3._ Un Nuevo Dia

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Finalmente estaba amaneciendo. Los relojes marcaban alas 8:00 a.m, la asiática no había dormido para nada, a comparación de las otras dos que estaban totalmente descansadas para iniciar un nuevo día.

—bueno y con esto van 5 días sin dormir—alegó, anotandolo en su bitácora personal.

En cuanto terminó de anotar, la azabache salio del cuarto, había recapacitado lo que su padre le había contado. Y tenía que pedirle disculpas por su comportamiento de anoche. Bajo a la cocina con las prendas algo rotas, para su fortuna estaba su padre terminando de preparar el desayuno para los dos y así dar comienzo a su nuevo día.

—Buenos días cariño—agrego mirando fijamente al desayuno.

—¿como sabias que estaba aquí? es decir ni siquiera logré hacer ruido—pregunto algo aturdida.

—después de un tiempo te das cuenta de alguna manera Marcy, eso mismo hacen los ladrones.

—¿ladrones?—preguntó confundida.—¿acaso te han ido a robar mientras trabajabas?.

oh cierto.... Se me olvidaba que ahora trabajo como un oficial, detective— dijo en un tono tranquilo sin dejar de mirar el sarten.

—debo de admitir, que al principio se te hace difícil, pero conforme pasa el tiempo, te adaptas y hasta aprendes cosas nuevas.

Dicho esto el señor wu sirvió en los platos el típico desayuno más práctico que consistía de huevos, acompañados de unas cuantas tiras de tocino y jugo de naranja,

—bueno.... No seré tan buen cocinero, pero estoy seguro que sabe bien.

La azabache aún seguida confundida sobre lo que su padre le había comentado, juraba que a él le agradaba la idea de ser administrador en las oficinas de contaduría de la ciudad.

—¿cariño ocurre algo?—volteo a ver a su hija percatandose que estaba algo desarreglada.

Marcy se había quedado callada, aún se encontraba algo desconcertada, no había imaginado que su padre tendría otra vida después de su desaparición.

—cariño, no te quedes ahí parada, ven...—el señor le extendió la mano en forma de entrar y sentarse, lo cual su hija entendió y accedió a acomodarse en la mediana mesa que se encontraba en el centro de la cocina.

—no crei, que en algún momento llegaras a preparar el desayuno papá —explico de manera agradable la azabache empezando a comer con algo de calma.

—¿que solías comer en antilia cariño?.

—es Amphibia y mi alimentación era de verduras, frutas y un que otro insecto, tal vez suene raro pero sabían exquisitos en especial los grillos rojos...—comenzó a dar bocados profundos mientras miraba al mayor.

—ugh—dio un pequeño atraganto para seguir hablando.

—oh.. Papá se me olvido contarte que en wartwood donde estuvo anne era un especie de pueblo granjero, además de su historia, wartwood posee una gran variedad de vegetales y cosechas que generan buenas ganancias, además de haber un sistema político allí, ouh, ouh... ¿Sabias que allá aún se aplica una jerarquía? donde estuve viviendo era el castillo del rey andrias el es un gobernante alto y muy poderoso con oscuros secretos—tomó algo de aire para seguir hablando.

—dónde estuvo sasha, era una torre, ahí se aplicaba el tratado de negocios, ellos se encargaban de cobrarle a todo el valle y llevárselo a andrias, era un pequeño ejército gobernado por un sapo llamado el General grime...—balbuceo para seguir—¿que más?... ¿Que más?... Se me olvida algo, ahgh... Aaaaaaa...ya lo recorde y por último pero no menos importante estaba wartwood liderada por el alcalde toadstool.

Tiempo (Marcanne) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora