Viviendo con la bestia

8.Idiota

Habían pasado más de tres días de lo sucedido, el aun se encontraba evadiendo a la mujer que se hospedaba con él, aunque ella tampoco había hecho el esfuerzo de hablar con él.

Hoy salí temprano a la ciudad, tenia dos cosas que hacer, primero retrasar la gran pelea que tenia esta semana, así también retrasaría la salida de su casa de campo, evitando que cierta mujer quedara sola o lo dejará sencillamente.

Algo estúpido, lo sé.

¿Qué más podía hacer? No quería que nada malo le pasara y en mi casa estaba lo suficientemente segura.

Ahora me encontraba con Félix, que estaba preocupado por mí y no sé qué más...

-Sabes lo que pienso Demian, no me gusta que te pelees con James sin motivo alguno

-No pensarás que me iba a quedar así, me vale una mierda lo que todo el pueblo comience a decir, James es un chismoso.

-Bueno ¿Estas seguro de lo que pasa entre ellos?
-Yo debí escuchar a Megan antes, lleva días advirtiendome que en cuanto yo salgo de la casa, aparece James.

-No vas a creerle a esa despechada, bestia, estoy seguro que ni dejaste que te explicaran una mierda- Atinaste

-Solo trata de no meterte en líos hasta la pelea, que por cierto cambiaste la fecha sin contarme ¿no?

-Bueno, iba a decírtelo-Dije avergonzado rascándome la nuca- No quiero dejarla sola .

-Esa chica debe ser muy bella, cuéntame de ella, ya desembucha.

-Ella es muy guapa, pero es muy ingenua entonces me da miedo que logre confiar en alguien equivocado que solo quiera follarla.

-Por que tu no lo quieres.

-Claro que no, bueno si, pero no lo digas de esa forma, creo que ella me interesa, ella me atrae, quiero cuidarla, ella me crea esa sensación de querer protegerla, no me había pasado algo así desde que conocí a Carol.

-Woo, lento muchacho, ¿Sabes si ella está interesada? ¿Siquiera has intentado acercarte a ella? O ¿Solo has intentado comportarte como idiota sin hablarle?

-mmm, Me estoy enredando ¿no?... no se bien que hacer

Después de pasar varias horas charlando con el sobre varios temas del box y de mamá, me retire del gym, el sabia que el tema no me gustaba, que el hubiera perdonado a mamá y siguiera enamorado de ella, era su problema.

Esa era una de las razones por las que no me gustaba el amor, una de las dos personas siempre ama más, depende del poco amor del otro y esa sensación no me agrada para nada, no perdonaría a mamá por haberme dejado y lastimado a Félix cuando el solo le ofrecía cariño.

Solo quedaba volver a la casa de campo, esperaba que Arlet ya estuviera dormida, no soportaría ver su cara hoy, estoy abrumado con todo esto, aparte lo que me molesta que ella no quiera hablarme, no sabia que hacer sobre eso y me desesperaba, siempre mantenía todo bajo mi puto  control, esto me superaba, se que me comporte como idiota pero mis celos no me dejarón ver ni escuchar más.

Al llegar a casa, entre directo al despacho, al servirme el tercer vaso de whisky a las rocas, descubrí que mis plegarias no se habían cumplido, ahí estaba ella, hermosa, muy sexy, delante de mí, con cabeza agacha.

-Quiero irme 

Y con solo esas dos palabras, logró remover a la bestia en mi interior.