Dance for me

Shadow

[Min Yoon Gi]

Decir que estaba en la ruina luego de aquella despedida no llegaba a describir mi deplorable estado, desde aquel nefasto suceso me había vuelto incapaz de enfocar mi mente en algo que no fuera ella. Ya ni los negocios eran lo mío, cada momento en la oficina se había vuelto un suplicio. 

Estaba totalmente fuera de mi, motivo por el cual mi equipo de trabajo, en especial mi asistente habían estado más que sobrecargados durante los últimos días haciendo para mi cientos de reportes, análisis y estadísticas, estaba casi seguro que habían llegado a odiarme ya que ante lo más mínimo debía acudir a ellos para que me pusieran al tanto de los temas de extrema relevancia.

Mi encanto por esa mujer iba a llevarme a la ruina si no hacía algo para evitarlo. 

Algo en mi, tal vez un ciego optimismo, me hacía creer que ella no abandonaría su empleo, no era tan testaruda como para tirar todo por la borda y volver al club, Hyuna me había asegurado que mi Afrodita no había vuelto a poner un pie allí. Sabía que ella deseaba estar aquí y yo podía darle esa seguridad. Podía darle todo lo que ella anhelara y más, por primera vez deseaba dar hacerlo, abrirme y dar lo mejor de mi a alguien. Esa cursilería era sumamente anormal en mí pero con ella todo desde el principio había sido diferente. 

Dos noches contiguas frecuente el bar del fulano con intensión de poder hacer una lectura de su semblante, con solo verlo podría intuir si ella se había sincerado o no. Un corazón roto era fácil de percibir, la tristeza y oscuridad en una persona aflora activamente si uno indaga de la manera correcta. Lamentablemente en ninguna de las visitas pude encontrarlo, no era del todo lo que esperaba pero tampoco lo consideré algo malo, me hizo creer que tal vez él, al igual que yo, no estaba con la cabeza para liderar un negocio a causa de ella.

Tanta incertidumbre me impacientaba, el hecho de si seguían juntos o no a esta altura del partido me quitaba el sueño. Mi dignidad me gritaba que debía poner distancia pero... ¿Cuánto más podría soportarlo?  Claramente no por mucho...debía verla.

Poniendo fin a mi tortura me aventure al departamento de marketing y promoción. No me hacía mucha ilusión frecuentar ese área, pero si no hacía algo iba a volverme loco. Extrañamente al llegar lo primero que noté fue su escritorio vació. ¿Dónde demonios se encontraba?. Su jefe podría darme una idea de ello. 

Sin mucho protocolo de por medio me aventuré a ingresar en la oficina de Jeon, su rostro sumamente concentrado cambio para regalarme una sonrisa apacible y sumamente calma. No creí que fuera a estar esperándome.

YG:— ¿Muy ocupado Jeon?— inquirí fingiendo simpatía sin alterar mi conocido genio. 

JK:— No tanto Min, si uno esta al día con sus labores y tiene un buen equipo de trabajo logra hacerse tiempo para visitas... imprevistas... ¿A que debo el honor? — sonrió de lado cerrando la carpeta que tenía frente a él mientras me acercaba a su escritorio.

YG:— Tal vez tengas razón, y de ser así debería replantearme mi equipo de trabajo... ya sabes... no me caracterizo por ser una persona con mucho tiempo libre — solté una leve risa irónica llevando ambas manos a mis bolsillos — hablando de equipos de trabajo... noté que hay algunos escritorios vacíos en marketing ¿bajas a principio de mes Jeon? ¿Acaso alguien no cumplió expectativas? —

JK:— ¿A que se debe el repentino interés en el departamento de marketing? — sonrió divertido entrelazando sus dedos por encima del escritorio — creí que lo tuyo eran los números y los negocios Min, no la promoción y comunicación — alzó sus hombros para luego reclinar su silla —

YG:— Soy un hombre de múltiples intereses, tu accionar defensivo es innecesario, en segundo lugar, fue un mero comentario. Los ingresos en los últimos días comenzaron a disminuir y llegué a pensar que la promoción podía ser uno de los factores causantes — Culpar a marketing por pérdidas era una salida fácil, no sonaba como un disparate con lo cual no había forma de que el mal pensara de mi presencia —