resumen: en multimedia
personaje principal: ocfem
Había sido un día agotador, siendo honesta no esperabas que en un hospital como el de Forks se atendieran tantas personas en un día, carajo el pueblo era pequeño ¿de dónde salían tantas personas?
Terminaste de acomodar tus cosas para después salir de los vestuarios, tus mechas rojas algo descoloridas. Quizá sea tiempo de ir a la peluquería pensaste.
—Buenas noches, doctor Cullen—saludaste a Carlisle con un ligero movimiento de manos y una gran sonrisa.
—Oh, buenas noches. Dharma ven un momento—te llamó luego de corresponder tu saludó—él es mi hijo, Edward Cullen—te dijo una vez que estuviste a su lado.
—Es un placer—aquellos profundos ojos ámbar hacían temblar tus piernas, algo que te hacía sentir muy mal debido a la diferencia de edad.
Ese pensamiento decepcionó a Edward
No eran tantos años, en teoría él tenía veinte y tu dieciocho...claro que si contábamos los cien años restantes la situación era otra.—Edward hará una pasantía aquí, así como tú. Y me gustaría que mi mejor alumna lo guíe los primeros días—río Carlisle sabiendo que en realidad no lo necesitaba.
—Seguro, agradezco la confianza señor Cullen—agradeciste antes de mirar el reloj de la pared—es muy tarde ya, debo de irme. Lamento no poder quedarme—te excusaste sabiendo que el rubio doctor haría horas extra.
—No te preocupes, me iré temprano hoy. Quiero pasar tiempo con mi familia—te sonrió.
Edward sabía que su padre sólo era amable pero eso no disminuía sus celos, eras hija de un compañero porque lo que creciste en una sala de espera y demás espacios hospitalarios, por lo que la mayor parte de tu vida estuviste cerca de Carlisle. Eso lo alteraba un poco, ¿por qué no fue a visitarlo al trabajo antes?
—No puedo dejar que te vayas sola, es algo tarde—dijo Edward mientras sacaba las llaves de su auto del bolsillo—déjame acompañarte.
—Eres muy lindo, pero sé cuidarme sola—respondiste y saliste de ahí antes de que insistiera una vez más.
Carlisle dejó que su hija fuera tras ella, aunque no estaba seguro de que esa acción sea buena no podía contenerlo para que no lo haga.
Edward subió a su auto y la siguió de forma disimulada. Notando como dos hombres empezaron a seguirla luego de unas tres cuadras.
—¡Oye bonita, ven!
—¡Sí, nosotros no mordemos!
La chica de piel morena sonrió de lado y cambió su rumbo hacia uno de los callejones, esos espaciosos donde las personas adictas se reunían para comprar, vender y a veces consumir. Ambos señores creyeron que la tenían acorralada, por lo que pensaron en las cosas que iban a hacer con ella, cada uno de los pensamientos siendo escuchados por el vampiro, quien nunca había tenido tantas ganas de matar a alguien.
—¿Saben que lo que hacen esta mal, cierto? Es considerado acoso—dijiste mientras se apoyaba en una de las paredes.
—Mira, Steve. Es como esas perras feminazis, ¿qué vas a decir ahora? ¿qué el porno es malo? cómeme las bolas.
—Claro que lo hará, pero primero será mía—le respondió Steve.
—Estoy cansada señores, así que haré esto rápido—sonreíste mientras en un parpadeo tus ojos cambiaron a un morado intenso, asustando a los hombres frente a ti.
Tus manos desprendían un humo del mismo color que sus ojos, causando pánico en ambos sujetos. Al intentar correr lejos tuyo aquel humo los interceptó haciéndolos ver todas y cada una de sus pesadillas y quemandoles la piel. Iban a morir de igual forma, por lo que no sentiste ni un ápice de pena.
Aquella escena sorprendió a Edward, quien tampoco sintió pena por aquellas personas.
Al terminar ambos cayeron al suelo sin vida, sus ojos abiertos completamente blancos.
—Si aún quieres llevarme a casa puedo responderte algunas preguntas—dijiste mientras acomodabas tu abrigo y caminabas rumbo al auto del chico.
La mente de Edward con miles de preguntas que se resumían en una sola: ¿Quién era Dharma Bloodshot?
edición: 01/jun/2023
adoro este o.s, de mis trabajos más decentes.
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Robert Pattinson
Randomℙ𝘳𝘦𝘧𝘦𝘳𝘦𝘯𝘤𝘦𝘴 𝘺 𝘰.𝘴 𝘥𝘦 : ᶜᵉᵈʳⁱᶜ ᵈⁱᵍᵍᵒʳʸ ʳᵒᵇᵉʳᵗ ᵖᵃᵗᵗⁱⁿˢᵒⁿ ᵉᵈʷᵃʳᵈ ᶜᵘˡˡᵉⁿ