Con un beso en la noche;(Betty x Michel)

Cap3. Una vela y dos copas

Betty y Michel quedaron para noche la gran noche que ellos dos iban a tener su cita, una cita como en las películas, con un hombre de buenos modales, francés, alto, rubio y con ojos azules, y no solo por ese hombre que toda mujer sueña no, si no porque está cena seria la 1ra de betty, que un hombre se haya atrevido a invitarla a cenar nunca se lo hubiera imaginado y menos un hombre como Michel Doinel.

Betty no sabía que ponerse, pues no sabia como sería la cita informal o formal pero intento buscar lo mejor que hizo y también le pidió una ayuda a Doña Catalina.

C: Alo?
B: Hola doña Catalina
C: Ay hola betty, que tal? como se la está pasando haya en Cartagena?
B: Muuuy bien doña Catalina, gracias, le llamaba porque necesito su ayuda
C: Digame betty, de lo que necesite
B: Es que Michel...
C: Ajá -Pone una sonrisa detrás del teléfono-
B: Michel me invitó a cenar, una cita JOJOJO, y no se que ponerme, pensé que usted me podría ayudar en esta ocasión
C: Ay claro que si betty, mire dígame que ropa llevo y le diré cómo vestirse, esta noche es especial  -Soltando una sonrisa picara-

Después de hablar un buen rato sobre la ropa y como podría hacer la combinación perfecta para su cita con Michel, ella terminó de arreglarse, tenia una camisa ligera tipo transparente negra, y abajo tenía un short que le  llegaban hasta las rodillas de color mescliya claro, se maquilló levemente como a ella le gusta.

Después de tantas horas de esperar, Michel, un príncipe azul llegando a su departamento para irse a cenar, le toca la puerta a su departamento, betty decide salir para no hacerlo esperar mucho tiempo, después de eso se saludan y Michel le da su brazo de forma de gancho y en lo que llegan al carro comienzan a platicar, Michel le comienza a alagar el vestir que tenía betty y ella el de él, ya que el tenía una camisa turquesa, con un pantalón blanco con zapatos negros, muy elegante en esa ocasión, después de llegar al carro, fueron directamente al restaurante, un restaurante medio elegante, tenías que tener reservación para conseguir una mesa por suerte Michel reservó una, en una terraza, la fachada del restaurante todo negro pero cuando entrabas veías que el blanco y el café estaban casados, las mesas de madera con un mantel rojo y blanco, muy elegante y muy romántico, a los 2 les encantó como se veía, después de ver cada uno de los detalles del lugar comenzaron a ordenar.

X: Hola buenas noches, mi nombre es Andrés Manuel y los estaré atendiendo durante toda su velada -Les entrega el menú y se retiro-
M: Que quieres pedir betty?
B: Hmm no lo se realmente todo se ve bueno JOJOJOJO, pero estaría bien una ensalada con trocitos de pollo
M: Buena elección y de beber?
Antes de que esta contestara el tómala palabra y le propuso algo.
M: Me dejarías pedir por ti, de beber, no será nada de alcohol o algo que sea muy fuerte
B: Bueno, confío en su instinto

Los dos sonrieron, y se echaron una sonrisa coqueta sin saberlo. En lo que llegaba el mesero comenzaron a ver el mar, betty aunque ya lo hubiera visto todos los días y la mayoría de sus horas aún estaba fascinada, de ese azul ligero que pintaba en el mar, y veía como chocaban las olas con la una y con la otra, y del otro lado Michel, con esos ojos azules miraba con ilusión a betty, la veía como una niña pequeña contemplando una y otra vez el mar, pero ella contemplaba el mar y el la contemplaba a ella. Después de un buen rato llego el mesero a pedirles sus ordenes.

X: Listo, disculpen la tardanza, que desean ordenar?
M: Bien, pues para la señorita seria una ensalada con trocitos de pollo, para mi seria milanesa con papas fritas, y de beber sería un vino tinto por favor.
X: Correcto enseguida vuelvo con sus pedidos
M: Esta bien lo que pedí para beber? -Agarrandole de la mano siligilosamente-
B: Si, si si, he probado el vino en algunas ocasiones y no es tan fuerte JOJOJO - Diciendole nerviosa por el tacto que Michel le dio y acomodándose los lentes-

Después otra vez quedaron en silencio, haciendo lo mismo que la última vez, betty viendo el mar y Michel viéndola a ella, como si fuera lo que más les gusta. En un buen rato había llegado su pedido.