Sentimientos Conectados [SasuSaku]

IX

No puedo negar que los días más difíciles de la semana son los lunes, muchos pacientes, informes y trabajo.

Lo único que quería era volver al apartamento a dormir pero hoy iríamos con Hinata a ver lo de los vestidos y al terminar mi turno en el hospital ella ya estaba allí esperándonos.

-No sabes lo agradecida que estoy contigo Sakura de que hayas aceptado, sobre todo porque no nos conocemos nada pero agradezco mucho que me hayas escuchado ese día – dijo todo eso en un abrazo –

-No te preocupes – le dije sonriendo – es un placer –

-Además estarás emparejada con Sasuke ese día – dijo Ino sin ninguna emoción –

-¡Es cierto! – Dijo Hinata emocionada – Naruto me contó que ya habían tenido una cita tú y Sasuke, él se lo dijo –

¿Una cita? Eso me hizo sonreír. Subimos al auto de Hinata cuando tuve una idea.

-¿Saben que lugares o cosas le gustan hacer a Sasuke? Le dije que la próxima vez sería yo quien lo invitara a algo pero no lo conozco mucho -

Hinata me observó por el retrovisor.

-A Sasuke le gusta el silencio, nunca habla así que podrías llevarlo a un museo –

-¿Nunca habla? – dije confundida –

-No es una persona muy sociable – dijo esta vez Ino – Es un milagro que conserve a sus amigos aun, Itachi es tan distinto a él, no entiendo como pueden ser hermanos –

Decidí no insistir más, al parecer a las chicas no les agradaba mucho Sasuke y decidí que de ahora en adelante sería yo contra el mundo, algo se me ocurriría para invitar a salir a Sasuke.

Hinata ya había escogido el color y modelo de los vestidos, eran largos y color vino, solo faltaba medir el mío ya que al parecer la prima de Naruto nunca pudo venir a las pruebas.

En seguida llegó una chica castaña, se presentó como Ten-Ten con la pequeña hermana de Hinata, Hanabi, adorable igual que Hinata.

Me tomaron las medidas y fuimos todas por un helado.

-Solo será un sabor, ya nos tomaron las medidas –

Ino de inmediato hizo un puchero.

-Oh Ino no seas puerca – le dije bromeando –

-¿Cómo me dijiste frentezota? – me respondió de la misma forma –

Todas comenzaron a reír mientras escogimos el sabor de nuestro helado, y mientras reía también me sentí completamente feliz de poder comenzar de nuevo, solo me faltaba averiguar algo que no dejaba de rondar en mi cabeza ¿Por qué llevo años dibujando el rostro de Sasuke? A veces esa duda no me deja dormir y para eso debo acercarme más a Sasuke.

La semana pasó rápidamente y ya para hoy, viernes, mi cuerpo me pedía descansar pero fue justo cuando caminaba a casa que tuve una idea.

Entré a la habitación vacía que tenía en casa, la verdad es que tan vacía no estaba, habían mil cosas allí que no deberían estarlo y es simplemente por mi flojera de ordenar pero ya tenía decido que hacer con estas paredes perfectamente blancas.

Desocupé la habitación y coloqué papel en el suelo y saqué mi teléfono, busque el número de Sasuke y decidí escribirle.

Hola ¿haces algo mañana?

Su respuesta como siempre fue inmediata.

No

Mordiendo mis uñas y temblando decidí responderle.

¿Quieres venir a hacer algo divertido en mi apartamento mañana?

Al enviar el mensaje inmediatamente me di cuenta que algo andaba mal, Sasuke ya había visto el mensaje y no respondía así que decidí escribir nuevamente para aclarar la situación.

Mierda, creo que se entendió mal, se lee como si te estuviera invitando a tener sexo a mi departamento y no es así.

No es que no quiera tener sexo contigo, si quiero pero no sé si tú quieras, es más, ni siquiera sé si te agrado o te gusto

Inmediatamente al leer lo que había escrito supe que lo había arruinado, estaba temblando de pies a cabeza, no puedo creer que le acabo decir a Sasuke que quería tener sexo con él. Decidí marcarle por teléfono.

-Hola – su voz tan profunda y grave hizo que me dieran escalofríos –

-Soy tan estúpida – me excuse de inmediato – me puse nerviosa y comencé a escribir un montón de estupideces ¿podrías olvidarlo? –

Escuche una pequeña carcajada a través del teléfono.

-Está bien-

- ¿Quieres venir a mi apartamento mañana? Te aseguro que la pasaremos bien y prepararé algo genial para cenar -

-¿Mañana? –

-Sí, tiene que ser después de mis clases de dibujo con Sai el novio de Ino, así que a las 7 puede estar bien –

-Allí estaré... ¿apartamento 23 no es así? –

-Sí – dije dando pequeños saltos por todo el apartamento – Ven con la peor ropa que tengas, algo viejo, no lo sé un short y una camiseta deportiva, algo así...ah y los peores zapatos que tengas -

Hubo un poco de silencio al otro lado de línea. 

-Está bien, nos vemos entonces -

Sasuke cortó la llamada y de nuevo comencé a sentir que flotaba y comienzo a cuestionar si realmente amé a Gaara, sinceramente creo que si lo amé, pero jamás me hizo sentir de esta forma.

Y sé que estaba agotada pero inmediatamente tomé las llaves del coche y corrí hasta el centro comercial antes de que cerraran.

Pude conseguir todo, overoles desechables blancos, lentes protectores de seguridad, rociadores, brochas y pintura rosa, azul y gris, me pareció que podría combinar bien. Además de los ingredientes para preparar sushi. 

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