"SOLEDAD"

CAPITULO XXIII

Parecía imposible de creer Sam y Evan sentados frente a frente y ambos aún seguían con vida. Sam le hacía muchas preguntas acerca de los partidos ganados y perdidos de la escuela, no era de extrañar Sam fue su quaterback y Evan, bueno él no es el quaterback pero su mejor amigo -Michael- si lo es, pero eso no quiere decir que su popularidad se base en ser el mejor amigo del capitan de fútbol,  él ya lo trae en la sangre.

Aveces pienso si mi personalidad fuera diferente fuera una de las chicas más populares de la escuela,  más que Kim. Solo piensen,  mi familia es una de las más influyentes y adineradas de todo el pueblo, mi hermano fue quaterback en la escuela y en la Universidad, muy atractivo y popular y yo bueno, yo solo trato de evitar a todo los seres que respiren,  incluso de los perros.

Aveces me paro frente al espejo y pienso eres inteligente, eres fuerte y, y luego nada talvez por fuera lo sea pero por dentro tengo miedo y me siento tan tonta. Cuándo papá me preguntó esta tarde si queria cenar con él,  no supe como responder,  me asuste.

Pero luego pienso en Evan y veo lo que él a hecho por mi, me a hecho más fuerte, me ha hecho cambiar en alguien que pense que nunca sería y lo amo por eso, jamás se dio por vencido y creo que eso es lo que me hizo amarlo y dejarlo entrar en mi vida.

-Amor-dijo Sam a Nora- ¿Nos vamos?-ya habiamos terminado de cenar desde hace un rato pero Sam y Evan no paraban de hablar.

-Si, me siento un poco cansada.

-¿Tu te quieres ir también?-me preguntó Evan- O ¿quieres ir a caminar?

-Me encantaría ir a dar un paseó contigo,  necesito sacar el estrés de mi cuerpo.- Estuve dos horas en detención por llegar tarde a una clase y por faltar a biología la semana pasada, pero tenia que hablar con Marcela, aunque esa nomera uma excusa valida para mis maestros.

-Ire a pagar,  ya vuelvo.-dijo Sam.

-Ustedes hacen una bonita pareja Ashley.

-Gracias-me límite a decir.

-Ustedes también,  no es asi Ashley-dijo Evan pasando su brazo en mis hombros,  Nora posó su mirada en mi y luego la bajó al no escuchar mi respuesta.

Evan, noto mi frialdad a Nora pero no dijo nada.

-Ashley ire por tu abrigo,  esperame aqui amor.

-No-dije tomando su brazo- yo iré,  quiero ir al tocador asi que puedo recojerlo de camino.-Sin esperar respuesta me fui.

NORA POV

-Creo que no le agrado-dije cuando Ashley se fue.

-¿Porque lo dices?

-Por favor, no digas que no notas lo fria que es con migo. Me siento mal por eso, yo amo mucho a Sam y me duele mucho que la persona más importante en la vida de él me deteste.

-Solo, dale tiempo busca algo que ambas tengan en común.

-Asi, ¿Como que?

-Bueno, a ella le gusta dibujar.

-Soy mala dibujante, en serio, pésima.

Lo pensó por un rato, yo lo observaba, la verdad era muy atractivo,  Ashley tenia buen gusto. Era alto, pero no mucho talvez 1.75 metros, su cabello era corto pero un poco le caia por la frente, una hermosa sonrisa, pero lo que no podia dejar de admirar era esos ojos,  grandes y de un hermoso azul marino.  Era fascinante.

-Bueno, a ella le gusta mucho la música-dijo después de un rato, sacandome de mi estado imnotico en el que me encontraba con esos ojos.- Le gusta la guitarra.

-Así, no lo sabia.

-Si, aveces la llevo a la sala de música y le toco algo.

-¿Que tocas?

-La guitarra y el piano.

-¿Cantas?

-No, pero ella si.

-Bueno lo intentaré.

ASHLEY POV

Pasaron dos semanas desde que le presente a Sam mi magnifico y sexi novio. Desde ese dia pude llevar a Evan a mi casa y permitirle entrar,  solo tenia que tener cuidado que mamá o papá no se encontrarán ahi. Aún no estaba lista para decirles que tenia un novio.

Evan había tratado de convencerme las ultimas dos semanas que le diera una oportunidad a Nora. Acepte, porque Evan me amenazó con no llevarme a esquiar con sus padres en vacaciones a pesar que aún no los conocía. Evan aún no encontraba el momento indicado para dexirles que su relación con Kim había terminado, yo le tenía toda la paciencia del mundo ya que lo comprendía. Su papá,  segun Evan era atemorizante con cualquiera.

El viernes en la noche,  me quede en casa, Sam habia salido a quien sabe donde y mamá y papá habian ido a cenar y mi novio tenia partido en un lugar que según él volveríamos en muchos pedazos.  Asi que no fui con él, solo esta Nora y yo en casa.

-Ashley-dijo tocando mi puerta- ¿Puedo pasar?

-Si-dije, pensando en que le dije a Evan que le daría una oportunidad.

-Quería saber si quieres comer algo,  preparé comida italiana.

-Tu ¿Cocinas?-dije saliendo de mi armario. Que lo estaba ordenando.

-Si, ¿quieres comer con migo?

-Si-dije dudando- Podemos comer aqui en mi habitación,  tengo que ordenar mi armario.

Asombrada con mi respuesta salio corriendo para traer la comida, a los 10 minutos regreso con dos platos de pasta con albóndigas.

-¿Crei que comeriamos comida italiana?-le dije tomando mi plato.

-Si, la pasta es italiana. Además,  es lo unico que sé cocinar.-no pude evitar sonreír ante su comentario.

Comimos en silencio y luego se ofreció a ayudarme a ordenar mi armario. Acepte si pensarlo, la verdad es que si necesitaba ayuda. Cuando abri la puerta de mi armario escuche un grito tras de mi. Nora, tapaba su boca con ambas manos admirando mi armario. La verdad es que Nora no tenia dinero,  ella venía de una familia humilde, pobre. Asi que todo era nuevo y maravilloso.  ¿Se imaginan como vivia ella, para que todo lo que vea en mi le parezca emocionante? Tal vez la razón por la que no me agrada sea eso. Crei que solo queria a Sam por el dinero. Pero veo que en realidad ella lo quiere,  desde que llego a tratado de agraciarse con migo y la forma en como ve a Sam, es amor de verdad.

-¿Este es tu armario? No, esto es un cuarto dentro de otro cuarto. -mi armario era de 7 metros de largo y 6 de ancho.

-No es para tanto- dije sacando una caja con zapatos,  vestidos y carteras.

-¿Que haras con todo esto?

-Se lo doy a mamá,  para la beneficencia del hospital.

-Pero, aqui solo hay cosas nuevas.-dijo revisando todo lo de la caja.

-Claro que no, son cosas que ya no uso desde hace mucho.- vi como observaba las cosas como cuando un niño ve un cachorrito y lo quiere.- si te gusta algo puedes tomarlo.

-No, no puedo.

-Claro que si, yo ya no lo quiero. Además, eres como de mi talla.

-Pero son cosas muy caras. No, no podría.

-Nora, Sam me conto de tu estado económico,  tómalo. No me importa además ya eres como de la familia.  Muy pronto todo esto te paresea tan común.  Tómalo.

-Ashley... yo...

-Si no lo quieres por que son cosas usadas... podemos ir de compras.

-No, no es eso. Gracias lo apresio mucho.

Aunque imposible me pareciera,  Nora era muy sencilla y agradable.