Narra Skay
-¡Skay Denver Cox! ¡Más te vale estar despierto en este momento! – Con un gruñido me doy la vuelta tapándome el rostro con la almohada, sin siquiera molestarme en identificar a quién osa a perturbar mi sueño. - ¡Skay!
- Tiene un sueño jodidamente pesado. – Escucho otra voz y me decido a abrir los ojos. Ya ni modo, no me van a dejar dormir.
Cassie está maquillando a Amy y Alec está sentado en el sillón con el gato.
-¿Por qué me despiertan tan temprano? – Digo de camino al baño de mi habitación.
- ¿Temprano? Son las 9 de la mañana. – No respondo ya que empiezo a lavarme los dientes, sólo me limito a encogerme de hombros.
- Por curiosidad, ¿No es hoy tu reunión con Tyler para los textiles? - Me detengo y me enjuago la boca. Cierro la puerta del baño rápidamente y entro a la ducha con un escalofrío al sentir el frío del agua.
- ¡Recuerda que hoy me quedo con el auto! – Grita Amy detrás de la puerta y tuerzo los labios.
Joder, tendré que recurrir a un taxi. O comprar otro auto.
Unos minutos después salgo del baño con la toalla en la cintura.
-Fuera de mi habitación, cotillas. – Cassie rueda los ojos y obedece.
- Sí volvemos a llegar tarde, Logan nos mata. – Puntualiza Alec.
- Claro, Ale. – Entrecierra los ojos y sale de la habitación dejándome solo con Amy.
- ¿También quieres que me vaya o...? – Antes de que pueda terminar de hablar, me quito la toalla y ella se da la vuelta tapándose los ojos. - ¡Maldición, avísame!
Me cambio rápidamente y me planto frente al espejo colocándome la corbata.
-Aún no me acostumbro a verte con corbata. – La miro a través del espejo mientras se coloca los tacones.
Lleva un vestido negro con una abertura en la espalda y el cabello castaño suelto en perfectas ondas. El maquillaje es sencillo, pero con un aire serio y lleva el collar con la D de Denver.
La idea de que lleve un collar que la una a mi es jodidamente tentadora.
Vuelvo la mirada a mi reflejo antes de pensar en no ir a la reunión. Logan me mataría, y probablemente a Alec por permitirlo.
-¿Quieres que te lleve, galán? – Pregunta descaradamente mientras toma su pequeño bolso. Me pregunto por un momento de dónde sacó la ropa, zapatos y el bolso, pero el escote me responde la pregunta no formulada.
Cassie. Solo ella usa ropa así de provocadora, pero en Amy, que tiene más curvas y esbeltez es malditamente caliente.
Entrecierro los ojos en su dirección.
-Claro, con gusto dejo que me lleves al trabajo en mi auto. – Me guiña un ojo y se acerca hasta plantarse frente a mí.
- Tu cabello aún no se acostumbra a estar peinado como un ejecutivo. – Comenta mientras pasa los dedos entre mis mechones, justo como lo hizo en mi oficina.
La imagen de ella haciendo ese simple acto vuelve a parecerme sexy y aparto la mirada.
Definitivamente la abstinencia me está matando. Ya no puedo pensar en nada que no sea ella... Y no de una forma romántica, precisamente.
Amy se aparta, alejando por unos instantes mis indecorosos deseos y con un suspiro, me coloco las Ray Ban para ocultar mis ojos. No quiero que se percate de que no puedo apartarlos de su cuerpo.
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Te Enseñaré A Amarme
Teen Fiction(Segunda parte de Te Enseñaré A Tenerme Miedo) "Solo debes volver, regresa por mí... Y sí no puedes hacerlo, no importa, te esperaré hasta que decidas que ya lo he hecho demasiado. Y sí nunca lo haces... Tampoco importa, mi amor seguirá siendo pacie...