Smells like Summer [EDICIÓN]

Capitulo 24: Playa

✨Dame playa, sol, calor y tus besos. Es todo lo que necesito✨

Alice:

Día 2: Cabaña

Ayer nos encargamos de acomodarnos en la cabaña - aunque ya estábamos bastante acomodados- y organizar lo que nos gustaría hacer los próximos días - aunque todos sabemos que no lo vamos a hacer pero a Sunny le gusta tener todo organizado le da paz , muy virgo de su parte- lo que nos sorprendió que fuera tan facil fue la selección de habitación con Sunny utilizamos nuestros encantos femeninos para persuadir a los chicos de que nos dieran su habitación ( que era la más grande por ser la principal) y ellos se quedaron con una que era un poco más chica pero tenía baño. Al segundo de entrar a la habitación literalmente ya estaba todo desorganizado creo que entre Sunny y yo tenemos un tornado portátil y cada vez que salimos lo activamos en donde vamos a dormir.
Quedo solo una pequeña habitación libre suponemos que es la habitación de artículos de limpieza ahí pusimos todas las valijas y cosas que no eran necesarias tener encima como botellas vacías y eso.  También ayer fuimos a pasear al pueblo, conocimos un poco la gente y de alguna forma terminamos en una fiesta de algún chico de nuestra edad que conoció Peter y nos invitaron a todos. Esta vez la conductora designada era yo( cosa que agradezco porque aún no siento 100% cómoda tomando con extraños). Bailamos, conversamos con bastantes chicos y confirmamos que las habilidades de Peter para conquistar son pésimas. A eso de las cinco de la mañana volvimos a nuestra cabaña con el auto de Sunny ( por suerte ya había algo de luz, odio manejar de noche). Como soy una buena persona acosté a todos y revisé que aún vivieran; a Luke lo dejé tirado en el sillón porque el peso de cuerpo sobre el mío era una tortura encima el estaba demasiado borracho y no colaboraba para nada.
Escuché un grito muy agudo y desperté asustada y desorientada. Corrí hasta donde venía el grito. Era Sunny que pego un grito al despertar en la misma cama que Peter les expliqué que los había acostado yo ahí pero que no había pasado nada entre ellos. Más tranquila se paró y se fue a nuestra habitación a continuar durmiendo, como era relativamente temprano me fui a la cocina para preparar café. Pase por la sala y vi a Luke todavía dormido en el sillón, no pude evitar acercarme me quede ahí simplemente observando y contemplando la paz que me transmitía y como el pecho le subía y bajaba cada que respiraba - es hipnotizante- deje de mirarlo para ir a la cocina necesitaba urgente hacerme un cafe. Busque por toda la cocina y en la alacena más alejada y en el rincón más oculto estaba el café instantáneo. Me batí el café y me lo tome junto con sos galletitas de chocolate que había comprado en el súper el primer día. Cualquiera diría que soy una jubilada: un miércoles a las 11.00 de la mañana tomando un café en el quincho ( un pequeño patio cubierto que tenía vista al jardín). No quería despertar a nadie así que me lo tome ahí. Con toda la paciencia del mundo termine mi café. Sentir el fresquito veraniego de la mañana, ver la pileta, el jardín y escuchar de fondo el mar, podía acostumbrarme a esto. Volví a entrar con la taza en mano fui hasta la cocina y me puse a lavar la taza. Habíamos llegado a ese acuerdo el que lo usaba lo lavaba. Deja la taza secándose y fui a la cocina a observar a Luke como toda una acosadora.
Me sorprendió bastante no encontrarlo, supuse que se había despertado y me lo confirmó el ruido del agua cayendo . Después de vario minutos el ruido del agua cesó y salió Luke del baño principal con una toalla en su cintura tapando su parte. Que a pesar de la toalla se marco además en sus hombros aún tenía unas gotas de agua cayendo.
- Queres café?, le pregunte
- No grites, se me parte la cabeza dijo el acareándose la cíen y haciendo cara de dolor.
Me paré del sillón y fui hasta la mesa de la cocina donde estaba mi bolso, metí la mano y saqué dos comprimidos, uno era una pastilla antiácido y otro era uno para el dolor de cabeza. Se lo di el me agradeció y se los tomo con agua. Yo me volví a estar en el sillón y encendí la tele donde casualmente estaban pasado Harry Potter y el cáliz de fuego. Me acomode en el sillón y me puse a verla, sentí como la parte cintaría del sillón se hundía y lo vi sentarse aún en toalla.
- Como si el televisor supiera que ibas a venir, dijo el con una sonrisita  en su cara.
- Que te puedo decir, Cedric y yo estamos destinados, respondí.
Cuando nos volvimos a parar la película ya había terminado y el casi todos en la casa estaban despiertos. Todos menos Peter que a esta altura pensábamos que había muerto.
Con Sunny nos  fuimos a buscar algo para almorzar por que a esta altura el cafecito que me había tomado estaba en el dedo gordo del pie. Buscamos hamburguesas para todos y volvimos.
Cuando llegamos Peter estaba casi muerto en el sillón, oler la comida lo revivió notablemente, comimos las hamburguesas y nos fuimos a nuestras habitaciones.