CAPITULO III

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-No puedo creer que yo pase partiendo me la espalda trabajando todo el día y cuando llegue a casa me venga a topar con esto- dijo mamá levantando botellas de cerveza del suelo. Si bueno ¿recuerdan la pequeña reunión con amigos que tendría Samuel en casa? Se convirtió en una enorme fiesta que se salio de control- y lo peor de todo es que dejaste salir a tu hermana sola de noche con su amiga y sin ningún adulto que las acompañara de regreso a casa tuvieron que venirse en un taxi a media noche por qué tu no las fuiste a traer ¿En que estabas pensando?? Tu eras el responsable de esta noche, no puedo creer que me hayas convencido de dejarte a cargo esta noche y para que ?? Llegar a casa a las tres de la mañana porque la policía me llamo al trabajo porque había una fiesta "EN MI CASA'!!!!

-Ya mamá relájate todo esta en orden- dijo Samuel tirándose al sillón de la sala borracho- solo fue una pequeña reunión con amigos. Además,  Ashley esta bien. Los vecinos son unos aguafiestas...

Mamá interrumpió.

-Los vecinos viven a menos de un kilómetro- le dijo mientras lo veía quedarse dormido en el sillón se rascó la cabeza y lo dejó ahí.

Yo estaba en mi habitación sentada en el balcón observando el paisaje y escuchando la pelea de mamá con mi hermano me sentía culpable, porque yo sabia de la fiesta, él había pasado una semana convenciendo me que lo ayudara para que mamá no se diera cuenta, y la salida con Marcela al cine era una táctica para que si algo como lo que pasó con la policía los vecinos y mamá llegara a pasar que paso obviamente no me involucraría a mi, aunque mamá sospechaba que yo sabía no me pregunto nada al respecto.

-Es hora de dormir- me dijo desde las escaleras- no es hora para que estés despierta

-No estoy cansada- le grite desde mi habitación, mi relación con mamá no era muy buena, ya que casi no la veía y cuando estaba en casa solo llegaba a dormir y a regañar por cualquier mínima tontería.

-No te estoy preguntando si estas cansada- me dijo parada en mi puerta- eso no me importa apaga la luz y vete a la cama..

-Pero... -proteste-

-Ahora e dicho- cerro de un portazo- Mañana es domingo y sabes que significa??- gritó atrás de la puerta.

-QUÉ????

-Tienes que levantarte temprano para ir donde tus abuelos.

Los domingos nos levantábamos temprano para visitar a los abuelos ya que ellos vivían a tres horas nos íbamos temprano para pasar mas tiempo con ellos, a parte que vivíamos fuera de la ciudad a treinta minutos de ella.  A papá siempre le gusto vivir apartado de la ciudad el siempre nos decía: Es mucho más hermoso y tranquilo vivir fuera de la contaminación y molestos ruidos de la ciudad. Y tenia mucha razón nosotros vivíamos en una residencial llamada "Las arboledas" y valla que pegaba el nombre habían muchísimos arboles y flores y como era fuera de la ciudad casi el campo las casas eran grandes y espaciosas ademas era muy fresco. 

En fin, mi familia siempre a tenido comodidades por el duro esfuerzo de papá y mamá pero eso a mi no me importaba ya que no disfrutábamos de la compañía del uno al otro, mamá pasaba todo el tiempo estresada y cansada, papá estaba fuera de el país y Samuel, bueno el pasaba mucho tiempo en las casa de sus amigos y yo cuando no estaba en mi free time bajo mi árbol y mi música pasaba en mi habitación largas horas pintando o leyendo.

Amaba visitar a los abuelos ellos vivían en una casa muy bonita pero era muy pequeña pues claro eran solo ellos dos, para ellos era mas que suficiente.  La casa tenia un hermoso olor a hogar se sentían las buenas vibras y el amor en el aire. La abuela Nora siempre estaba pendiente de mi, si ya había comido si tenia frió y el abuelo Luis que siempre estaba con sus cigarros buscaba formas para que no nos aburriéramos.  Eso era un hogar feliz en mi opinión.

-Samuel ¿Que haces tirado ahí en el sofá?- le pregunto la abuela- Es un día muy hermoso para quedarse dentro de la casa!!- Dijo abriendo las ventanas

-Déjalo mamá- dijo mi mamá dejando caer las maletas al suelo- el prefiere el encierro. Claro, Samuel con una gran resaca y mamá refiriéndose a que estaba castigado por la fiesta.

Le preparé un café muy cargado para que se despertará,  pero no funcionó así que le ayude a ponerse de pie y lo lleve al cuarto de huéspedes y ahí lo deje profundamente dormido. Estaba muy preocupada por él nunca lo había visto así.

"SOLEDAD"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora