Entre cuicos [Chilena] #1

Capítulo 7

Michelle

Bueno, el día menos esperado llego, ¡PUTO LUNES!

Me levante como a las 6 de la mañana por los gritos de mi mamá, leyeron bien 6 de la mañana weon y solo pa ir al colegio. Antes con cuea me levantaba a las 7 y media y llegaba bien al cole.

Me voy al baño y me lavo mis presas, salgo y me pongo el puto uniforme de cuica. Me peino, me pongo los calcetines largos negros y bajo las escaleras.

—Gu mornin —saludo a la Rosa

—Buenos días, niña Michelle —me sonríe— ¿Lista para el primer día?

—La verda verda —hago como que la pienso— noup

—Pero, mi niña, tiene que ir —me abraza por los hombros

—Pero es que no quiero, no quiero tener que convivir con personas iguales al simio —me quejo y ella se ríe

—El niño Maximiliano no es mal muchacho

—Ush, deberías ver como es conmigo y pensarías distinto

—Son peleas de hermanos, simplemente —me abraza y me da un beso en la frente— ¿Va a querer café?

—Por favor y ¿Me podrías decir dónde están los cereales, plis?

—Están en el mueble de allá —me apunta uno de los tantos muebles de la cocina

Mientras yo me preparaba mis cereales —obvio primero va el pocillo, después los cereales y al final la leche— la Rosa me hacia mi cafecito, la amo es como tener a mi wely conmigo.

Terminamos de hacer mi desayuno y yo me voy a la mesa del comedor a tomar desayuno con los demás.

—Gu mornin —los saludo y me siento al lado de mi ama

—¿Lista para el primer día? —me pregunta el Luis

—La verda es que nop, pero que se le va a hacer —dije echándome una cucharada de cereales a la boca

—Si no te sientes muy cómoda puedes ir con Maxi, él te va a cuidar, ¿Verdad? —mira al simio y el asiente, pero después me mira enojao

Puta weon, no me miri así, no vei que no me importa

—Gracias, Luis —le sonrió sincera— y gracias, hermanito —le sonrió falsamente al simio

—No hay de que, hermana —me sonríe de la misma forma

Weon ¿No podi ser un poquito más simpático?

Termino el súper desayuno, lavo las cosas que use y subo a mi pieza. Voy pal baño a lavarme los dientes y pongo unas zapatillas blancas —nicagando uso esos zapatos culiaos—, me pongo en la muñeca un cole, me peino un poquito, meto un par de chicles y coyacs a la mochila y toy ready.

Chucha mi celu, casi se me olvida mi bebe

Ahora si tamo ready. Me pongo la mochila en el hombro —mochila diseñada por la Lou— y bajo al primer piso. Abajo estaban el Ari y el simio esperando mientras veían sus celus.

—¿Vamos? —les digo

—¡Si! —dice el Ari feliz

—¿Enserio le gusta ir al cole? —le pregunto al simio mientras apunto al Ari

—Le encanta —me dice y camina hacia el auto

—Michelle —me llama mi ama— que te vaya bien, hija

—Gracias, ma

—¿Por qué no estas usando los zapatos de colegio? —me dice viéndome de arriba abajo