ALINA

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Muero de sueño, es como si mi cuerpo se encontrará anestesiado, no logro que funcione correctamente. Siento que pronto caeré al suelo con cada movimiento que hago...

-Alina, hija que sigues haciendo despierta... Es demasiado tarde, deberías estar descansando corazón.- ¡Genial!, ¿Ahora que bicho lo pico? Hace unos minutos ni atención me prestaba

-Lo haré en unos minutos papá, no tienes de que preocuparte.- Susurró con voz cansada mientras continúo con lo que estoy haciendo

-No señorita, irás a dormir ahora mismo... Vamos princesa sube a tú habitación.- Tal vez lo mejor sea obedecerle. Además mi cuerpo no logrará resistir ni un segundo más

-Vale, lo haré... Pero solo porque no logro resistir más.- Mi padre sonríe y asiente con la cabeza en forma afirmativa

-Como tú digas, mi cielo. Ahora vamos a descansar.- Pronuncia mientras abre los brazos para que le dé un abrazo. Y sin dudarlo se lo doy porque tanto él como yo lo necesitamos

Mi padre me presiona contra su cuerpo y a mí no me importa que lo haga fuertemente, porque con ello hace que recuerde los abrazos de mamá. Esos que sin importar lo fuerte que fuesen siempre estaban llenos de amor y una calidez que lograban hacerte sentir especial

-Lo siento mucho mi vida... No me he comportado de la mejor manera.- Yo solo puedo escucharlo, mientras que con todas mis fuerzas restantes trato de no quedarme dormida en sus brazos- Prometo que seguiré siendo el mismo como cuando estábamos en Italia

-Tranquilo papá, no tienes de que preocuparte.- Habló con mi voz demasiado baja

-Bien mi princesa, te llevaré a tú habitación. No quiero que te quedes dormida aquí abajo.- Yo solo asiento, mientras camino a pasos lentos tomada del brazo de mi padre quien a pesar de mirarse igual de agotado que yo, logra caminar muchísimo mejor...

-Papá...-Lo llamo mientras subimos las escaleras. Puedo sentir como posa su oscura mirada en mí durante unos segundos- Yo lamento haber sido grosera contigo, no era mi intención... Creó que mi manera de reaccionar no fue la mejor...- Él solo me escucha sin interrumpir me- Es solo que la sola idea de volver a este lugar, no me agrada, bueno no desde que mamá se marchó

-Lo sé.- Está vez si me interrumpe- Siempre lo he sabido... Y créeme que me odio por ello, me odio por el hecho de que con mis acciones estoy afectando a mí princesa... Pero, me odio más por el hecho de que aún sabiéndolo te sigo obligándo.- Hace una pequeña pausa, y suspira fuertemente- Lamento hacerte daño, pero me da miedo el hecho de separarme de mi pequeña mujercita... Me aterra la idea de separarnos y que no pueda volver a verte. No soy perfecto cariño pero...

-¡Basta! No voy a dejar que continúes... No permitiré que digas que no eres perfecto, porque sí lo eres...-Levanto la cabeza y lo miró- Para mí eres el mejor, eres el padre ideal. Además no me importaría si eres perfecto o no... Dime, ¿Quien ha cuidado de mí desde que mamá se marchó? ¿Quien me ha defendido a capa y espada todo este tiempo? ¿Quien me ha demostrado que soy mejor de lo que pienso? ¡Exacto solo tú lo haz hecho!- Tomó una pausa para lograr contener mis lágrimas- Todo lo haz hecho por mí y para mí eso es demasiado importante... No deberías de preocuparte porque aunque estemos a distancia, nunca perderás a tu princesa... Jamás la perderías, porque jamás me olvidaría del hombre más importante en mi vida.- Mi padre me toma en sus brazos y es como si estuviese en el paraíso, presiona mi cuerpo al suyo como si temiera que me escapará. Pero jamás lo haría..¡Jamás!- Te amo papá, te amo hasta el infinito y más allá.- Pronunció entre lágrimas con la cabeza metida en el pecho de mi padre

-Yo igual mi princesa... Nunca, y escuchame bien, ¡Nunca! dejaré de recordarte que siempre serás mi prioridad.- Besa mi cabeza suavemente- Siempre serás lo más importante de mi vida

-Lo tengo más que claro.-Sonrio sobre su pecho empapado por mis lágrimas de cocodrilo- ¿Podemos ir a dormir? No quiero caer como Blancanieves al comer la manzana- Mi padre sonríe y asiente con la cabeza en forma afirmativa...

¿No es el mejor?

Ni que lo digas... Mi vida sin él se acabaría

No quiero ser ave de mal agüero, pero... ¿Qué pasaría el día que tuvieses que apartarte de él?

Yo... Aún no lo he pensado, de hecho nunca me he imaginado sin mi padre

¿Y sin tú madre, si lo hiciste?

¡Claro que no!... Nunca me imaginé sin mamá y ahora tampoco lo hago con papá

Vale...

-Hemos llegado princesa.- Mi pequeña charla termina cuando papá comienza a hablar- Ve y descansa, ya es demasiado tarde para que una pequeña señorita se encuentre aún levantada

-Sí... Pero recuerda que ya no soy pequeña.- Mi padre sonríe mientras niega con la cabeza, y una de sus manos revuelve mi cabello- Buenas noches papá.- Me posiciono de puntas y beso su mejilla

-Buenas noches princesa.- Papá se da la vuelta dirigiéndose a su habitación. Por mi parte terminó de entrar para poder cerrar la puerta, una vez lo hago me dirijo a la enorme cama y me lanzó como una niña pequeña

Me acomodo bien en la cama y mi mirada se posa en las pequeñas estrellas que están pegadas al techo junto con unas cuantas fotos... Mi mirada se empieza a volver borrosa y es hay donde caigo en brazos de Morfeo

COMPLETAMENTE ABIERTA A TÍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora