Thomas Sangster, El Padre De Mi Hijo ~Segunda temporada~ CORRIGIENDO ORTOGRAFÍA

Capítulo 21

Abrí los ojos y la intensa luz me hizo volver a cerrarlos.
Cuando pude adaptarme los abrí lentamente viendo el techo blanco, y escuchando más claramente un pitido de mi lado izquierdo

Me dolía todo el cuerpo y me sentía cansada.

Escuché la puerta abrirse y giré lentamente la cabeza para ver a Thomas ingresar a la habitación, quien al verme despierta corrió a mi lado besando mi frente y tomando mi mano libre.

-¿Cómo te sientes?

-¿Qué... Qué me ocurrió?-Thomas apretó los labios pero no contestó-¿Thomas...

-... Dejaste a Blake con la psicóloga, y cuando estabas bajando las escaleras, te mareaste... Y caiste rodando por estas.

-¡Mi bebé!-rápidamente llevé mis manos a mi vientre, sintiendo este un poco hinchado, pero nada comparado a como era antes-¡Mi bebé! ¡Por Dios, Thomas, mi bebé!

-Tranquila-Thomas tomó mi mano apretandolas delicadamente.

-¿Thomas, y mi bebé?

-Tuvieron que hacerte una cesárea de emergencia... Está en una incubadora, pero aún no me dijeron mucho más.

-Quiero ver a mi bebé.

-Tranquila, voy a llamar al médico para que te revise y nos diga cuando puedes verlo.

Thomas besó cortamente mis labios y salió por la puerta, no pasó mucho tiempo cuando volvió a entrar, y detrás de él el médico.

-Hola, ______ ¿cómo te sientes?-se acercó comenzando a revisar la máquina conectada a mi brazo.

-Me duele todo, pero quiero saber sobre mi bebé.

-Déjame revisarte, y luego hablaremos sobre eso ¿está bien?

Accedí y dejé que el doctor hiciera su trabajo, revisando la cicatriz y limpiandola.

-Bien, parece que todo está correcto contigo. Respecto a tu bebé, esta en cuidado intensivos, y esa no es mi sección, pero déjenme averiguar quién está a cargo de su bebé y le pediré que venga a hablar con ustedes-dijo el médico para salir de la habitación.

-Vas a ver que todo va a estar bien-Thomas se sentó en la silla que estaba al lado de la camilla y tomó mi mano-Vamos a superar esto, te lo prometo.

-¿Y Blake? ¿Dónde está?-acababa de caer en cuenta que lo deje en la psicóloga, y ya habían pasado horas.

-Tranquila, Dylan fue a recogerlo, no te preocupes, está en casa.

-¿Cómo te enteraste?

-Bueno, rodaste por las escaleras, el recepcionista escuchó y fue a ver, encontrándote tirada en el piso, por suerte actuó rápido, te tomó, tomó tu bolso, te subió a su auto y te trajo lo más rápido que pudo hasta aquí. Una vez que ingresaste al quirófano, él seguía con tu bolso, por lo que busco tu celular y me llamó. En ese tiempo también llamó a la psicóloga para que estuviera al tanto. Se quedó aquí esperando noticias tuyas hasta que llegué, realmente estoy muy agradecido con él.

-¿Y los demás? ¿Por qué no están aquí?

-Tu padre si estuvo hace unas horas, pero no era horario de visita y sólo me dejaron pasar a mi, así que se fue a casa a preparar el bolso del bebé, el tuyo, y uno para mi porque no pienso moverme de aquí.

-¿El bolso del bebé? Pero... No tenemos nada para él. Ni siquiera sabemos que es.

En ese momento, unos golpecitos se escucharon en la puerta, Thomas se levantó y fue a abrir, dando paso a una mujer morena, de cabello negro, y una bata blanca.