•Eres la persona correcta en el momento equivocado•//Ralicia

"23"

Diferentes sensaciones invadían mi cuerpo, pero estaba segura de lo que quería. La mire a los ojos, esos tan radiante. Me regalo una sonrisa y se volvió a acercar a mis labios, los beso con tanta suavidad que podía quedarme en ese momento toda la vida, mi cuerpo se aflojó por completo. Comenzó a bajar sus mano por todo mi torso, hasta llegar a mi cintura, la apretó leve y me acerco más a su cuerpo, pegandolo con el suyo. Sus besos comenzó a bajar por mi cuello, en mi estomago sentía un hormigueo, al contacto de sus labios con mi piel. Lleve mi cabeza hacia atrás, mientras un suspiro pesado salió de mi. Lleve mis manos a su nuca y comencé a hacer círculos suaves con mis dedos. Sus labios volvió a los míos, mientras que su mano acariciaba mi espalda esta vez por debajo de la tela. Me quito lentamente la camiseta que traía  puesto, yo hice lo mismo. Acaricio mis brazos hasta llegar a mis pechos. La mire fijo.
-yo, intente decir. Ella pozo su mirada en mi. Yo nunca hice, seguí hablando entrecortada, trague salida, ya sabes, baje mi mirada. Un pequeña risa salió de ella.
-Tranquila, no haré nada que no quieras dijo con voz suave. Lleve mis manos a su mejillas y las acaricie.
-Esta bien, respondí susurrando, mientras me volvía a acercar a sus labios. Deje un beso corto, ella se separo y volvió a rozar sus labios cerca de mi pecho. Acaricie su espalda lentamente y desprendi sus sujetador. Ella con su pierna abrió las mias, acercándose aun más a mi. Comenzó a dejar besos por todo mi pecho, quito mi sujetador y fue esta vez su lengua que empezó a jugar en el.
-Alicia, jadee. Subió sus besos a mis labios formando un beso lleno de pasión, su lengua rozaba la mia, se movían a la perfección. Lleve mis manos a su pecho y comencé a acariciarlos mientras que ella llevo las suyas hasta mi pierna, acaricio suave todo mi muslo hasta llegar a mi intimidad, lo rozo por encima de mi pantalon, largo un suspiro.
Iba a introducir su mano en el cuando un móvil comenzó a sonar.
-Joder, susurro Alicia. Se separo apenas de mi. Yo trate de tomar mi postura. Miro su móvil que estaba sobre la mesa.
-Es el tuyo, dijo enseñandome la pantalla de su móvil apagado. Busque el mío en mi cartera, era mi madre.
-Mierda, susurre. Trate de recuperar mi respiración, era imposible.
-mamá dije respondiendo su llamado, trate de sonar lo más relajada posible.
-Raquel ya vienes? Pregunto.
-Si, si enseguida mamá, respondí.
-Vale. Me corto la llamada. Mierda que esta mujer tenía algo para cagar los mejores momentos, una puta llamada para eso, dije frustrada dentro mío.
-Todo bien? Pregunto alicia a escasos centímetros de mis labios.
-Si bueno, intente decir mirando los suyos. Me tengo que...
-Tenes que irte, me interrumpió. Asenti.
Me levante, me coloque mi sujetador y la camiseta. Ella hizo lo mismo. La mire y sonreí, era tan hermosa. Volví a buscar mi móvil para escribirle a María. Estaba cerca de la casa de Alicia, asique en 5 minutos estaría en la puerta. Tiempo suficiente para despedirme de ella, aunque claro nunca eras suficiente y menos si nos teníamos que despedir. Era sábado y hasta el lunes no la vería a ver.
-Siento tener que irme así, dije mirándola. Me cogio de la mano
-Esta bien, dijo casi en un susurro. No se si iba a decirme algo más, pero no la deje. Me acerque a ella y volví a juntar mis labios con los suyo, maldita sea parecía una adicción. Comenzó con un beso suave, hasta nuevamente convertirse en uno lleno de pasión, en esos de hacerte parar el mundo, en esos donde solo existen dos perdonas sin importar que pase fuera, en esos lleno de deseo, llenos de lujuria queriendo así volver a sentirnos, llenarnos...
Nos separamos prácticamente sin respiración.
-María, dije entrecortada. Ella mi miró. Esta afuera, volví a decir. Me acomodo el pelo y se separó de mi.
-Vale, respondió. Le sonreí, ella hizo lo mismo. Abrió la puerta. Nos vemos el lunes susurro.
-Hasta el lunes conteste, mi sonrisa seguía en mi rostro.    
Camine hacia donde esta María, en su rostro también pude ver una sonrisa, no se si era por verme así, o porque quizás ella también tuvo una tarde muy buena.
-y tu que te traes, pregunte, respondiendo así a mi duda.
-aayyy Raquelita, respondió dando giros mientras seguíamos caminando. El amor, el amor, culmino diciendo. Eso no respondía a nada. Claro estaba que era el amor, nos traia tonta a las dos.
-Si el amor, dije tras un suspiro, recordando los besos de la pelirroja.

Ya habíamos llegado a casa, me despedí de María y entre a casa. Fui a la cocina en busca de agua, ahí estaba mi madre con su amiga. Vaya mierda para que me llamo estando con esta señora, dije por mis adentros.
-Hola hija, dijo mi madre al verme.
-Hola conteste no muy contenta, aunque lo trataba de disimular. Hola Silvia, salude a la otra señora.
-Raquel bonita, contesto. Hace mucho no te veo que guapa estas, volvió a decir. La sonreí.
-Hija todo bien, pregunto mi madre. Al parecer tanto no disimule.
-si mamá, solo vine por un vaso de agua, conteste, cogi el vaso con agua.
-es verdad hace mucho no nos vemos, espero verla más de seguido, conteste a la señora tras una sonrisa.
-lo será, contesto.
Subí a mi habitación y me deje caer en la cama...
Mi cuerpo se estremeció al recordar a la pelirroja, sus caricias, sus besos, su respiración, su cuerpo. Mi mente viajaba una y otra vez a su lado, a sentir mi piel junto a la suya, a sentir su aroma, a sentir su paz, esa paz que solo en ella la encuentraba...   

_______________________________________________________

Siento haber tardado tanto en actualizar, lo compensaré♡.