensó, pero no, sí la estaban siguiendo y quién conducía la camioneta era Chrono, quien llevaba a su líder en el asiento del copiloto.

—Es ella, Overhaul. —Habló desde su asiento de piloto, manteniendo la vista al frente. Mientras que el castaño de ojos miel, quien esta vez cubría parte de su rostro con un cubrebocas negro, observaba la carpeta de información que Chrono le había entregado sobre ella— Estudiante universitaria con buenas notas, trabaja después de clases lavando platos en un restaurante, su madre falleció hace tres años y no tiene ningún tipo de contacto con su hermana y su padre.

Overhaul leía los datos de la candidata a asistente que Chrono le había proporcionado, se detuvo en los rechazos que le dieron en sus entrevistas de trabajo, pese a tener buenas habilidades en su currículum vitae, aquel dato curioso hizo que arqueara una de sus cejas, rascando su sien con su dedo índice.

—No registra tener un don, parece que no haz revisado a esa chica en su totalidad. —Habló el castaño, levantando la mirada hacia la chica que aún caminaba hacia la universidad.

El líder del Shie Hassaikai, golpeó con la yema de su dedo índice la rojiza carpeta, sintió que estaba perdiendo el tiempo con algo tan absurdo como perseguir a una estudiante que no le tenía nada que ofrecer; absorto en sus pensamientos escuchó el vibrar del teléfono de Chrono, quien contestó y dejó el teléfono en altavoz, era Mimic.

—Chronos, ya revisamos la casa de Arima Keiko y encontramos sus registros médicos, historial económico y otros documentos importantes para ella por lo visto. —Habló Mimic desde la otra línea, acompañado de Setsuno y Nemoto— Es tan normal, que de cierto modo asusta y aburre.

—Los registros médicos, Mimic, ¿Qué dicen de ella? —Preguntó Chronos, deteniéndose frente a la universidad, observando cómo ella se había detenido en la entrada viendo fijamente la oscura camioneta con los vidrios polarizados, a su vez, Overhaul le devolvía la mirada.

—Está saludable. —Habló Mimic, los otros dos ordenaban la casa luego de haberla puesto patas arriba sólo para buscar información adicional sobre ella— Tiene una pensión pequeña por parte de su madre únicamente para costear gastos universitarios, la casa era de su madre pero se la han dejado a ella pero lo curioso aquí es... Que no tiene un don.

Overhaul volteó su mirada hacia el teléfono, extrañamente curioso ante lo que había escuchado ¿Una persona sin don? ¿De qué demonios Mimic estaba hablando? Este mundo está lleno de enfermos que padecen el síndrome del héroe, ¿Cómo es que había alguien siendo la excepción en una enfermedad tan terrible?

—Bien Mimic, por favor trae los documentos que encontraste y entrégalos a Overhaul. —Habló Chronos, finalizando la llamada— Pues haz escuchado Overhaul, no tiene un don y técnicamente está en la mierda.

—Chronos, si no tiene un don, ¿Por qué es candidata como asistente? —Preguntó el castaño, mirando seriamente a su mano derecha— No me gusta perder el tiempo y te dije que mi paciencia no es un juego de shogi.

—Te dije que si no la querías, buscábamos a otra persona, no necesitas un don para ser asistente, a no ser que necesites uno para pelear. —Chronos volvió a conducir, cumpliendo puntualmente con los itinerarios del día de su jefe— Además, como te dije, me gustaría dormir más tiempo.

El día transcurría tranquilamente, las clases eran aburridas pero hacia el esfuerzo de prestar atención, escuchar hablar sobre las fobias específicas eran un poco interesantes pero a su vez extrañas, desde las arañas hasta a las palabras largas eran parte de la lista y el cómo tratarlas parecía ser complicado.

La clase se vio interrumpida por la policía, uno de ellos tenía la apariencia de un sabueso y quienes le seguían, héroes, reconoció a Eraser Head y a Sir Nighteye, pero no sabía quiénes eran los dos chicos que estaban a su lado, un joven de cabellos rubios y otro de cabellos verdosos; Keiko suspiró profundamente, esperando a que no sea otra charla de héroes o de tomar prevenciones sobre llamarlos, bajó la mirada hacia la tarjeta que Chronos le entregó, guardandola en el forro de su celular y la voz del hombre sabueso empezó a retumbar en el aula.

—Gracias por el espacio profesor; buenos días jóvenes, como ya sabrán frente a ustedes se encuentra el cuerpo de policía y a nuestro lado se encuentran los reconocidos héroes Eraser Head y Sir Nighteye junto a otros dos, Lemillion y Deku. Venimos con el objetivo de entregarle prevenciones, pues debido al retiro de All Might los villanos han vuelto a la luz y entre ellos la Yakuza.

— ¿Yakuza? —Preguntó el profesor.

—Algo así como la mafia. —Respondió Sir Nighteye— Estudiantes, quiero que tomen debidas precauciones además de la Liga de Villanos, el Shie Hassaikai ha estado haciendo movimientos para reclutar personas y realizar sus acciones.

Keiko palideció, ahora entendía por qué nunca lo había escuchado, el Shie Hassaikai era la Yakuza, la misma que le había ofrecido trabajo.

𝗔𝗦𝗜𝗦𝗧𝗘𝗡𝗧𝗘 | 𝐨𝐯𝐞𝐫𝐡𝐚𝐮𝐥 ;; 𝐜𝐡𝐢𝐬𝐚𝐤𝐢 𝐤𝐚𝐢.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora