Capítulo 5

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Michelle

Weon estas últimas dos semanas mi ama me tiene de allá para acá comprando puras weas pal colegio. Me compro un escritorio, una mochila, un estuche, caleta de lápices, los cuadernos culiaos y muchas otras weas que ni me acuerdo ahora cuales eran.

Todas las weas eran muy de cuica. La mochila, el estuche, el escritorio y la silla pal escritorio eran blancas, no tengo nada contra el blanco (en especial me encanta), pero la wea es que tener una pieza entera blanca me estresa.

Hace como tres días, cuando mi ama ya me había comprado la mochila y el estuche, fui pa donde mis giles y lleve las dos weaitas esa, se las pase a la Lou y ella les dio su toque. Las weas quedaron la raja de bonitas, pero a mi ama casi se cae de poto cuando ve como quedaron.

Estaba segura que me iba a echar la media chuchaa, peor no lo hizo, solo se quedó callada. Al Luis y al Ari le gustaron, dijeron que era original. El simio del Maxi solo estuvo mirándome feo todo el rato, desde la wea que paso con la mina esa que me mira feo.

Igual no me importa las weas que haga el simio           

Hoy en la tarde vamos a ir a buscar mi uniforme a donde la modista que me lo hizo, weon me queda nada pa entrar al colegio cuico. Solo pensar que voy a estar con más personas parecidas al simio me da un soponcio.

Me levanto del sillón —sí, todavía no puedo dormir en la cama— y voy a lavarme la cara al baño, me pongo mis pantuflas de Mike Wazowski y bajo a la cocina con mi hermoso pijama —esta vez sí estoy usando pijama y no solo la polera del Juano— que era una polera negra de tiritas gruesas y un short con dibujitos de donas.

—Buenos días, Rosa —la saludo y saco un pote con fideos que quedaron de ayer

—Buenos días, niña Michelle —me saluda— ¿No prefiere que le prepare pasta fresca?

—No gracias, la comida no se desperdicia y estos fideos que hiciste ayer están muy ricos —saco dos huevos del refri

Rompo dos huevos en un boul, los bato y después le echo los fideos, prendo el fuego del horno —que me tuvo que enseñar la Rosa como usarlo—, pongo una sarten y le vierto la mezcla de huevos con fideos. Los cocino de un lado y con una espátula doy vuelta la tortilla pa que cocine el otro lado.

Saco un plato y pongo mi tortilla de fideos en ella.

 —Rosa —la llamo— ven a probar la tortilla, está muy buena

La Rosa saca un pedazo en lo que yo saco un vaso y le pongo jugo —si fuera por mi hubiera sacado bibia, pero mi ama me reta—

—¿Te gusto? —le pregunto

—Está muy buena —dice cuando termina de tragar

—Yo te dije —tomo mi plato y voy a la mesa del patio donde están todos los demás tomando desayuno— Buenos días a todos y buenos días, enano —dije sentándome al lado del Ari

 —Buenos días —me dicen mi ama con el Luis

—Buenos días, Michi —me dice el Ari

Y el simio ni me miro, puta el weon picota

—¿Qué estas comiendo? —me pregunta el Ari

—Tortilla de fideos, ¿Quieres? —asiente con la cabeza y corto un pedazo para que lo pruebe

—Está muy rico —me dice el Ari con la boca llena y yo solo sonrió

—Michelle, perfectamente pudiste sacar otra cosa para comer —me dice mi ama

Entre cuicos [Chilena] #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora