Ene.28.18/Solitario

147 16 2
                                    

Track #13: Song For No One

***

Shawn POV

Enero 28, 2018

Me remuevo en medio de mis raros sueños y siento los párpados pesados sin poder abrirlos en su totalidad. Me despierto un poco borracho y desorientado, en una habitación a oscuras y totalmente vestido de los pies a la cabeza. No tengo idea de cómo llegué aquí, lo último que recuerdo es haber estado en la sala de estar junto a... Camila. ¿Ella está aquí en alguna parte?

La cabeza me palpita y estoy agradecido por no haber corrido las cortinas la noche anterior, así la luz no me da directo a la cara, la cual está bañada en sudor. Estoy sudando por todo el cuerpo y sé que debo bañarme. No sé ni qué hora es. Incorporándome con la poca fuerza que me queda, alcanzo mi teléfono de la mesa de noche para revisar el tiempo, y me sorprende ver una serie de mensajes y llamadas perdidas esperando a ser atendidas. No hay ni rastro de la persona que más me interesa.

El calor me abruma y me quito la camisa y los zapatos, recorro la solitaria habitación a pasos arrastrados tratando de no perder el equilibrio, pero el pequeño movimiento me hace querer vomitar. Me detengo en el umbral de la puerta viendo hacia la sala de la suite, desierta como lo esperaba. Ella no está aquí. Mis ojos se desvían al sofá, una botella de tequila abierta y casi vacía me devuelve la memoria, muy borrosa para ser sincero. Recuerdo haber estado muy cerca de ella, mientras buscaba su arete perdido, la escuché reír y decirme que me quería. Y... creo que le dije lo mismo. ¿O lo habré soñado? ¿Realmente nos besamos después de eso y luego se fue? Pero claro que sí nos besamos, mi imaginación no es tan buena.

Un retorcijón en el estómago me hace caer de rodillas y casi me voy de cara al suelo sino fuera por mi brazo atravesado. Dios, ¿así de mal se siente estar borracho? No lo volveré a hacer jamás. Aprieto los párpados mientras me incorporo como puedo y vuelvo a la cama, donde me tumbo sin mucha ceremonia, y vagamente pienso en dormir de nuevo por lo agotado que me siento. Sin embargo, mi cabeza alborotada me lo impide. ¿Camila en serio se fue? ¿Por qué? Si el beso fue real y sus palabras no fueron producto de mi imaginación... ella me quiere. Y yo admití que la quería. No entiendo qué pasó, qué salió mal.

"No puedo quedarme, lo siento".

¿Por qué? ¿Es por ese chico que conoció? ¿Ahora lo quiere más a él? ¿Es eso? ¿Se sintió culpable por haberme besado? Tengo todas estas preguntas sin respuesta taladrandome el cerebro, haciéndome hundirme más y más en un pozo lleno de soledad. No tengo a nadie con quién discutirlo. No la tengo a ella.

Con el teléfono en las manos me debato internamente si debería escribirle para aclarar esta situación antes de que se salga de control y termine arruinando aún más nuestra amistad, si es que seguimos siendo amigos en este punto. Besarse no es algo que los amigos hacen, y nosotros ya nos besamos dos veces...

Tecleo en la pantalla un breve saludo para ella. Está en línea. No tengo idea de si está pensando en lo mismo que yo o sólo está experimentando los síntomas de la resaca mañanera. Dos palomitas azules me indican que ha leído el mensaje y ansioso espero a que responda, pero mi desilusión aumenta cuando Camila se desconecta enseguida del chat.

No sé por qué pero gruesas lágrimas corren por mis mejillas y con rabia intento detener su trayecto en vano. Mis emociones me superan y quisiera desaparecer en mis sueños donde todo es más que perfecto, donde puedo estar con alguien a quien adoro, alguien a quien he llegado a amar de verdad a pesar de sus defectos y claras inseguridades. Está asustada, lo vi ayer en sus ojos. Pero necesito saber la razón. ¿Qué te impide estar conmigo, Camila? ¿Soy yo? ¿Es mi culpa? Sólo dímelo... Dímelo y haré lo que sea por ti. Mis sentimientos nunca cambiarán.

Canciones Para Ti - (Shawmila, La Historia) Vol. IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora