Instituto Hexside.

Capítulo 23º.

El dolor de aquella noche traspasó a la mañana siguiente, era algo evidente y que obviamente Luz, no pudo evitar. Pero sí disimular, tanto con maquillaje como con una gran actuación por su parte en el que intentaba ocultar un quejido de dolor en cada paso que daba. Pero había algo en ella que no era parte de su gran actuación, su sonrisa, una perfectamente dibujada y estirada sobre sus labios.

Sí, era un cambio de humor drástico, teniendo en cuenta lo que había sucedido hace unas horas. Pero es que el solo hecho de haber podido ayudar a su madre, de poder ver el orgullo en sus ojos al decirle que había encontrado trabajo, que a partir de ese día todo cambiara para las dos. Y razón no le faltaba.

Ya tenía una cita concertada con Kikimora para mañana, su primer entrenamiento. Y sí, estaba con los nervios a punto de ser expulsados por su garganta. Pero eso no le borraría su buen humor, o sus pasos que transmitían tanta seguridad, o sus hombros alzados; simplemente su actitud. Una que fue notoria por parte de su pequeño grupo de amigos. Ese par que estaban reunidos frente a las taquillas, y que simplemente se unió a la conversación que estaban teniendo, en silencio.

- ¿Te has despertado con dos millones en tu cuenta bancaria o....? - Fue Gus el primero en comentar en una pregunta sarcástica, llevando sus orbes a los de la latina, que seguía con sus labios estirados.

- ¿Qué?- Preguntó algo perpleja, por dicha insinuación.

- Es por tu buen humor, Luz. Normalmente a estas horas, sueles venir con una cara de pocos amigos, o simplemente no vienes.- Willow fue quien aclaró las dudas, ya que no parecía enterarse de mucho.

- Ah, oh. - Hizo una breve pausa en la que acarició su nuca, algo avergonzada, sus ojos rodaron para volver con sus compañeros.- He conseguido trabajo. Así que....

Antes de que pudiera continuar, Gus dio un grito ahogado en el que envolvió a Luz entre sus brazos dando algunos saltitos, lo que dejó a la contraria en shock entre bote y bote, que no tardó en intentar zafarse de dicho abrazo.

- Pero ¡eso es fantástico, Luz! - Un comentario de Willow en el que iba de la mano para la unión a dicho trabajo de hacer botar a la latina.

Dos contra uno, era una batalla imposible e injusta, así que si no puedes contra tu enemigo, únete a él. Sí, podía ser una escena cargada de emoción y júbilo acompañada de la satisfacción y el orgullo por parte de ambos chicos hacia la latina. Pero dentro de Luz, algo de culpabilidad se incrementaba en ella. Solo había una pregunta que pasaba una y otra vez, por su cabeza. ¿De verdad estaba bien aquello? Y su pregunta se volvía a responder con la sonrisa de su propia madre.

Una fantástica escena que, a lo lejos, fue observada por un par de chicas, y ninguna dudó en acercarse con la duda reflejada en cada ápice de sus rostros. Ambas cruzadas de brazos, quedaron frente a frente. Boscha y Amity, aún con sus postura de soberbia, se hicieron notar aclarando la más alta su propia voz.

- ¿Qué es lo que pasa? - Fue Boscha quien habló tras ese carraspeo de garganta.

Fue esa, la llamada de atención que necesitaba Luz, para que el aire inundara de nuevo sus pulmones, y, para que sus órganos volvieran a la posición que deberían estar, tras tantos movimientos en un par de segundos. Gus y Willow, dejaron dicho abrazo. Dandole libertad para que sus manos fueran directas a ese trozo de lana sucia que llevaba sobre su cabeza, o al menos así lo llamaba la princesa Blight, recolocó dicho gorro sobre sus orejas, y, dio la bocanada de aire que necesitaba. .

- ¡Luz ha conseguido trabajo!- El tono alto de Gus arrebató alguna que otra mirada del alumnado que pasaba por ahí.

Los zarcos de Boscha resaltaron al escuchar dichas palabras, una sonrisa picara se dibujó en su rostro, ya que una noticia como esa solo podía llegar a significa una cosa, bueno, en realidad muchas. Pero a ella, solo se le venía una única.