21- De regreso a Cloud Recesses

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Notas de la autora:

Es hora de regresar para una reunión totalmente importante, incluso si nadie sabe por qué están aquí. Jin Ling cree que su tío está sospechoso.

***

Durante los siguientes días, esperando hasta su próxima reunión en Cloud Recesses, Jiang Cheng se encontró repitiendo los eventos de esa noche una y otra vez en su mente. No estaba completamente seguro de por qué. Él no había hecho nada vergonzoso, por lo que no había nada de qué preocuparse. De todos modos, su mente seguía volviendo a la forma en que la cintura de Lan Xichen se había sentido bajo su mano, o el momento en que casi le apartó el cabello de la cara y la sonrisa en la cara de Lan Xichen.

Lan Xichen, por su parte, no tenía vergüenza residual de esa noche. Francamente, Jiang Cheng pensaba que era injusto. Se había despertado, como era su costumbre, poco después del amanecer. Por una vez, Jiang Cheng también se levantó temprano, su sueño le afectado por dormir en la superficie desconocida del sofá. Lan Xichen había mirado alrededor de la habitación, parpadeando confundido.

-Buenos días,- dijo Jiang Cheng de mal humor. Ya había ido a las cocinas a desayunar y estaba comiendo en su mesa, agradecido de estar despierto primero.

Lan Xichen sonrió y lo saludó, pero su confusión no desapareció. -¿Dormí aquí anoche?- murmuró para sí mismo, mirando alrededor de la habitación. -¿Por qué hice eso?

-¿Realmente no te acuerdas?- Jiang Cheng preguntó secamente, lanzándole una mirada. -¿No te acuerdas en absoluto?

Lan Xichen lo pensó por un momento, levantándose lentamente de la cama. Se fijó en sus zapatos en el suelo y se palpó a sí mismo, como si estuviera comprobando qué había allí. Llevaba puesto su bata interior, pero la cinta de su frente todavía estaba en su lugar, ligeramente arrugada. -Recuerdo cenar contigo y hablar,- murmuró. Sus ojos se agrandaron y sus orejas se pusieron de un rosa pálido. -¿Dónde - dónde dormiste, Jiang Wanyin?"=

Resopló, sirviendo una taza de té para Lan Xichen. Consideró mentir, o simplemente no decírselo y dejar que su imaginación lo torturara, pero no quería perder la cara con él. Hizo un gesto hacia el sofá.

-Oh,- dijo, todavía un poco sonrojado. -No tenías que renunciar a tu propia cama.

Jiang Cheng recordó la noche anterior y la lucha por la cama, y solo suspiró. -No es gran cosa.

-Pero... ¿por qué decidí dormir aquí? Realmente no puedo recordar.

Jiang Cheng le dio una mirada fulminante. -¿Nada en absoluto?

Eso fue lo que más le molestaba. Había pasado por toda esa vergüenza, pero Lan Xichen ni siquiera recordaba haber bebido. Todo era un borrón para él.

Jiang Cheng estaba casi celoso. Si pudiera quitarse de la cabeza la expresión del rostro de Lan Xichen, ese momento en el que casi se apartó el cabello de los ojos, podría dormir mejor por la noche.

Después de que Lan Xichen insistiese en que no recordaba nada, Jiang Cheng casi quiso torturarlo con detalles de todo lo que había hecho y dicho. Después de todo, eso era exactamente lo que Lan Xichen le había hecho. Pero, de alguna manera, no se atrevió a hacerlo.

-La comida estaba más picante de lo que pensabas, y accidentalmente robaste una taza de mi licor para beber,- explicó Jiang Cheng secamente.

-Yo ... ¿yo bebí anoche?- dijo, sonando horrorizado.

Jiang Cheng simplemente se encogió de hombros. -Más o menos. No sabísa lo que estaba bebiendo, así que no es culpa tuya. Luego, después de eso, colapsaste y te fuiste a dormir.

Una amistad improbableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora