Criada por All For One [Shoto Todoroki x Lectora]

Capítulo 16

–¡No puedes hacer eso, Bakugo! –grita Iida, mientras Kacchan abre las puertas sin más.

Ahí dentro, están Yaoyorozu y Shoto, abrazados y sus caras demasiado juntas, dándose un beso.

Siento como se me cae el estómago a los pies.

Se me entre corta la respiración y lo siguiente pasa en cámara rápida para mi.

Kacchan tira del brazo a Yaoyorozu sin cuidado y me deja a mi dentro del armario. No alcanzo, o no puedo, mejor dicho, decir algo.

Así que ahora me encuentro dentro del armario, con Todoroki, luego de verlo junto a Momo.

–¡Salgan todos de acá, malditos extras entrometidos! –escucho los gritos de Kacchan, y sus explosiones.

–______... ¿Qué pasó? ¿Qué haces aquí? –ignoro las preguntas de Todoroki mientras me abrazo a mi misma.

Hace poco Todoroki me estaba diciendo que yo sería su tipo de novia perfecta ¿Y ahora se besaba con Momo, sin más? ¿Ella también es su tipo de novia, acaso?

–______... háblame, por favor –susurra mientras intenta acercarse a mí, el espacio es reducido, pero me apego lo más que puedo a la pared, para alejarlo lo más posible de mí.

Pasan unos momentos en silencio, no sé exactamente cuánto tiempo, pero no le hablo. En mi mente solo se reproduce ese beso, una y otra vez, mientras miro un punto fijo y me aferro más a mis propios brazos.

–Vamos, ______... no nos estábamos dando un beso...

–¿Entonces se estaban dando respiración boca a boca, estando los dos conscientes? ¿O estaban hablándose muy cerquita? Por dios Todoroki, yo sé lo que vi –digo en un tono muy duro.

No habla mi lado racional, si no mi lado lastimado por la escena vista.

–N-no... bueno, tal vez sí era un beso... pero no pasó como lo crees –coloca sus manos sobre mis hombros para intentar darme vuelta, pero me niego.

–No quiero oír los detalles, Todoroki. Así que mejor... solo cállate –murmuro molesta.

–Pero.. ¿Qué haces tú aquí? Para empezar –se cruza de brazos.

–Ah ¿O sea que ahora no puedo meterme a los muebles de mi propia casa? –lo miro a la cara frunciendo el ceño–. Yo no te pregunto por qué estaban tan acaramelados ustedes dos aquí dentro.

–Yaoyorozu se me declaró –suspira pesado Todoroki.

–Felicidades, ojalá sean muy felices. Si tienen bebés, seguramente serán preciosos. Tienes mi bendición si quieres también. O mejor aún, te presto toda mi puta casa para que te cases con ella –murmuro mientras siento que lágrimas se acoplan en mis ojos, no parpadeo para que no salgan de ahí.

–¡Déjame explicarte, ______! –Todoroki me toma de los hombros y me obliga a mirarlo. Gracias a la poca luz que entran por las rendijas del mueble, ve las lágrimas en mis ojos, y su cara se suaviza mientras me abraza–. Yaoyorozu se me declaró, pero yo la rechacé.

–Pues no debiste –digo mientras me tiembla el labio–. Ella sería una novia genial para ti. Quizá sea tu novia perfecta. Es decir, se veían muy lindos mientras se besaban.

–¡Ella me besó! Yo no a ella –me sujeta por las mejillas el bicolor, obligándolo a mirarlo a los ojos–. Créeme, yo solo te quiero a ti. Me muero por ti, ______.

–Y si ella te besó en contra de tu voluntad ¿Por qué no simplemente te alejaste? ¿O sus labios estaban pegados? –murmuro, triste.

–Me tomó por sorpresa, ______. Cuando nos metieron aquí, ella me dijo que se sentía atraída por mi. Yo le dije que me sentía alagado, pero que me gustaba... no, que estoy enamorado, muy enamorado de otra persona.