Criada por All For One [Shoto Todoroki x Lectora]

Capítulo 22

La clase 1-B será la primera en asustar a la clase 1-A, y luego será al revés.

Hacemos parejas para comenzar el recorrido. Yo voy con Deku, y somos los últimos en salir. 

Íbamos a empezar el recorrido cuando sentimos gritos y vemos a una lagartija verde gigante, con múltiples espadas, que nos viene a atacar. 

–Con que estos niños se creen héroes –sonríe lamiéndose los labios–. Stain diría que todos ustedes son impuros. 

¿Un villano? 

Villanos. 

La Liga de Villanos. 

Se acabó. 

Todo se acabó. 

Los villanos llegaron para atacarnos, y luego de esto, ya nada más. 

Es el fin. 

Es el fin de ______ Kogawa. 

Comienzo a desesperarme, pero miro a mi alrededor y no veo al pequeño de gorra roja.

–¡Deku! ¡Hay que buscar a Kota! –le grito asustada. 

–Tienes razón. Esta tarde salió a jugar, y no lo veo desde entonces –dice preocupado.

–Yo sé donde está. Sígueme. 

Comienzo a correr al lugar que Kota me enseñó. Lo más seguro es que esté dentro de la cueva en la montaña. 

Por favor, que no se encuentre con ningún villano. Si no, ese villano se las verá conmigo. 

Corremos hasta llegar y entro en la cueva a tientas. Está todo oscuro, así que alzo la voz.

–Kota-san, soy ______. Vine por ti, es necesario que volvamos al campamento.

Kota no responde. De pronto, escucho una risa muy ronca para ser de Kota. 

Pasos firmes se escuchan desde la oscuridad y avanzan hacia mi. 

–¿Kota... san? –pregunto, intentando ver quién o qué se acerca. 

Comienzo a retroceder y la luz que entra en la cueva deja ver a un hombre grande, musculoso y rubio, al que le falta un ojo. 

Tiene a Kota tomado del cuello, tapándole la boca con la otra mano. El niño se relaja un poco al verme, pero sigue con mucho miedo, se le nota en sus ojos. 

–¡Deja a Kota-san aun lado y pelea conmigo! –más que hablarle, le gruño al villano ese. 

Estoy enojada por que tomó de rehén a un pequeño e inofensivo niño. 

–¡Vaya! Un intento de heroína –sonríe de lado–. Espera ¿No eres tu... ______?

–Si, soy yo –trago saliva y me pongo en pose de pelea–. Ahora, suelta a Kota-san y solucionemos esto tu y yo. Eso es lo que quieres ¿no?

–Oh, claro que lo dejaré –sonríe el rubio gigante y hace su brazo hacia atrás, y en un rápido movimiento, tira a Kota hacia delante, al barranco. 

–¡Kota-san! –grito y con mi telequinesis intento tomarlo, pero no funciona. 

No soy capaz de manipular humanos.

De pronto, veo un rayo verde que va y viene. Es Deku, que con su poder pudo rescatarlo.

–¡Psychic, cuidado! –me grita Deku. 

De pronto, siento un impacto en mi costado. Veo al tipo rubio que se abalanzó sobre mi, y e empuja varios metros. Termino rodando por el piso.

–¡______-SAN! –escucho a Kota gritar.