14 de julio de 1997, Parte Vieja de Ciudad Corona, Región de Sinnoh, Japón, 11:47 P.M.
-Así que, Kodai estuvo detrás del desastre de Ciudad Corona hace 20 años- dijo Joe.
-Así es Señor Joe- dijo Mew.
Esta Aurea le puso un vendaje en el brazo derecho de Celebi, curando sus heridas.
-Muy bien, ahora toma un poco de leche Milktank para que te sientas mejor- dijo Aurea sacando una botella de leche Milktank.
Celebi tomó un poco de leche Milktank y le gusto, tomándosela toda en unos segundos. Después sonrió, viéndose más sano. Todos estábamos felices por la recuperación de Celebi, salvo este Zorua, quién, triste se metió debajo de una mesa y empezó a llorar.
-No pude proteger a Celebi- dijo Zorua llorando.
Me senté con él y lo empecé a acariciar para calmarlo. Yo también he sentido devastada cuando no he podido proteger o salvar a las personas que quería, sintiendo que le fallé a todos, que no servía para nada.
-Tranquilo Zorua, hiciste tu mejor esfuerzo- le dije.
-Pero no fue suficiente- dijo Zorua.
-Eran muchos más que tú, era muy difícil que pudieras derrotarlos tu solito. Además, si no hubiera sido por ti cuando hubiéramos llegado este Celebi hubiera sido capturado en esa extraña Pokébola. Gracias a ti el sigue aquí- le dije acariciándolo.
Zorua levantó la cabeza y vio a Celebi platicando con Mew y el resto. Entonces Zorua se dio cuenta y que tenía razón, que había salvado a Celebi. Ya más animado, fue con el resto y le pidió a Aurea un poco de leche Milktank para recuperarse. Yo me levanté y fui también con ellos. Aurea sacó a Minccino de su Pokébola para que se recuperara con la suculenta y nutritiva leche Milktank. Yo también tome un poco, ya que estaba sedienta y necesitaría energías para la batalla que se avecinaba.
-Poco antes de regresar, vi con mis propios ojos a los verdaderos Entei, Raikou y Suicune- dijo Tammy sentándose en una silla de madera.
-Debieron sentir que la ciudad está en grave peligro- dijo Joe.
-Sí, pero todos están convencidos de que el enemigo es Zoroark- dijo Tammy.
-¿Cómo llegaremos a ellos para decirles que se equivocan?- dijo Joe.
-Tal vez yo pueda, pero no porque yo sea Mew quiere decir que me vayan a creer- dijo Mew.
-¡Tengo que encontrar a Mima antes de que los Pokémon Legendarios le hagan daño!- dijo Zorua retomando la forma de la chica del metro, dirigiéndose a la puerta.
Celebi intentó volar pero aún seguía débil, por lo que empezó a bajar rápidamente al suelo, pero Aurea lo atrapó a tiempo.
-Tómalo con calma Celebi- dijo Aurea sosteniendo a Celebi.
-Si de alguna forma pudiéramos a la Onda de Tiempo, así Celebi estaría bien- dijo Rowena.
-Sí, ¿pero dónde está la Onda de Tiempo?- le pregunté.
-Kodai la buscaba cerca de los relojes regresivos, pero ya había buscado en todos- dijo Rowena tecleando su mini-lap y con este Joe caminando para ver la mini-lap más de cerca.
-Qué extraño. O puede que la Onda no aparezca cerca de esos relojes o es que cuando Kodai la buscó está aún no había aparecido- dije.
-El asunto es que hay un reloj regresivo más- dijo Joe viendo la mini-lap de Rowena.
-¿Qué?- dijo Rowena sorprendida.
-Allá arriba- dijo Joe viendo a unos planos de un reloj –yo soy quién los diseñó. Está en el estadio, ubicado entre los árboles que fueron llevados de la ciudad, ahí puse el prototipo para conmemorar la terminación del estadio-
-Entonces la Onda de Tiempo ha de estar allí- dijo Karl.
Entonces oímos como si un helicóptero de juguete se empezara a elevar. Mew se volteó y destruyó con sus poderes psíquicos.
-¿Qué es eso?- preguntó Aurea.
-¡Uno de los robots de Kodai!- dijo Rowena.
-¡Maldita sea, Kodai nos estuvo espiando y ahora sabe la ubicación de la Onda del Tiempo!- dije muy enojada y golpeando la mesa de la frustración.
-¡Tenemos que llegar a la Onda de Tiempo!- dijo Karl.
-O si no se repetirá lo que pasó hace 20 años- dijo Joe consternado.
-¡No puede ser!- dijo Tammy sumamente preocupada.
-Celebi tiene que llegar a la Onda de Tiempo primero- dijo Karl.
Celebi intentó volar otra vez, pero nuevamente cayó, pero yo logre atraparla a tiempo.
-No te preocupes Celebi, te llevaré yo misma- dije.
-Yo voy con ustedes- dijo Aurea.
-¡Minccino!- dijo Minccino.
-Por supuesto yo tambor- dijo Mew.
-No hay manera de que renuncie así que por supuesto pueden contar conmigo- dijo Zorua.
-Muy bien, es hora de irnos- dije dirigiéndome a la puerta.
-Un momento chicos- dijo Karla deteniéndonos –Kodai puede ver el futuro, ¿cierto?-
-Si- le dije.
-Entonces, trabajemos juntos para cambiarlo- dijo Karl.
Entonces planeamos una serie de planes para cada posible situación que Kodai nos podría poner. Nos aseguraríamos de estar un paso delante de Kodai a pesar de que este pudiera ver el futuro.
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El misterio de la Pokébola GS
AdventureEs 1997. Un año después de haber derrotado al Equipo Rocket, Mew y yo nos dirigimos al laboratorio de la hermosa Profesora Ivy para tomar cursos de verano con ella. Sin embargo, al llegar ella nos presenta una misteriosa Pokébola: la Pokébola GS, de...