69.

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— Así que, ¿qué estuviste haciendo este último tiempo?— Kayla le preguntó a Dick antes de llevarse la copa que sostenía a la boca.

— Honestamente estuve de un lado a otro. Aún trato de encontrar un lugar agradable.— respondió éste.

— ¿Tú solo?— interrogó ella, enarcando una ceja.

— ¿A qué te refieres?— Dick frunció el ceño y sonrió levemente.

— ¿No has conocido a nadie?— aclaró Kayla. Él rió por lo bajo y negó con la cabeza.

— Prefiero estar solo.— respondió a su pregunta. Yo no pude evitar dejar salir una breve risa irónica.

— Vaya noticia.— murmuré con sarcasmo.

— Jason.— me reprendió Kayla, pero yo mantuve mi vista fija en Dick.

— ¿Ya no te agrada dejar a las personas de lado? ¿O simplemente ya nadie se acerca a ti?— continué, ya sin molestarme en retener el impulso de hacerle saber mi enojo que había estado guardándome desde que lo había visto llegar.

— Ya basta.— pidió Kayla. Inexplicablemente, ver que ella intentaba defenderlo me fastidiaba aún más.

— ¿Qué? Solo estoy diciendo la verdad.— hice gestos con mis manos, indicando inocencia.

— No los dejé de lado, Jason. Simplemente me alejé para evitar traerles más problemas.— interrumpió Dick.

— Deberías haberte mantenido lejos.— respondí a su comentario en tono cortante.

— Sé perfectamente que no quieres verme. Solo vine por su cumpleaños.— alzó una mano para señalar a Kayla. Yo me acerqué a él.

— No eres bienvenido aquí, así que no vuelvas.— le ordené con seriedad.

— No quiero pelear contigo.— habló en voz baja, a lo que yo reí.

— ¿Qué pasa? ¿Tienes miedo?— pregunté a modo de burla. Él tardó unos segundos en responder.

— Retrocede.— pidió finalmente. Una vez más yo reí irónicamente, incrédulo de que tuviera la audacia de darme órdenes como solía hacerlo, creyendo que yo era uno más de los que le debían algo.

— Por si lo olvidaste, yo ya no acato tus órdenes, Grayson.— di otro paso en su dirección, quedando a centímetros de él, con la intención de demostrar que no le tenía miedo.

— No busques problemas donde no los hay, Jason. No vine aquí a pelear.— repitió, lo cual empujaba mi enfado cada vez más hacia el límite.

— Tú eres el problema, Dick.— llevé mi dedo hacia su pecho para señalarlo, empujándolo en el proceso.

— Mantén tus manos apartadas.— se apresuró a bajar mi mano mediante un brusco movimiento, lo cual inevitablemente me hizo explotar. Sin previo aviso le proporcioné un buen golpe, provocando que retrocediera un poco.

— ¡Jason!— oí a Kayla exclamar, pero no aparté mi atención de Dick tras notar que se apresuró a volver a acercarse para regresarme el golpe, igualmente molesto. En cuanto alzó su brazo y cerró su puño yo me hice a un lado, empujando su espalda y logrando que cayera al suelo.

— ¿Quieres más?— vociferé con el fin de provocarlo. Me dispuse a acercarme a él para arremeter contra su cuerpo nuevamente pero me detuve tras sentir un tirón en mi camiseta.

— ¡Ya basta!— Kayla chocó ambas manos contra mi pecho para empujarme y apartarme de Dick.— ¿Qué demonios te pasa?— cuestionó, y pese a su notorio enojo supe que estaba al borde del llanto. Yo la miré en silencio antes de desviar mi vista al resto de los invitados, quienes me miraban sorprendidos, preocupados e incluso algo incómodos.— ¿No te bastó con lo que hiciste en la Mansión Wayne que también tenías que arruinar mi cumpleaños?— ella siguió descargando su frustración, ignorando las miradas de todos los presentes. Su voz enfurecida conmigo hizo que mi mente volviera a la realidad como si me hubiesen tirado un balde de agua fría.

— Kayla.— me dispuse a acercarme a ella con el fin de disculparme, pero ella se apartó.

— No te atrevas.— negó con la cabeza, indicándome que mis disculpas no ayudarían en nada. Caminó con apuro hasta el dormitorio y todos se apresuraron a volver a lo suyo, probablemente para no generar inconvenientes o aumentar el mal clima que se había creado. Me dispuse a seguirla pero me detuve al ver a Dawn plantándose frente a mi y alzando una mano.

— Yo me encargo. Tú ya hiciste suficiente.— indicó antes de seguir a Kayla. Yo suspiré y me froté el rostro, sintiendo la frustración apoderarse de mi.

ᴍᴏɴsᴛᴇʀs |JASON TODD|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora