FRIENDS (Haikyuu x OC)

capítulo 13: Ser pesada y animar el ambiente.

Esta vez los chicos tenían prácticas con otra preparatoria, Fukorodani. Allí estaba el búho mirándome otra vez, no iba a perder esta batalla, ¿quién parpadearía antes? Da igual, otra vez lo llamaron.

- ¡Bokuto! ¡No perderemos contra vosotros!- gritaba Hinata, ayer estuve media tarde fuera seguramente se conocieron en ese tiempo.

Bokuto era un niño grande, se comportaba igual que Hinata, era igual de inocente o incluso más. Pero tenía algo de misterio, se alteraba mucho y era exagerado, otro chico siempre tenía que calmarlo. Parecía que todos los equipos tenían capitanes locos con una persona que los mantenía a flote. En el Karasuno era al revés. Suga no se metía en problemas pero si es mucho más enérgico que Daichi. Es que Daichi… bueno, es Daichi.
El capitán del Fukorodani molestaba a todo el mundo, pero sobre todo a Tsukishima.
Ayer también fue malo para Tsukki, no sé qué le pasa, lleva una temporada así. Intentaría hablar con él más tarde. El Karasuno no hacía más que comer suelo y yo me aburría mazo, además me dolía el tatuaje del culo si me sentaba, así que fui a dar una vuelta con la excusa de ir a echar las toallas a lavar.

Ese día estaba siendo muy caluroso, yo llevaba unos pantalones negros muy cortos y muy ceñidos de tiro alto y un top deportivo del mismo color. Temprano en la mañana tenía la chaqueta del equipo puesta, pero me la tuve que quitar. Pasé por el otro gimnasio. Allí estaba Kenma harto de vivir y sólo llevaban una hora de entrenamiento. Me apoyaba en la puerta con mis brazos y piernas cruzadas, para verlos jugar.

Yo no entendía nada de voleibol pero al haber estudiado las reglas y algunas estrategias podría decir a simple vista que en el Nekoma eran unos monstruos. El otro equipo no sabía cómo seguirles el ritmo. Aguantaban mucho tiempo sin llamar la atención, estudiando a su enemigo, preparándose para el ataque final. Como un felino sigiloso siguiendo a su presa hasta que la atrapa sin mucho esfuerzo.

Había un chico nuevo, alto con el pelo gris, parecía extranjero. Era bloqueador central y se le daba bien por su altura pero nada más, era más torpe que yo. Al rato Kuroo se dio cuenta de mi presencia y me saludó con la mano y una sonrisa, hice lo mismo. Kenma nos vio e imitó a su amigo. Los chicos bajitos extrovertidos como Hinata o Noya eran lindos, pero los chicos bajitos e introvertidos eran mi punto débil. Si estos días Kenma coge más confianza conmigo lo iba a proteger como mi bebé por el resto de su vida.

Seguí viendo y el capitán de los gatos se veía un poco tenso. Falló un saque y varios recibimientos, se le veía más cansado de lo normal. Había dos chicas allí en el banquillo, serían las ayudantes voluntarias pero sólo hablaban entre ellas y no prestaban atención, les habrían ofrecido muchos créditos por participar en el campamento. La pelota se fue lejos y fue entonces cuando aproveché para acercarme rápido y coger una botella de agua.

- ¡Kuroo! ¡Toma!- se la tiré rodando por el suelo y él la atrapó.- No te canses tan pronto. ¡Ánimo!

Me sonrió amplio como agradecimiento y yo salí de ahí lo más rápido que pude para no molestar.

- Con que lavando toallas, ¿eh?- me entró un escalofrío.

- Ah, eres tú.

- ¿Quién voy a ser?- dijo Ukai con el cigarro en la boca.- Salí a fumar porque me estoy estresando. Sé que hemos venido a practicar y perdiendo se aprende, pero creo que hay un nuevo problema en el equipo.

- Sí, creo que Tsukishima y Yamaguchi están mal.- me agaché para apretarme los cordones de las zapatillas que estaban un poco sueltos.- Quiero hablar con alguno de ellos hoy, aunque en realidad deberían arreglarlo ellos.

- Yamaguchi es muy tímido y Tsukishima demasiado pasota, quizás si le das un empujoncito a alguno para que se hablen, no estaría mal.

- Pues sí, esta tarde lo intentaré.- me levanté.- Por cierto, estoy deseando veros a ti y a Takeda borrachos esta noche.