3. the chain.

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Gia estaba terminando de arreglarse, Sophie no estaba muy bien, ella creía que podía mentirle a la neoyorquina, pero Gia se daba cuenta de cuando su amiga estaba mal.

Se miró en el espejo, bastante insegura de lo que se había puesto, realmente no creía que el pantalón bota ancha y el top de lentejuelas combinaban del todo bien. Bajó las escaleras, gritándole a Sophie que ya estaba lista.

-¿Estás nerviosa?- preguntó, mientras miraba como la castaña jugaba con sus manos.

-Un poco- admitió, Gia asintió.

-Tranquila, todo saldrá bien- le dijo con seguridad, esperaba no equivocarse, pues últimamente Milo solo sabia hacer bien una cosa, cagarla.

Cuando llegaron a la casa de Milo, había mucha gente, autos estacionados y algunas personas afuera, se despidieron de Gene y bajaron del auto.

-Pearce va entrando, aprovechemos- le dijo Sophie, Gia cerró sus ojos con pesadez- hola pearce.

El actor se giró para mirarlas, le dio una sonrisa:-Hola chicas- Gia solo lo saludó con la mano- Se ven bien.

-Gracias- habló Sophie, mientras avanzaban por la casa, Gia estaba nerviosa, esperando que Pearce no se le ocurriera jugar con su psiquis.

-¡Hola chicas!- saludó Meg, quien llevaba un enterizo azul brillante- se ven hermosas.

Gia suspiró:-Iré por algo de tomar- avisó- vuelvo pronto.

Dicho esto, caminó por la fiesta, buscando algo que servirse, miró a Milo hablando con unas personas, se acercó hasta él, tocando su hombro.

-Hey G- sonrió el pelinegro- que bueno que viniste, ¿vino Sophie?

-Sip, está hablando con Meg por ahí- respondió- oye, ¿donde puedo servirme algo? Quiero beber hasta desmayarme.

Milo rió, haciendo sonreir de vuelta a Gia, quien secretamente adoraba hacer reír a las personas, la abrazó por los hombros llevándola hasta la cocina, donde Pearce se encontraba sirviendo tragos. Gia inmediatamente se puso nerviosa.

-Sírvete lo que quieras- dijo el pelinegro- ¿que preparas ahí, pearciboo?- preguntó en tono de broma, Gia hizo contacto visual con Pearce, quien le sonrió.

-Le preparo a Ariel el mejor trago de su vida- contestó, Milo asintió mirando con atención lo que mezclaba.

-Bueno, debo ir a buscar a Sophie, deseenme suerte- dijo el actor, mirando a su alrededor.

-Suerte- dijeron ambos al mismo tiempo, mientras el pelinegro desaparecía entre la multitud, el primero en hablar fue Pearce- Estás linda.

-Lo sé- respondió ella, tomando dos vasos, agarró la jarra con lo que parecía jugo de frutos rojos y luego el vodka- tu no te ves nada mal, pareces John Travolta en fiebre de sábado por la noche. Excepto que John es lindo.

-¿Yo no?- Gia torció la nariz, en una mueca graciosa, que lo hizo sonreír- no he visto esa película.

-No me sorprende- respondió ella, mezclando el vodka- deberías, es un clásico. Además, tiene de soundtrack a los bee gees.

Pearce la miró, tenia que bajar un poco la mirada ya que ella era un poco más bajita que el:- Podríamos verla juntos.

-Podríamos- asintió Gia- pero tengo que hacer muchas cosas, entonces no lo sé.

-¿Cosas como qué?- preguntó interesado, ella mordió su labio, colocando una pajita en el vaso, sonriendo ante su obra maestra.

-Hundirme en mi miseria- se giró con gracia- nos vemos, Pearciboo.

Deja vu 《Pearce Joza》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora