Capítulo 11º.

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Ni una sola palabra se llegaron a dirigir más aquel día, sino fuera porque Luz Noceda dirigía alguna que otra mirada a la Blight, cualquiera diría que eran dos completas desconocidas.

Eso solo ponía más nerviosa a la latina, odiaba ver así a las personas, con pavor, miedo. Pero esta vez, le afectaba más ya que era de un pavor infringido hacia ella, un miedo que no buscaba y rechazaba por parte de la Blight. Y cada vez que intentaba buscarla entre horas, algo o alguien hacia perderla de su visión. Y ni hablar de la salida, antes de que pudiera cruzar las puertas de Hexside la chica ya estaba montándose en su coche.

Ese fue el pan de cada día de la joven Noceda cada día a lo largo de la semana, ni en los entrenamientos tuvo la oportunidad hablar con ella, porque simplemente no asistió a ellos ni una vez, algo raro en ella.

Necesitaba respuesta a lo que estaba pasando, una de inmediato, y solo conocía una persona que podía llegar a otorgarsela. Así que aprovecho el último día de la semana en su salida, sabía perfectamente dónde y con quiénes estaría aquella persona.

Boscha la gran capitana de las animadoras, una de las mejores alumnas de Hexside, con un buen promedio aunque su fama y comportamiento dijeran otras cosas, otras muchas cosas peores. Aquella chica de cabellos fucsia se encontraba tras las gradas con un cigarrillo entre sus labios, rodeada como no, por su habitual grupo de amigas.

Por supuesto que Willow sabía aquella faceta de la chica, lo que hacía y dejaba de hacer, porque ella misma lo contaba, pero aunque lo supiera no compartía aquellos momentos con la chica, no tenían que estar pegadas todo el tiempo como dos chicles, cada una tenía sus vidas.

Luz no tuvo ningún tipo de reparo en acercarse a aquel grupo hasta quedar a pocos metros. Boscha arqueó una de sus cejas, el hecho de ver a Luz sin ningún acompañante acercándose a ella era extraño, pero el hecho que la buscara detrás de la grada lo era aún más.

-¿Sucede algo Noceda? - sus dedos quedaron totalmente libres para hablar

-Venía a hablar contigo. A solas.- recalcó su dos ultimas palabras, no tenía interés en que las demás chicas se enteraran de sus cuestiones.

La ceja de Boscha parecía que se iba a romper, cada vez le parecía más extraño aquel comportamiento, sus hombros se encogieron y empezó a caminar hasta quedar unos cuantos metros del grupo de adolescentes, lo suficientemente alejadas para que no se enteraran de su conversación, pero que su presencia fuera vista.

— ¿Cómo son los padres de Blight?

— ¿Por qué leches me preguntas eso? — Boscha cada vez estaba más desconcertada con la ajena.

— La razón no tiene ninguna importancia, Boscha, vengo en busca de una respuesta por su comportamiento.

Era cierto que Boscha había notado muy rara a su amiga en la semana, es decir, conocía su comportamiento desde que eran pequeñas. Y puede que no fuera la alegría de la huerta, pero su ánimo había decaído sospechosamente. La lógica le habló y unió que aquella falta de animos era debido a la chica que tenía ante sus ojos.

— Son muy estrictos con ella, al punto que controlan su círculo de amistades. Con decirte que Willow era su mejor amiga, y que seguramente ellos tuvieron algo que ver para que sus lazos se deshicieran. Ahora te toca contestar, ¿qué ha pasado entre vosotras para que vengas a pedirme respuestas? Porque está claro que algo ha sucedido.

¿Sinceramente? Luz no esperaba una respuesta de la ajena y menos una tan precisa con tanto detalle. Soltó un suspiro mientras sus ojos rodaron a la derecha, sus manos no tardaron en enfundarse en los bolsillos de su pantalón. Aunque no fuera de su agrado, había sido justa con ella dándole una respuesta.

Instituto Hexside.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora