Capítulo 4º.

1.6K 279 81
                                    


Luz lanzó el bate a un lado acercándose más a Amity la cual aún se encontraba tumbada en el suelo, helada mirando aquel hombre que yacía en el suelo, su respiración parecía haberse cortado en el instante que la contraria le dio aquel golpe en seco al señor que estaba encima de ella.


Su rostro se encontraba arañado, algo hinchado y con una de sus mejillas totalmente roja, Luz reconoció al instante ese tipo de golpes, era un puñetazo o bien un guantazo, pero uno que le iba a dejar marca por unos días. Además de eso, pudo ver bajo sus pies estaban los cabellos de la Blight, y apostaría que habría más en algunos rincones sino fuera por la falta de claridad.

Una mano se extendió ante Amity, una que le sacó de aquel shock en el que había entrado en microsegundos, ladeó varias veces la cabeza para finalmente agarrar la mano que le tendió Luz, levantándose del suelo y sacudiendo su vestido, intentando quitar cualquier rastro de aquel hombre.

— ¿Estás bien? — la mirada de Luz no podía separarse de aquella Amity, nunca había visto miedo en esos ambar, nunca, hasta ahora. Ella no es que conociera perfectamente a la chica, no sabía cómo reaccionar ante esa situación y más con ese carácter tan peculiar que tenía. Así que optó por lo más sensato, se puso ante la mirada de ella y el cuerpo de aquel hombre para agarrarla de los hombros.— Eh, él está vivo, no sé en qué situación estabas per-—. Y antes de que pudiera seguir hablando una Amity con su mandíbula totalmente tensa, en la que parecía que sus dientes se iban a romper en cualquier instante se libró del agarre que había hecho Luz con un manotazo, agarrando en seguida aquel bate que había lanzado al verla y dirigirse al cuerpo de aquel hombre. Las orbes de aquella chica había pasado del miedo a la más pura ira, al odio.

El primer golpe fue asestado, y el segundo, y el tercero...todo fue en tan pocos segundos que Luz entró en un shock que salió en pocos segundos antes de agarrar a Amity por detras, sujetando sus brazos y frenando aquella paliza.

—¡Levántate! ¡LEVÁNTATE HIJO DE PUTA! — El cuerpo de Amity se abalanzaba hacia delante y forcejeaba para liberarse de aquel agarre que había hecho la fémina a su espalda. Estuvieron así durante minutos, unos minutos eternos en el que Amity no dejó de emplear toda su fuerza hasta que cayó de rodillas soltando de nuevo aquel bate que había empuñado con tanta fuerza.

Luz la soltó totalmente al ver que estaba más relajada, volvió acercarse a aquel hombre, pero esta vez para llevar su índice y anular al cuello de este, soltó un suspiro de alivio, respiraba. No necesitaba tener más problemas de los que ahora tenía.

— ¿Por qué lo has hecho? NO DEBERÍAS HABERTE METIDO PODRÍA HABERME ENCARGADO DE ÉL SIN TU AYUDA. — ahí estaba de nuevo la Amity llena de ira, pero esta seguía aún de rodillas con una respiración agitada que apenas le dejaba hablar. Luz no dijo nada, se puso de cuclillas ante ella para empezar a analizar su rostro y cada parte de su cuerpo, buscando algún indicio más de violencia. Pero Amity no la dejó, ya que enseguida la agarró por las solapas de esa chaqueta verde que siempre llevaba consigo, zarandeandola. — CONTESTA NOCEDA. QUIERO RESPUESTAS.

El ceño de Luz se frunció mientras apartaba aquellas manos de ella, unas manos que estuvo agarrando, mientras la miraba con un semblante serio.

— Deberíamos ir al hospital, que te pusieran algo en ese moratón, que contaras todo lo que ha pasado y-—. de nuevo interrumpida por Amity.

—No. — Fue tan tajante y simple, que Luz giró un poco su cabeza, buscando una explicación algo más detallada. -- Llamarán a mis padres, ellos no pueden saber esto. ¿Sabes la mancha que sería esto en mi apellido? Incluso podría salir en la prensa.

—Pero.

—He dicho que no. — Luz dio un suspiro para levantarse y de nuevo, ofrecerle su mano a Amity.

—Esta bien, puedes llamar a tu chofer y-—.

Instituto Hexside.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora