CAPITULO 15

657 73 20
                                        

Luego de ese momento, estábamos en cada periódico, en cada canal de noticias y en cada red social. Había comentarios que hacían que mi corazón doliera, y aunque me esperaba todo esto, aun así dolía. No había tenido valor para hablar con mis amigos; me llamaban, pero no les contestaba el teléfono. Estoy dejando que esto me afecte más de lo que debería. Aunque no quería que se me notara, no quería que Jungkook se diera cuenta de que cada vez estoy más lastimado. He bailado mucho intentando sacar esos pensamientos de mi cabeza, pero es imposible. No puedo rendirme así de fácil, no después de todo lo que él hizo por mí. Después de que me besó en la conferencia de prensa, mi madre y su padre quedaron paralizados y se fueron sin decir nada, y eso me preocupa. Tengo miedo de que puedan cumplir su amenaza y de lo que puedan llegar a hacer.

Pasaron cuatro días desde el acontecimiento, pero aún seguimos siendo la noticia principal en todos lados. En la universidad, todos me miran raro, pero también hay algunas pocas personas que se han acercado a decirme que me felicitan por lo valiente que fuimos, y a esas personas les agradezco, porque eso me hace recordar que lo que hice no está mal.

Jungkook ha venido a pasar estos días aquí porque no quiere ver la cara de su padre y para asegurarse de que esté bien. No importa si no lo estoy, porque cuando me envuelve en sus brazos, sé que todo estará bien y toda la angustia y miedo desaparecen de mi interior. No sé qué sentirá él ahora, pero estoy seguro de que es lo mismo que yo. Él intenta mantenerse fuerte por mí, pero sé que en el fondo está lastimado, y eso me rompe el corazón.

Después de cuatro días sin contestar el teléfono a nadie, decidí hacerlo cuando me llamó Sana esta tarde. No sé qué le diré.

-Jimin, me tenías preocupada. ¿Por qué no contestabas las llamadas? -Pude escuchar apenas puse el teléfono en mi oreja.

-Lo siento, Sana... No sabía qué decir.- No quería mentirle, así que solo decidí decirle la verdad.

-¿Qué vas a decir, tontito? Todo está bien. Yo y todos los chicos queríamos decirte que tienes todo nuestro apoyo. Y si soy yo la que te preocupa, estoy bien. Si tú eres feliz, yo, como tu mejor amiga, también lo soy. Yo y los demás estaremos siempre para ti, no importa qué pase, ¿ok? No tienes por qué esconderte de nosotros.- Sentí como si una piedra saliera de mi pecho cuando escuché esas palabras al otro lado de la línea. Tenía miedo de que me dieran la espalda; en el fondo, lo temía.

-Gracias, Sana... de verdad, muchas gracias por no irte. - Pude sentir un suspiro al otro lado del teléfono, esos que hace cuando mueve la cabeza mientras ríe.

-No tienes por qué agradecerme nada, Jimin... claro que no me iría a ninguna parte.- Sin querer, una amplia sonrisa apareció en mi rostro.- Necesitamos ver tu cara; ¿te parece que salgamos esta noche? Va a servir para que te despejes. - Me quedé en silencio por un momento.

-No sé si es buena idea, todos me tienen los ojos puestos encima últimamente.- No quería que todos murmuraran detrás de mí.

-Vamos, Jimin... no tiene que importarte lo que los demás piensen o digan. Tienes que salir y enfrentarlos con la frente en alto.- Tenía razón, no podía esconderme para siempre.

-Está bien, voy a confiar en ti. Nos vemos esta noche - Pude ver cómo Jungkook salía del baño con una toalla amarrada a la cintura. Me abrazó por detrás y apoyó su mentón en mi hombro después de besarme la mejilla.

-Así se habla. Pásame a buscar a las diez, te estaré esperando. Si no vienes, juro que te mataré - Yo solo reí como respuesta.

-Qué miedo... estaré ahí, no lo dudes. - Después de una risa, corté el teléfono.

-¿Era Sana?... Al fin contestaste su llamada -Dijo Jungkook en mi oído, detrás de mí.

-No podía ignorarla para siempre y el miedo que tenía ya no está... -Sonreí aliviado y me volteé para quedar frente a frente. Él pasó sus manos a mi cintura y yo las puse alrededor de su cuello.

Atado a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora