Que sé kárate de la tele (Cobra kai)

CAPÍTULO 9

Narra Rao

-Qué narices es eso!?
-Lo siento! Lo siento muchísimo de verdad! - Abrimos la ventana y vimos a una chica rubia con las puntas rosas y la ropa azul.
-Quien eres y que hacías en mi ventana.
-Oh, solo quería avisaros de que un tal Tony Lawerence, no sé si os suena de algo -Airun desvió la mirada y Rain gruñó algo parecido a un "sí". - Bueno, pues él, que está abajo esperando a que salga Rain para darle una paliza y a mí también por avisaros.
Pobrecita, no la iba a dejar en la calle.
-Bueno, pues quédate a dormir aquí.
-Oh! Gracias!
-Qué Lawerence está ahí abajo!?
A Rain le iba a dar algo.
-Qué Tony está ahí abajo?
Ahora era a mi a la que le iba a dar algo.
Y que conste, no era porque una desconocida había aparecido en mi ventana, era por el tono soñador con el que mi prima dijo aquellas palabras.
-Qué si, pesadas. Un momento, como te llamas?
Ella sonrió.
-Me llamo Úrsula.
-Un placer.
-Puedes dormir en esa cama de ahí, está libre.
Que amable era mi prima.
-Rao, parece que lo de Marina d'Or te está funcionando.
-Sí, verdad? Ya sabía yo que la cosa pintaban bien.

Fin de la narración de Rao

(...)

Narra Rain

A las cinco de la mañana ya estábamos despiertas todas. Y, aunque nos costó un poco convencer a las madres de Airun y de Rao para que nos dejaran montar fiesta, lo conseguimos.
Úrsula nos contó que era danesa, pero que su padre trabajaba de piloto de avión y se había mudado más veces de las que podía contar.
-Dinamarca es preciosa. Algún día os llevaré.
-Pero no decías que te habías mudado muchas veces?
-Sí.
-Entonces cómo es posible que recuerdes como era Dinamarca?
-Porque hasta los catorce años, hace dos, viví en Copenhague con mi madre, mi hermana mayor, y mis hermanos mellizos pequeños. Mi padre solo dirigía vuelos dentro del país, así que aunque no estuviera con él siempre, por lo menos una semana al mes estaba con nosotras.
-Y por qué luego os empezasteis a mover de casa?
Úrsula desvió la mirada.
-Cuando yo cumplí catorce años, mi madre quiso celebrarlo. Yo ya era mayor entre comillas, y no quería una fiesta en un parque de bolas, por ejemplo. Cómo cualquier chica de mi edad, quería quedar con mis amigas a hacer algo especial y que estuvieran mis tres hermanos y con mis dos padres. Cómo os imaginaréis, los dos no podían. Mi padre tenía que hacer un vuelo muy importante y no podía faltar bajo ningún concepto. Entonces...

Hola!
Perdón, pero ahora me ha dado con dejar con la intriga...
Nos vemos!