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Con Shampoo llegando tarde, todo el mundo guardó silencio ante la nueva incómoda atmósfera. Muchas de las personas presentes tenían maneras de enterarse de las cosas que sucedieron dentro del Palacio por no hablar de algo tan importante como los puntajes entre estas dos mujeres

En cuanto la joven de pelo morado avanzó vigorosamente a través del pasillo como si fuera su propia casa exudando un aire imponente mientras dos hombres la seguían detrás colgando un enorme cofre en sus manos, todos asumieron que estaba haciendo un acto para ganar el favor de la nueva emperatriz y congraciarse después de adquirir un puesto importante como lo era la rama marítima del oeste. Sin embargo, sus palabras no fueron más que sátira cuando habló dándose aires de ser superior —Bendiciones a su majestad— dijo inclinándose pero manteniendo la misma postura altiva —He aquí un pequeño presente mío, nuestra costa es tan próspera que no escatimamos en el presente de su majestad, espero lo pueda recibir con buen agrado— acto seguido, fué abierto para revelar una considerable cantidad de plata y oro dentro

Esto ¿Qué era esto?

La multitud aspiró un aliento frío mientras observaba la escena. En realidad, no era solo Shampoo tratando de satirizar a la emperatriz llegando tarde, era una descarada muestra de fuerza y humillación contra su estado superior. Por mucho tiempo se había corrido la voz de que los arreglos para el banquete de hoy habían sido frugales arraigandose a los estándares más rudimentarios para la comida,  por lo que naturalmente muchos estimaban la verdadera situación de las arcas monetarias del Imperio, aunque todos guardaban sus dudas era imposible no especular. Sin embargo, la joven de pelo morado había utilizado eso para dar un golpe a la casa real de forma implacable

Akane por un momento se quedó sin habla. Ella había crecido en un ambiente palaciego, lleno de personas que intentaban congraciarse con ella para alcanzar altos rangos cuando sucediera su coronación. Pero también fué rodeada de hipocresía y falsas buenas voluntades ¿Cuántos realmente no querían apuñalarla por la espalda?

Su vida como princesa fué pacífica después de todo, rodearse de gente no era su mayor objetivo, pero siendo ahora la mandataria no podía hacerse de la vista gorda ante las demostraciones de desprecio. Su educación fué erguida desde los más altos estatutos académicos ¿Cómo podría verse tan endeble ante una multitud de personas por un simple subordinado? Además, Shampoo apenas había conseguido su puesto hace poco, por lo que naturalmente no tenía todo el control de la zona oeste a pesar de regirla. Asumiendo por su actitud, nadie le había dicho que esto no sólo humillaba a la casa Imperial, sino a sí misma. Seguramente muchos codiciaban su posición y harían todo lo posible para hacerla tropezar

En este caso, nadie le advirtió nada.

Haciéndola parecer tan desesperada y poco firme, no obstante, ella era a lo sumo un bukafu mientras Akane la superior de todos los presentes

Su dignidad como emperatriz era la dignidad de todo el país, si hoy no trataba con ella, definitivamente los demás la creerian débil

¡Pero!

Fué una desgracia también tener el lugar más alto de todos. No sólo tenía que velar por el país, también debía parecer magnanima e imparcial ante sus adherentes, de otra manera parecería una tirana inadecuada para gobernar. El quid era ¿Cómo responder? Un castigo demasiado suave y no funcionaría para hacerla lamentarse sus tontas decisiones

Un castigo demasiado severo y podría perder más que ganar. El impulso de mandarla al calabozo fué momentáneo, aunque se encontraba en una posición difícil, Akane no era un oponente ignorante y fácil de intimidar —Bukafu Shampoo, agradezco su buena voluntad, puede levantarse— dijo Akane con una expresión indolente —Ya que la costa oeste sigue siendo tan próspera como siempre, espero que no le moleste que tome su regalo y lo done para los fondos de socorro— tres puntos dolorosos fueron expuestos con un solo fraseo

Número uno: su buena voluntad. Todos aquí vieron que Shampoo no tenía intenciones de someterse a ningún regimen por sobre ella, si ofendía de esa forma a la emperatriz, nadie más podía esperar un trato adecuado. Además, incluso omitió hacer su reverencia al emperador, ignorarlo para enfrascarse en una pelea con Akane era ciertamente poco inteligente ¿Planeaba sublevarse? Esto fué como hundir su propio barco si no tuviera los medios para un enfrentamiento directo

Número dos: que la costa oeste seguía siendo próspera. Esto no sólo le recordó a la multitud, sino a Shampoo que a pesar de obtener un puesto importante, no era su trabajo el que llevó a la costa oeste a ser exitosa. Más bien fué el resultado de diversas fuerzas para hacer mover su comercio a niveles tan fructíferos desde hacía años, lo que indicaba sin lugar a dudas que Shampoo solo se estaba aprovechando del trabajo ajeno para hacer alarde de una riqueza que ella no generó

Y tercero: Akane no estaba tomando el presente para sí misma, lo rechazó con inteligencia moviendolo al fondo de auxilio. De esa forma fué tan limpio el movimiento que nadie podría refutarlo, en su lugar, deberían elogiarla por donar sus propias cosas a la gente común ¡Fué un movimiento aún más formidable! No sólo rechazó la humillación, sino que mitigó gran parte de las dudas acerca del tesoro nacional y sus números

Las personas comunes pensarían que de verdad estaba celebrando con sencillez en nombre de toda la gente que no tenía un techo con comida caliente. Que una persona de su nivel político se pusiera en el lugar de los plebeyos fué sin duda una gran muestra de empatía

Muchas de las personas presentes tomaron esta acción en sus corazones, como un registro de lo capaz que era Akane como emperatriz. Ni siquiera tuvo que recurrir a un castigo formal para devolver el ataque, esto habló muy bien de su inteligencia. Este año sólo tenía veinte años, pero ya estaba llena de sabiduría

Aunque todos sabían que su educación fué superior, esto no dejaba de ser una grata sorpresa. Por supuesto para los partidarios de la dinastía de cabellera azul, fué una fuente de orgullo pertenecer a su facción alzando la cabeza con firmeza para que pudieran ver que el pilar en el que se apoyaban era el correcto.

Sin embargo, Akane no había terminado. Su siguiente movimiento fué incluso más impactante que el anterior —Ya que estámos tomando esta importante cantidad de sus bienes, no se preocupe de participar en la subasta de caridad. Con ésto, estoy segura de que la gente se llevará una buena impresión suya en sus corazónes

¡Un retiro de autoridad!

Aunque la subasta era un asunto benéfico en sí, seguía siendo patrocinado por la casa Imperial, solamente la emperatriz como organizadora podría poner reglas sobre el asunto. Lo que fué más humillante, no fueron sus anteriores palabras, sino el vetarla para que no pudiera hacerse un nombre bondadoso ante la multitud

Muchas de las personas presentes no comprarían articulos solamente por curiosidad o deseo, todo era para parecer más bondadosos a los ojos de la gente común. Nadie quería desaprovechar la oportunidad de hacer alarde de su buen corazón. Cortar a Shampoo la oportunidad de extender su buen nombre era igual a quitar su autoridad. Solo pensando ¿Cuánta gente de verdad te respetaría u obedecería sólo porque ostentas un título vacío? Para tener poderes sobre el resto, uno debía allanar el camino

Mientras más fuerte sonara tu nombre, más apoyo popular tendrías y por lo tanto más inmunidad. No atacarían tan fácil a una persona que es apoyada por el pueblo porque sería equivalente a ofender al pueblo, es por eso que muchas tretas se hicieron por debajo del agua y sin involucrar a los pobladores

Sólo en ese momento, Shampoo se dió cuenta de que había cometido un error con su actitud.

Continuará...

Poliandría II El rapto de la reina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora