Capítulo 17

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Maximiliano:

—Perate un poco, cuéntame esa parte de nuevo que no cache —le digo al Pipe mientras el Juancri me pasa el cigarro

—Que en el carrete del viernes vi a tu hermana —me dice

—Hermanastra —lo corrijo y calo del cigarro

—Sí, si eso —dice y me quita el cigarro

—¿Qué te sorprende tanto? La Michelle es de ese ambiente, allí están sus amigos —me dice el Lalo

—No me sorprende esa wea, fue lo otro que dijo este imbécil, continua la historia po —le pego un guate al Pipe

—Pero no enoji si po —lo miro mal— ya, ¿Se acuerdan que dije que se me hacía conocida? —los tres asentimos— es que tu hermanastra se parece a una de las minas del grupo de los ángeles

—¿Quiénes? —le dice el Lalo

—Son el grupo al que le compro la mota —nos dice— se llama diablo

—Pensé que el diablo era un tipo, no una mina —le dice el Juancri

—Yo también —le dice el Pipe

—¿Qué tan parecidas son las dos? —le digo

—¿La Michelle tiene una hermana gemela con la voz más grave? —me mira

—No, creo que es ella sola

—Aparte te acordai que la otra vez tu hermana tenía algo en la pierna —me dice el Pipe

—Sí, ¿Qué con eso?

—Resulta que la mina de los ángeles tiene una herida de bala en la pierna, quizás y sea la misma que la de la Michelle

—Ya si claro, y yo soy Barney —le digo— weon, la Michelle puede ser muchas weas, pero que sea mula no creo

—Bueno, hay que averiguarlo po

Estaba por decir algo, pero me puse a pensar ¿Y si tiene razón? Quizás la Michelle si está metida en esas cosas, me puede caer muy mal y todo, pero tener que vender esas weas y que después te disparen, no se lo deseo a nadie.

—Sí, pero... —escuchamos la puerta del camarín abrirse y nos escondimos por si era algún inspector

—Ya po, cuéntame qué onda el viernes —no reconozco la voz, pero sé que es una mina

—Ya te dije todo, lo que paso con el Juano, con el Seba y con todos los otros culiaos —esa fue la Michelle, tan fina como siempre

—Pero quiero saber lo que paso con el tipo del carrete

—Puta, pero cuál de todos con los que me encontré po, digamos que es una lista muyyyyy larga

—No me acuerdo del nombre del tipo, pucha, ya mejor cuéntame cómo vai con tu pierna

Eso sí me llamo la atención y parece que a estos tres también, porque se acercaron a la puerta para poder escuchar.

—O sea, bien, ya me duele tanto como antes y... —se calla por un instante, pero no cacho porque— ahora ya sé que no tengo que hacer esas cosas

—¿Cómo qué?

—Ya sabí po, si te dije, no voy a intentar nunca más esa cosa, te juro que quede con las piernas muy adoloridas, en fin, son gajes del oficio

—A ti se te ocurrió decirle al Juano que probaran cosas nuevas po, ¿Quién te manda a decir eso?

—Sí, pero no creí que fueran cosas tannnn nuevas como esa, al día siguiente ni me podía sentar, por cierto... si van a espiar a alguien al menos saquen sus mochilas para que no cachen que están aquí

Entre cuicos [Chilena] #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora