018

933 168 56
                                    

—Hyukjae, tenemos que hablar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Hyukjae, tenemos que hablar.

Soltó de golpe el manga que tenía en sus manos. Aquellas palabras lo habían asustado, ¿Acaso hizo algo mal?

—Espera precioso, antes de que comiences con el típico discurso de no eres tú, soy yo. Por qué claro que yo no sería, es decir, ¿Quien podría dejar de amarme? ¡Cierto, nadie!.

—¿De que diablos estás habl...

—Asi que pido la custodia de los niños y la casa.

—¿Qué...

—Además de llevarme todo lo que me pertenece.

Donghae fruncia el ceño, demostrando que no entendía de que demonios estaba hablando el idol.

¿Hyukjae perdió la cabeza?

—Iniciaré con lo más importante y valioso de mi vida.

Sonrió grande.

¿Finalmente hyukjae se iría de su casa? Sin duda que era el mejor día de su vida. El ídolo se iba por su propio pie y sin necesidad de que él lo corriera.

Soltó un pequeño gritito al sentirse ser levantado. Hyukjae lo había tomado de la cintura y lo subió a su hombro como si fuera la cosa más ligera del mundo y no un hombre de casi sesenta y dos kilos.

—¡Hyukjae, bajame ahora mismo!

—Dije que me llevaría lo más valioso de mi vida y lo estoy cumpliendo, ¿No es así, Hae?.

—Deja de jugar, imbécil.

Pataleo y se removió en los brazos de hyukjae intentando ser bajado, pero nada funcionó, hyukjae no aflojaba su agarre por más que se moviera y le golpeará la espalda.

—¡Sueltame!

—No puedo amor de mi vida, si me alejas de tu vida, la mía ya no tendrá sentido.

El tono de voz de hyukjae cambio de uno juguetón a decaído, sintió su corazón apachurrarse por las letales palabras del menor.

¡No era justo que hyukjae lo atacará de esa forma! Su corazón no resistiría mucho si hyukjae continuaba así.

—¿De que diablos estás hablando?

—De eso, de que me gustas mucho y no quiero que me abandones Hae. Te necesito, si algún día dejaras de sonreír te juro que mi mundo se vendría para abajo en un abrir y cerrar de ojos.

Sonrojado, y abochornado por la declaración de hyukjae, dejo de moverse para intentar explicarle la situación.

—No se de que hablas hyukjae, pero lo que yo quería hablar contigo es que comenzarás un nuevo reality show, la empresa a firmado un nuevo contrato para ti, así que deberás actuar con sensatez en este duro programa que te fue conseguido con mucho trabajo.

Hyukjae dejo de sentir la horrible presión en su corazón al pensar que sería abandonado, para gritar y dar de brinquitos en su lugar.

—¡Espera idiota, me vas a tirar!—grito donghae, aferrándose a la delgada cintura de hyukjae.— No brinques o me tirarás, y está vez si te quedarás viudo como siempre dices cuando almorzamos.

Dejo de moverse, donghae tenía razón. No podía exponer de esa manera al amor de su vida.

Se abrazo a su espalda y parte baja de ella en un abrazo.

Estaba tan feliz de saber que donghae no quería deshacerse de él.

—Te quiero demasiado Hae, es más Te amo con toda mi alma.

—Muy poco yo diría.

—¡Hey!

Donghae rio avergonzado.

—Va en serio Hyuk, bajame.

—Pero, estoy muy cómodo así. Podría tenerte así todo el día o, ¡Ya se!—dijo emocionado—¡Podría tenerte así el resto de mi vida! ¿Qué te parece?

—Me parece que has perdido la cabeza, ¡Bajame ahora mismo!

—Aburridoooo.

A regañadientes, hyukjae lo bajo de su hombro y lo dejo con sumo cuidado en el suelo.

Le sonrió una vez estuvieron frente a frente y antes de siquiera dejarle hablar, hyukjae se lanzó a por sus labios y se apoderó de ellos como siempre que se le daba la gana. Con resignación y sin tener muchas ganas de objetar, se abrazo al cuello del menor, que le llevaba bastantes centímetros y correspondió el beso.

Las manos de hyukjae se apoderaron de su cintura, acariciando sus costados con ternura.

—Esta confirmado, me gustas demasiado.

—C-callate.

—Sin duda no me equivoqué al escogerte como el amor de mi vida.

—¡Cállate, cállate Lee hyukjae!—grigo sonrojado, cubriéndose el rostro.

Hyukjae rio divertido, dejando un dulce beso sobre los nudillos de sus manos.

Separó ligeramente sus dedos para mirar por un pequeño orificio la hermosa sonrisa de hyukjae, aquella que hasta hace poco se dio cuenta que amaba más que nada.

—Te quiero, te amo, te adoro.

—Eres un imbécil, Lee hyukjae.









Quiero que sepan que esta historia está a punto de llegar a su final.

Cómo dije en un inicio es una historia sin mucho drama y corta, por qué la tenía principalmente planeada para ser una comedia, así que estamos a pocos capítulos de finalizar.

Gracias por su apoyo.

Y gracias por existir muñequitas.

Mi asistente, ¡Me quiere Matar! | EunhaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora