Después de terminar su entrenamiento Katherine se sorprendió al ver a Daniel esperando fuera de la sala, él la saludó y le dijo.
_ ¿Quieres dar un paseo o estás demasiado cansada para eso?
Desde que habían llegado a la aldea habían tenido tan poco tiempo para estar juntos que a pesar de su cansancio acepto la invitación de Daniel, queria pasar mas tiempo con él y sabía que si volvían a la habitación ella iba a terminar quedándose dormida.
_ ¿A dónde piensas llevarme?
_ Por ahí.
_ Guíame.
Daniel tomó la mano de Katherine y la llevó hasta los establos, ensilló su caballo y ambos dieron un paseo a caballo por el pequeño bosquecito que había en la aldea. Daniel detuvo el caballo frente a un pequeño lago que había en medio de aquel bosquecito y dijo.
_ Ya hemos llegado.
Daniel desmonto y alzó la mano para ayudarla a bajar. Katherine miro todo a su alrededor, era un hermoso paisaje. Ella acarició al caballo en el cuello y el animal le rozó con el suave morro la mano.
_ Es un hermoso caballo, ¿Es tuyo?
_ Si.
_ ¿Tiene nombre?
_ Sí, se llama niebla.
Aquel caballo tenía el pelaje grisáceo y ella dijo.
_ No soy adivina pero creo que ya se porque le diste ese nombre, ¿por el color de su pelo?
Daniel se rió y respondió.
_ Te equivocas, no fue por eso que le di ese nombre.
_ ¿Entonces por qué?
_ Por que nació en una mañana nublada.
_ Te lo has inventado ahora, ¿No?
_ Claro que no.
Katherine se alejó del caballo y caminó hacia la orilla del pequeño lago, Daniel la siguió y comenzó a decir.
_ Este es uno de mis lugares favoritos de la aldea, quería mostrártelo por eso te he traído hoy aquí.
_ Es muy bonito.
Daniel comenzó a desnudarse, Katherine le preguntó.
_ ¿Qué crees que haces?
_ Hace calor, quiero darme un chapuzón.
Daniel se acercó a ella acortando la distancia que los separaba, la rodeo con sus brazos y ella se rindió a la calidez de su cuerpo, él acarició su mejillas y le preguntó.
_ ¿Puedo besarte?
Katherine se rio, le pareció gracioso que le pidiera permiso para besarla cuando ya la había besado en tantas ocasiones y respondió.
_ Sí, creo que me gustaría que me besaras.
Daniel no vaciló. La beso en la sonriente boca. Fue un beso suave y a la vez feroz, como si quisiera poseerla en un solo beso. Ella rodeo su cuello con sus brazos, quería que esa sensación quedará grabada en su mente y en su cuerpo pegándose más a su torso desnudo. Sus manos se posaron en sus hombros disfrutando de la firmeza de sus músculos. Daniel deslizó sus manos bajo su camisa subiendo por su espalda con suavidad y le susurro contra los labios.
_ Te bañaras conmigo.
Katherine reaccionó.
_ ¿Quieres que me quede desnuda en este lugar?
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la princesa y la espada
FantasyKatherine princesa del reino de Algratown, fue traicionada por su tío el cuál destruyó su familia por completo y la envío como prisionera de guerra al reino de Falowen, ahí sera encerrada en un calabozo donde conocerá a un asesinó que la ayudará a e...